Hacía tiempo que no se llevaban a cabo proyectos arquitectónicos socialistas. Recientemente, sin embargo, Archohm, un estudio de arquitectura en la India reveló su Museo del Socialismo, una gran forma de cuña como Memorial dedicado al activista revolucionario indio Jayaprakash Narayan, proyectado en Lucknow, capital del estado de Uttar Pradesh. Además de los planos inclinados impresionantes de ladrillo rojo y negro el museo cuenta con una ventana circular de barras de metal que muestran el retrato de Narayan, que también se refleja en un panel de vidrio en las inmediaciones. El edificio de nueve metros de altura se eleva a un pabellón que da a un parque cercano y centro de convenciones.
Descripición de los arquitectos:
El Museo JPN es una puerta que enmarca el centro colocado como un monumento en forma de cuña, con un enorme arco tallado en la masa; su altura de nueve metros y luz ambiciosa de veinte metros claramente intentan empujar los límites del diseño estructural y construcción. Su techo escalonado termina en un pabellón que regala una vista panorámica del R.M. Lohia Park y el centro de convenciones.
El museo adentro es una experiencia en diseño de espacio con la representación de Jayaprakash Narayan como una narración cronológica de un recorrido lineal. Se divide en dos zonas; la zona de absorción y la zona de reflexión. Como el nombre sugiere, estos espacios permiten la absorción de la información que desencadena la curiosidad y la contemplación que se espera que conduzca a la reflexión y asimilación.
Así, el museo no es sólo un contenedor que conserva momentos congelados aunque inspiradores de un pasado, sino que los reproduce y asegura que se infiltren en la realidad actual, sentando las bases para el fururo. Entonces, mientras que las diversas exposiciones y narrativas siguen siendo el centro del escenario, el edificio ofrece superficies, volúmenes y elementos como telones de fondo táctiles.
El centro de convenciones y el museo insertados como puntos de anclaje definen un nodo principal de la ciudad junto con sus formas atrevidas pero escultóricas que recuerdan a la gente el inmenso poder que poseen; el poder para lograr un cambio.
Archohm Consults, un estudio de arquitectura multidisciplinar, en línea con la visión de Shri Akhilesh Yadav (Jefe Ministro-Uttar Pradesh), ha sido responsable del diseño de este museo.
Fuente: "Museo de Socialismo-Centro de interpretación Jayaprakash Narayan / Archohm" [Museum of Socialism-Jayaprakash Narayan Interpretation Center / Archohm] 18 sep 2016. Plataforma Arquitectura. (Trad. Quintana, Lorena) Accedido el 28 Sep 2016.
VAN GOGH, DIBUJOS CONTRA LA INDIFERENCIA
El Kröller Müller Museum exhibe sus dibujos tempranos
En los comienzos de su trayectoria, Van Gogh centró sus esfuerzos en trasladar a sus pinturas su visión personal de su entorno, de la sociedad de su tiempo. Y si contemporáneos como Isaac Israels o George Breitner decidieron llevar nuestra mirada hacia escenas urbanas de ciudades que transmitían cosmopolitismo, el autor de Los girasoles la trasladó hacia los márgenes, los olvidados, hacia quienes trabajaban duramente para ganarse la vida en humildes talleres o en el campo. Una de las paradojas de la obra de Van Gogh es que lo que hoy es mainstream y a todos complace en su momento fue absolutamente alternativo.
Él mismo explicó en una de sus cartas a su hermano Theo que trabajaba contra la indiferencia y que, en ese camino, la perseverancia no era fácil, pero que las cosas fáciles normalmente no significaban mucho.
A aquellos comienzos de la breve y fecunda trayectoria del holandés viaja el Kröller Müller Museum de Otterlo en la muestra “The Early Van Gogh”, que puede visitarse hasta el 9 de abril de 2017 y que se centra en sus dibujos, muchos rara vez expuestos dada su sensibilidad a la luz. Las piezas escogidas nos permiten comprobar como el artista dominó su técnica a la hora de representar el movimiento y el volumen de las figuras y, como ocurre en sus pinturas, apreciaremos en estos trabajos en papel que la mera captación realista de la realidad no le interesaba en absoluto, sino que lo que buscaba era trasladar a su producción la vida “en sí”, dibujar inexactitudes más verdaderas que la verdad literal.
Uno de los aspectos más atractivos de esta exhibición, abierta el pasado sábado, es que las obras se acompañan de textos del propio Van Gogh en los que las comentó en su correspondencia, pero no es la única originalidad del proyecto: su comisario, el escritor de best sellers sobre el s XIX holandés Auke van der Woud, que también trabajo en el Kröller-Müller como curador de 1974 a 1981, ha elegido acompañar la presentación de textos y fotografías de Henri Berssenbrügge (1873-1959), dedicadas también a gentes trabajadoras.
Título original: Neruda. Año: 2016. Duración: 107 min. País: Chile. Director: Pablo Larraín. Guión: Guillermo Calderón. Música: Federico Jusid. Fotografía: Sergio Armstrong. Reparto: Luis Gnecco, Gael García Bernal, Mercedes Morán, Roberto Farías y Alfredo Castro.
En estos años de creciente protesta social y moral en Chile se nos aparece Pablo Larraín a exhibirnos su fábula, su fabulación sobre Pablo Neruda. Otro Larraín, Luis Valdés Larraín, vicepresidente del Partido Conservador, en 1952, amenazó con una querella criminal a Neruda si pisaba suelo chileno, durante la persecución de González Videla: “Luis Valdés Larraín explica causas de su querella contra Pablo Neruda si éste regresa al país: denigró a su patria en el extranjero y calumnió a los poderes constituidos” (Las Últimas Noticias, Santiago, 26 de marzo de 1952). La revista de humor político Topaze lo llamó “Valdés Agarrín” (Topaze, 6 de junio de 1952).
Con una versión chilensis del glamour hollywoodense, este nuevo Larraín viene a contarnos lo que él se imagina de Neruda. La propaganda de la película no es menor: ‘Olvida lo que sabes’. Más lúdico, sentenció un ex Presidente de la República. ¡Cuándo no fue lúdico Neruda! (“Ricardo Lagos celebró el Neruda de Larraín: ‘Nadie pretende que refleje la realidad’”, La Segunda, 8.8.2016).
Cómo aguardamos el día en que un artista y cineasta chileno, ‘chileno completo, por vientre y lomo’, como le gustaba decir a Gabriela Mistral, nos haga una película que refleje la realidad histórica sobre el Neruda de los sencillos, de los que, para increíble sorpresa de todos, al fin ganarán en la historia. “Ganaremos nosotros, / los más sencillos, / ganaremos, / aunque tú no le creas, / ganaremos” (Pablo Neruda, 'Oda al hombre sencillo'. Odas Elementales, 1954). Gabriela Mistral le dijo una vez al escritor de elite Benjamín Subercaseaux: “Vos eres chileno a medias. Lo que deseo es estar satisfecha de un chileno completo, por vientre y lomo” (Benjamín Subercaseaux, “Gabriela en Petrópolis”, en Retorno de USA, Santiago: Zig-Zag, 1943).
Se argumenta con toda legitimidad que cada quien tiene el derecho de inventar artísticamente lo que le viene en gana. Los derechos sagrados del arte. Con todo, la flagrante desigualdad en Chile hace que ver en pantalla a Pablo Neruda, el poeta de la repulsa antioligárquica, de la revolución con empanadas y vino tinto, el poeta de los sencillos, el poeta de Joaquín Murieta, recreado por la fábula de Larraín no sea algo especialmente simpático: es tedioso, fastidioso, poco creíble: “En la película de Larraín se advierte una intención de desmitificar la visión del poeta como prócer ciudadano. Esta intención se realiza a través de la exacerbación hasta la parodia de ciertos lugares comunes del antinerudismo, como los del comunista burgués […]. La imagen que da la película de Neruda como político frívolo nos parece una extrapolación anacrónica de la imagen actual de un cierto tipo de político light” (Raúl Bulnes, Presidente Fundación Pablo Neruda, 'El Neruda de Larraín', El Mercurio, Santiago, 10.8.2016).
La película carga las tintas a un poeta demasiado caído al trago, con fama de ganar mucha plata, con exceso de peso, sexista, prepotente, pegado en el ‘Poema 20’. Es decir, se recogen los temas trillados y vulgares relativos a su persona. Su caracterización se hace tan superficial e increíble que en ocasiones más aparece el actor que lo encarna que la propia personalidad del poeta. La fuerza y la altura del ‘Canto General’ se reducen a ciertas connotaciones furiosas y aguerridas. Como que se hubieran congregado los estereotipos del antinerudismo, recogiendo la expresión del presidente de la Fundación Pablo Neruda.
¿Cómo explicar tan poca complicidad o intimidad con el propio Pablo Neruda? ¿Cuál es la intención artística y política de Larraín? Da la impresión que la trama está más centrada en el policía perseguidor que en el poeta perseguido, en la cacería política que en la intimidad de Neruda. ¿Larraín está más cerca del policía que del poeta? Dicho de otro modo, ¿no estará presente, en el director del filme, el visceral antinerudismo de aquel vicepresidente del Partido Conservador Valdés Larraín en tiempos de González Videla?
Para cualquier mediano conocedor de la historia nacional, decir Larraín en Chile no es tema baladí. Los Larraín conformaron la nobleza colonial: el clan de los Ochocientos. El excesivo poder y prepotencia de los Larraín fue una preocupación política para José Miguel Carrera. En La pérgola de las flores la antagonista de la obra es Laura Larraín, prototipo de una elite a distancia infranqueable de la chilenísima pérgola de San Francisco (Isidora Aguirre, La pérgola de las flores, 1959). Incluso Pablo Neruda hizo un guiño festivo a los prolongados descendientes de esos representantes del tiempo colonial: “Se asomó el vizcaíno con un saco, / el Errázuriz con sus alpargatas, / el Fernández Larraín a vender velas” (Pablo Neruda, Canto General. Ver también Pablo Neruda, “El Sr. Fernández Larraín no cambiará la historia”, El Siglo, 12.10.1954).
Neruda es más alucinante que todas las narraciones posibles acerca de su vida. Las ilusiones del arte de elite, y con visibles trazos de antinerudismo, se tornan mezquinas. Más hablan del sujeto realizador que de la obra realizada. ¿Por qué Neruda tiene que terminar hablando en francés? Una cosa está clara. Neruda buscó siempre pertenecer a las mayorías. Su obra está destinada a encender la imaginación de esas mayorías, no la de las elites enriquecidas del tiempo colonial. O la del artista como ‘pequeño dios’.
En 1952 escribió Neruda: “Ya sabemos cómo se apoderan de la historia los falsificadores oficiales de la burguesía” (Pablo Neruda, Prólogo a Hijo del salitre, de Volodia Teitelboim, mayo 1952).
Quedamos a la linda espera de una nueva producción cinematográfica. Que dé esta vez expresión a las mayúsculas fantasías colectivas del pueblo, de los olvidados de la tierra, esas que llevaron a Neruda a ser el partidario fervoroso de la dignidad luminosa y mundial de Chile en 1970. Esos olvidados que, como dijo Neruda al agradecer el Premio Nobel en nombre de todos los laureados del año 1971, “en esta ocasión feliz de mi vida me parecen más verdaderos que mi expresión, más altos que mis cordilleras, más anchos que el océano. Yo pertenezco con orgullo a la multitud humana, no a unos pocos sino a unos muchos, y estoy aquí rodeado por su presencia invisible” (Pablo Neruda, La presencia invisible. Discurso para agradecer el Premio Nobel en nombre de todos los laureados del año 1971).
Maximiliano Salinos (Fuente: El mostrador)
AMIGO DE NERUDA DESMIENTE LA PELÍCULA
En carta de Víctor Pey a El Mercurio, el dueño del diario El Clarín aclara lo que sucedió con la clandestinidad de Pable Neruda y su salida del país.
“En días pasados fui a ver la película “Neruda” –cuyo estreno en Santiago está anunciado para las próximas semanas-, dirigida por el gran cineasta Pablo Larraín, sobre la persecución que el a la sazón Presidente de la República, Gabriel González Videla, descargó contra Pablo Neruda. Dado el papel protagónico que asumí en la protección del poeta, primero, y en la elaboración y ejecución del plan de fuga del mismo a la Argentina –tema central detalladamente desarrollado en el filme-, creo pertinente dejar constancia de algunas tergiversaciones, a mi juicio fundamentales, en las que habría caído el guionista del mismo. A saber:
– El Partido Comunista intentó sacar a Neruda de Chile durante las horas en que el Senado debatía su desafuero, lo que –como bien se expone en la película- fracasó, debiendo regresar a Santiago el poeta ya desaforado como senador y los dos militantes comunistas que lo acompañaban, y, por lo tanto, pudiendo “legalmente” ser detenido. Tal situación no fue prevista por quienes así actuaban, siendo el propio Neruda el que solicitó a sus acompañantes que lo llevaran a la casa del joven ingeniero civil, militante comunista, José Saitúa Pedemonte, que vivía en la avenida Los Leones. Saitúa, que era amigo cercano mío, me informó al día siguiente de la situación en la que se encontraba, pidiéndome ayuda.
En vista de lo dicho, llevé a Neruda y a su mujer, Delia del Carril, a mi departamento ubicado en la avenida Vicuña Mackenna, donde ambos permanecieron durante varias semanas. Informé de ello a Galo González, en ese tiempo secretario general del PC, quien me agradeció la determinación, ofreciéndome lo que de él creyese oportuno solicitar. Nadie más supo ni participó del hecho. Cabe señalar que, a partir de ese momento, la seguridad personal del poeta quedó bajo mi responsabilidad, la que asumí, debo señalar, por un sentimiento de agradecimiento por haber sido incluido en la lista de pasajeros del Winnipeg por decisión personal de Neruda, pese a que nunca fui militante del PC.
– Tampoco es efectivo que, como se insinúa reiteradamente a lo largo del filme, el Presidente González Videla no hubiera querido detener a Neruda por el descrédito nacional e internacional que tal hecho podría haber producido. El gran despliegue policial ordenado desde la Presidencia a la Policía de Investigaciones, que fue a allanar las casas de los que consideraba que podían ser amigos, conocidos o simpatizantes del poeta, así lo indica. En lo personal, Neruda, en esos días, me hablaba del temor que sentía de ser detenido y ser vejado y maltratado.
– El escape secreto de Neruda en Santiago hacia Valdivia lo organicé valiéndome del apoyo que me prestaron Jorge Bellet Bastías, administrador y jefe del aserradero de madera que don Pepe Rodríguez tenía en Hueinahue, el doctor Raúl Bulnes, médico de Carabineros, y un chofer experto en reparación de autos cuya colaboración solicité al PC.
Salimos hacia el sur en dos vehículos: en el del doctor Bulnes y en otro que me facilitó el PC, un Chevrolet pintado de color morado. Llegamos a la altura de Graneros, donde el gobierno había dispuesto un control de carabineros. La credencial del doctor Bulnes nos sirvió para pasar todos sin problema alguno, incluido Neruda, ya documentado como Antonio Ruiz Legarreta, ornitólogo. Algo más allá del control nos detuvimos para tomarnos todos un whisky, en celebración por el éxito de nuestra empresa. Me despedí de Neruda, regresando a Santiago con el doctor Bulnes y él siguió con Bellet y el chofer hacia el sur, llegando al día siguiente a casa de Bellet en Hueinahue, donde tuvieron que permanecer varios días, debido al mal tiempo. Durante esa permanencia llegaron súbitamente a la hacienda Víctor Bianchi, funcionario del Ministerio de Tierras y Colonización, y don Pepe Rodríguez. Nadie más estuvo allí, contrariamente a lo que se muestra en la película.
– Aparece en el filme, en Hueinahue, un policía sobre el que se extiende un relato de extraño simbolismo, personaje que, en realidad, no existió.
– Nada se dice en el filme de la constancia que Neruda dejó grabada por su propia mano en la corteza de un árbol durante la travesía hacia San Martín de los Andes, que, como bien se sabe, rezaba así:
Qué bien aquí se respira/En el paraíso de Lipela/Donde no llega la mierda/De Gabriel González Videla.
– Las personas que atravesaron la cordillera, yendo a parar a San Martín de los Andes, fueron Neruda, Bellet, Bianchi y los tres arrieros. Nadie más.
– La película muestra escenas de desnudos generales en orgías que nada tienen que ver con la realidad vivida. Si bien la libertad en el arte es y debe ser infinita, no lo es cuando hay datos que permiten vincular los hechos con personajes de carne y hueso.
Quizás cabría concluir, tras la visión de la película, que cualquier concurso de la misma con lo que fue la realidad se debe a una mera coincidencia”.
SÍ A LA PAZ CON JUSTICIA SOCIAL Y DEMOCRACIA PLENA
La Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales en Defensa de la Humanidad por la Paz en Colombia
Todo aquel – hombres y mujeres – que en
Nuestra América ha dedicado su vida y sus esfuerzos a intentar poner fin
a la secular injusticia, explotación, violencia y marginación a la que,
generaciones tras generaciones, ha sido sometido el bravo pueblo
nuestroamericano por una rancia oligarquía que ha logrado controlar a su
entero beneficio el curso de nuestra historia, no puede sino apoyar con
todas sus fuerzas la solución definitiva de uno de los conflictos de
mayor duración y más graves consecuencias, como lo ha sido el que se ha
mantenido entre los sucesivos Gobiernos de Colombia y los guerrilleros
de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del
Pueblo(FARC-EP).
Muchos han sido los intentos de lograr
el cese de los enfrentamientos y sentar las bases para una paz duradera;
intentos que han sido liderados tanto por la propia FARC-EP como por
hombres y mujeres que desde una posición de compromiso con la justicia y
de salvaguarda de los derechos humanos, han intentado sin éxito acercar
a las partes. En esta oportunidad lo ha podido lograr un gran humanista
y defensor a ultranza de la unidad de los pueblos de Nuestra América y
de su conservación como zona de paz. Se trata del Comandante Hugo
Chávez, quien se empeñó en hacer posible la paz en Colombia, como lo
reconocen ambas partes, y cuyo ejemplo queda como compromiso de todos y
de todas ahora que los Acuerdos de Paz discutidos por ambas partes en La
Habana, llegan a su definitiva resolución y abren las puertas para que
el pueblo colombiano se reencuentre consigo mismo en paz y con justicia.
Vale destacar que tanto para la
conclusión del Acuerdo General, como para el desarrollo de las
posteriores conversaciones en La Habana ha sido determinante el
solidario papel jugado por el gobierno de la Cuba revolucionaria, quién
acogió los diálogos casi desde el inicio, así como la disposición y
colaboración de los gobiernos de la República Bolivariana de Venezuela,
del Reino de Noruega y de la República de Chile; Cuba y Noruega actúan
como garantes, mientras Venezuela y Chile son acompañantes.
La Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales en Defensa de
la Humanidad (REDH), en reafirmación de su compromiso con la defensa de
la paz, la justicia, la solidaridad entre los pueblos y la verdad,
atendió una invitación que le fuera formulada por el equipo negociador
de la FARC-EP en los Diálogos de Paz en La Habana, para una reunión
informativa sobre los avances logrados y sus expectativas en la
consecución de la tan anhelada Paz en Colombia, que es también la Paz en
Nuestra América.
En tal sentido, la REDH desea expresar
su apreciación y compromiso con este Diálogo de Paz que debe ser hoy
motivo de regocijo para todo el pueblo nuestroamericano, y en
consecuencia:
Nos sumamos a dicho compromiso y
expresamos nuestro deseo de trabajar con denuedo para que se afirmen las
condiciones que aseguren la participación de toda la sociedad
colombiana en la construcción de una paz mediada por una cultura de
reconciliación, convivencia, tolerancia y no estigmatización, y que
asegure el reencuentro, sin venganzas ni violencias, del pueblo que se
fue a las armas con el pueblo que ha resistido en silencio una situación
de opresión y de negación de sus más elementales derechos.
Abogamos porque el fin del conflicto y
la implementación de las reformas surgidas del Acuerdo Final,
constituyan la principal garantía de la no repetición de hechos
semejantes, así como una vía expedita para asegurar que no surjan nuevas
generaciones de víctimas.
Apoyamos todas las medidas que ambas
partes han acordado para un reconocimiento mutuo verdadero y la voluntad
de resarcir los daños producidos directa o indirectamente por un
enfrentamiento que ha causado por más de 50 años víctimas inocentes,
separación de las familias, migraciones internas, desplazamientos
obligados, mutilaciones, violaciones, desapariciones, muertes y
profundas heridas en el alma social.
Reconocemos como un gran aporte al
fortalecimiento del sistema de Justicia y a la consolidación de la Paz,
el acuerdo de establecer una Jurisdicción Especial para la Paz, que hará
parte del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No
Repetición (SIVJRNR); el cual permitirá que el Estado colombiano,
acompañado de una sociedad en reconciliación, cumpla con el deber de
investigar, esclarecer, perseguir, juzgar y sancionar las graves
violaciones a los derechos humanos y las graves infracciones al Derecho
Internacional Humanitario (DIH) que tuvieron lugar en el contexto y en
razón del conflicto armado.
Confiamos en que la paz alcanzada
permita un tratamiento justo y una plena garantía en la seguridad de la
vida y los derechos humanos de todas y de todos los insurgentes que no
incursos en los delitos de violación de los derechos humanos, decidan
incorporarse plenamente a la vida política de la nación colombiana. Que
no vuelva repetirse jamás la masacre cometida contra los integrantes de
la Unión Patriótica que optaron honestamente por la incorporación
pacífica a la sociedad de su tiempo.
Instamos a rechazar y condenar toda
manifestación que vaya en contra de este anhelo de paz y a mantenernos
vigilantes contra toda acción destinada a entorpecer o desviar los
acuerdos alcanzados. En particular, exhortamos a que se tomen acciones
contundentes que permitan desmontar las criminales estructuras
paramilitares, organizadas y alentadas por la extrema derecha
colombiana, que siguen funcionando, que controlan partes importantes del
territorio colombiano y que se han extendido con graves consecuencias
sobre los países vecinos de Colombia, como Venezuela y Ecuador,
amenazando con ello la estabilidad de la región.
Reconocemos que la reconciliación que
la sociedad colombiana y el mundo esperan no puede implicar impunidad en
los crímenes cometidos por las partes, pero sí debe sellarse con una
acción humanitaria como lo es la amnistía y el perdón para todos
aquellos, hombres y mujeres, presos en cárceles del Estado como
consecuencia del estado de guerra, así como el perdón para civiles
acusados de complicidad sólo por el delito de haber apoyado lo que
creían justo.
Llamamos a que este proceso de paz en
Colombia se complemente con la instalación de una mesa de negociaciones
similar con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) que asegure de
manera definitiva el cierre de una era de confrontación violenta y que
abra para siempre una de diálogo, convivencia, confrontación pacífica de
las divergencias y de participación plena de todas y todos los
ciudadanos en la conducción de los asuntos públicos y en la justa
distribución de las ingentes riquezas que caracterizan ese bello país.
Apoyamos la propuesta hecha por el
Gobierno de Juan Manuel Santos de consultar mediante un plebiscito la
opinión y el respaldo de la sociedad colombiana a los actuales Acuerdos
de Paz, y esperamos que el contundente SI que resulte de dicha consulta
sea la base para que se abra una nueva realidad política y social en
Colombia a través de la posterior convocatoria a una Asamblea Nacional
Constituyente.
Llamamos a todos los intelectuales,
artistas y movimientos sociales de Nuestra América y del mundo a
acompañar de manera decidida este proceso de paz que vive el pueblo de
Colombia, en la creencia de que el mismo habrá de contribuir a frenar al
mismo tiempo las agresiones de potencias extranjeras sobre el
territorio nuestroamericano y constituirá, al mismo tiempo que un
ejemplo a seguir, un paso muy importante en la construcción de un mundo
de paz con justicia.
En Nuestra América, a los 23 días del mes de septiembre de 2016
Extraído de Un Vallekano en Rumanía (http://imbratisare.blogspot.com.es/)
El año pasado en Moscú tuvo lugar una interesante exposición sobre la Historia Soviética en Asia
Central y el Caúcaso, titulada "Poster del Este Soviético: 1918-1940,” que mostraba 241 carteles de propaganda dirigidos a la población musulmana de la Unión Soviética, con exhortaciones a la salud pública, la industrialización, a la liberación de la mujer o la conciencia de clase, entre otros temas.
Los cárteles se dirigen a las regiones donde el Islam es la religión mayoritaria, en un intento de atraer a los musulmanes hacia el Socialismo. Para transmitir las ideas revolucionaras, los ilustradores utilizan tanto la lengua rusa como las lenguas locales, como el azerí, el tártaro, el árabe o el kazajo.
En algunos de ellos se pueden ver curiosas imágenes en las que la estrella roja socialista y otros símbolos de los trabajadores aparecen junto a la media luna islámica, en unos años en los que, explicaba el catálogo de la exposición, "la ideología bolchevique buscaba puntos de unión con la ideología islámica", limitando su rechazo a lo que esta tenía de superstición y, en especial, de herramienta de sometimiento de unos pocos sobre la mayoría.
Algunos de los carteles bolcheviques dirigidos a los musulmanes del este de la Unión Soviética y el Caúcaso, pertenecientes a la Fundación Mardjani o al Museo Central de Estado de Historia Contemporanea de Rusia (SCMCHR), que formaron parte de la exposición, son los siguientes:
Dos años de la Revolución Bolchevique– Kazan, 1919 (SCMCHR)
Dos años de la Revolución Bolchevique – Kazan, 1919 (SCMCHR)
“La vida en el este es tranquila” – Ruso y Azerí, 1920s (Fundación Mardjani)
“Con su poderosa unión, los trabajadores y los campesinos destruyen a los opresores” – Azerí, Baku, 1920s
(Fundació Mardjani)
“Campesino, !No elijas a esta gente" Ellos fueron tus enemigos y siguen siéndolo", – Tajik, Tashkent, 1920s ( Fundación Mardjani)
“!Trabaja duro para producir locomotoras” – Ruso y uzbeco, Tashkent, 1920s (SCMCHR)
“Con agua y sol tendrás comida” – Ruso y uzbeco, Tashkent, 1920s (Fundación Mardjani)
“Quien no trabaja, no come” – Uzbeco, Tashkent, 1920s (Fundación Mardjani)
“Mujeres musulmanas, El zar, el bey y el kan te quitan los derechos" –
Azerí, Baku, 1921 (Funadación Mardjani)
“No abandones tu cama hasta después de siete días del parto” – Ruso y Tártaro, Kazan, 1927 (SCMCHR)
“Trabajadores y campesinos. No dejéis que ellos destruyan lo que habéis construido en estos 10 años" – Russian and Uzbek, Tashkent, 1927 (SCMCHR)
Para los Soviets orientales, X Aniversario del Ejército Rojo
– Ruso y Uzbeco, Tashkent, 1928 (SCMCHR)
A pesar del aumento de la industrialización en las granjas “mo podemos prescindir del caballo” – Ruso y Uzbeco, Tashkent, 1933 (Fundación Mardjani)
Lenin llamaba a trabajar duro – Kazajo, Tashkent, 1933 (Fundación Mardjani)
Club tártaro– Tártaro (Escritura latina y arábe), Moscú, 1935 (Fundación Mardjani)
“Mantened la disciplina den el trabajo en las granjas colectivas” – Uzbeco, Tashkent, 1933 (Fundación Mardjani)
La mañana Vyacheslav Frantsevich Zagonek 1959-1960 Oleo sobre tela 160 x 330 cm Museo Ruso de San Petersburgo
Vyacheslav Frantsevich Zagonek nació en 1919 en Irkutsk. Fue uno de los paisajistas más influyentes de San Petersburgo después de 1950. Se convirtió en miembro de la Academia Rusa de las Artes en 1975. Se le concedió el título de "Artista del Pueblo de la URSS" en 1985. Vivió y trabajó en San Petersburgo hasta su muerte en 1994.
En la pintura "La mañana" el concepto del artista se conecta con sus impresiones de la zona alrededor del lago Onega, que visitó en 1955. En esta obra el artista refleja una imagen poética de una mañana de primavera en una granja colectiva típica de la URSS. Zagonek usa todas las técnicas artísticas que suele utilizar en sus trabajos: el diseño horizontal de la pintura, la saturación rítmica y la riqueza de los matices emocionales. La pintura es monumental, una especie de canción sobre el entusiasmo por la vida de los habitantes de la Unión Soviética después del triunfo en la II Guerra Mundial.
Título original Septiembre del 75 Año 2009 Duración 85 min. País España Director Adolfo Dufour Guión Adolfo Dufour Música José Ángel Lázaro Fotografía Miguel Ángel López, Pablo Mínguez Reparto Alberto San Juan
Xosé Humberto Baena tenía 24 años cuando lo ejecutaron. Su triste destino fue ser el último fusilado del franquismo, acusado del asesinato del policía armada Lucio Rodríguez. Hasta el último momento mantuvo ante su familia que era inocente.
En unas conmovedoras cartas, a las que en el documental pone voz el actor Alberto San Juan, relató sus últimos días y, ante su inmediato desenlace, escribió: 'Que mi muerte sea la última que dicte un tribunal militar'.
Con Baena, fueron ejecutados Ángel Otaegui, Ramón García, José Luis Sánchez Bravo y Juan Paredes el 27 de septiembre de 1975. El documental 'Septiembre del 75' reproduce el proceso lleno de irregularidades, la falta de pruebas contra los condenados, la movilización internacional con protestas en toda Europa, llegando a la retirada de embajadas, como presión para lograr los indultos. Pero, ni siquiera la llamada personal del papa Pablo VI a Franco durante la noche anterior a los fusilamientos pudo paralizar las cinco ejecuciones.
'Septiembre del 75' cuenta con los testimonios de los otros condenados en aquél proceso, cuyas penas capitales fueron conmutadas la noche del 26 de septiembre. También los abogados que los defendieron aportan datos escalofriantes sobre las condiciones en las que trabajaron, así como la arbitrariedad e ilegalidad de todo el juicio.
Pero, además del relato de un proceso que avergonzó al mundo, la auténtica razón de ser del documental es mostrar la lucha de la familia de Xosé Humberto Baena, iniciada por sus padres y ahora continuada por su hermana Flor, por limpiar su recuerdo y reivindicar la justicia que no tuvo entonces. Baena, que militaba en el FRAP, negó hasta el final haber matado a nadie, fue declarado culpable sin pruebas, sin arma homicida, sin informe balístico y sin testigos. El único argumento que se presentó fue una confesión de culpabilidad arrancada al detenido bajo tortura.
La familia Baena en aquellos momentos de desesperación llegó a recurrir al entonces Príncipe Juan Carlos, a quien dirigió una carta pidiendo su intercesión. El Jefe de la Casa Real contestó con una nota de apoyo. Ahora, treinta y cinco años después, Flor Baena sigue peleando para que alguna instancia nacional o internacional reabra el caso, se llegue a demostrar la inocencia de su hermano y conseguir la reparación moral de su familia.
'Septiembre del 75' está dirigido por Adolfo Dufour, que fue galardonado por este documental en la Semana Internacional de Cine de Valladolid y ha recibido las mejores críticas en todos los eventos en que se ha presentado.
"Mi pueblo ha sido el más traicionado de este tiempo"
Por Pablo Neruda
[Desde Isla negra, su residencia en Chile, el 14 de septiembre de 1973, Pablo Neruda escribió su dramático testimonio del 11-S latinoamericano. Luego, el 23, fallece de cáncer.]
De los desiertos del salitre, de las minas submarinas del carbón, de las alturas terribles donde yace el cobre y lo extraen con trabajos inhumanos las manos de mi pueblo, surgió un movimiento liberador de magnitud grandiosa. Ese movimiento llevó a la presidencia de Chile a un hombre llamado Salvador Allende, para que realizara reformas y medidas de justicia inaplazables, para que rescatara nuestras riquezas nacionales de las garras extranjeras.
Donde estuvo, en los países más lejanos, los pueblos admiraron al presidente Allende y elogiaron el extraordinario pluralismo de nuestro gobierno. Jamás en la historia de la sede de las Naciones Unidas, en Nueva York, se escuchó una ovación como la que le brindaron al presidente de Chile los delegados de todo el mundo.
Aquí en Chile se estaba construyendo, entre inmensas dificultades, una sociedad verdaderamente justa, elevada sobre la base de nuestra soberanía, de nuestro orgullo nacional, del heroísmo de los mejores habitantes de Chile. De nuestro lado, del lado de la revolución chilena, estaban la Constitución y la ley, la democracia y la esperanza. Del otro lado no faltaba nada. Tenían arlequines y polichinelas, payasos a granel, terroristas de pistola y cadena, monjes falsos y militares degradados.
Unos u otros daban vueltas en el carrusel del despecho. Iban tomados de la mano el fascista Jarpa con sus sobrinos de "Patria y Libertad", dispuestos a romperles la cabeza y el alma a cuanto existe, con tal de recuperar la gran hacienda que ellos llamaban Chile. Junto con ellos, para amenizar la farándula, danzaba un gran banquero y bailarín, algo manchado de sangre; era el campeón de rumba González Videla, que rumbeando entregó hace tiempo su partido a los enemigos del pueblo. Ahora era Frei quien ofrecía su partido demócrata - cristiano a los mismos enemigos del pueblo, y bailaba además con el ex coronel Viaux, de cuya fechoría fue cómplice.
Estos eran los principales artistas de la comedia. Tenían preparados los viveros del acaparamiento, los "miguelitos”, los garrotes y las mismas balas que ayer hicieron de muerte a nuestro pueblo en Iquique, en Ranquil, en Salvador, en Puerto Montt, en la José Maria Caro, en Frutillar, en Puente Alto y en tantos otros lugares. Los asesinos de Hernán Mery bailaban con naturalidad santurronamente. Se sentían ofendidos de que les reprocharan esos "pequeños detalles".
Chile tiene una larga historia civil con pocas revoluciones y muchos gobiernos estables, conservadores y mediocres. Muchos presidentes chicos y sólo dos presidentes grandes: Balmaceda y Allende. Es curioso que los dos provinieran del mismo medio, de la burguesía adinerada, que aquí se hace llamar aristocracia. Como hombres de principios, empeñados en engrandecer un país empequeñecido por la mediocre oligarquía, los dos fueron conducidos a la muerte de la misma manera.
Balmaceda fue llevado al suicidio por resistirse a entregar la riqueza salitrera a las compañías extranjeras. Allende fue asesinado por haber nacionalizado la otra riqueza del subsuelo chileno, el cobre. En ambos casos la oligarquía chilena organizó revoluciones sangrientas. En ambos casos los militares hicieron jauría. Las compañías inglesas en la ocasión de Balmaceda, las norteamericanas en la ocasión de Allende, fomentaron y sufragaron estos movimientos militares.
En ambos casos las casas de los presidentes fueron desvalijadas por órdenes de nuestros distinguidos "aristócratas". Los salones de Balmaceda fueron destruidos a hachazos. La casa de Allende, gracias al progreso del mundo, fue bombardeada desde el aire por nuestros heroicos aviadores.
Sin embargo, estos dos hombres fueron muy diferentes. Balmaceda fue un orador cautivante. Tenía una complexión imperiosa que lo acercaba más al mando unipersonal. Estaba seguro de la elevación de sus propósitos. En todo instante sé vio rodeado de enemigos. Su superioridad sobre el medio en que vivía era tan grande, y tan grande su soledad, que concluyó por reconcentrarse en sí mismo.
El pueblo que debía ayudarle no existía como fuerza, es decir, no estaba organizado. Aquel presidente estaba condenado a conducirse como iluminado, como un soñador: un sueño de grandeza se quedó en sueño. Después de su asesinato, los rapaces mercaderes extranjeros y los parlamentarios criollos entraron en posesión del salitre: para los extranjeros, la propiedad y las concesiones; para los criollos las coimas.
Recibidos los treinta dineros todo volvió a su normalidad. La sangre de unos cuantos miles de hombres del pueblo se secó pronto en los campos de batalla. Los obreros más explotados del mundo, los de las regiones del norte de Chile, no cesaron de producir inmensas cantidades de libras esterlinas para la City de Londres.
Allende nunca fue un gran orador. Y como estadista era un gobernante que consultaba todas sus medidas. Fue el antidictador, el demócrata principista hasta en los detalles. Le tocó un país que ya no era el pueblo bisoño de Balmaceda; encontró una clase obrera poderosa que sabia de que se trataba.
Allende era dirigente colectivo; un hombre que, sin salir de las clases populares, era un producto de la lucha de esas clases contra el estancamiento y la corrupción de sus explotadores. Por tales causas y razones, la obra de que realizó en tan corto tiempo es superior a la de Balmaceda; más aun, es la más importante en la historia de Chile.
Sólo la nacionalización del cobre fue una empresa titánica, y muchos objetivos más se cumplieron bajo su gobierno de esencia colectiva. Las obras y los hechos de Allende, de imborrable valor nacional, enfurecieron a los enemigos de nuestra liberación.
El simbolismo trágico de esta crisis se revela en el bombardeo del Palacio de Gobierno; uno evoca la Blitz Krieg de la aviación nazi contra indefensas ciudades extranjeras, españolas, inglesas, rusas; ahora sucedía el mismo crimen en Chile; pilotos chilenos atacaban en picada el palacio que durante siglos fue el centro de la vida civil del país.
Escribo estas rápidas líneas para mis memorias a sólo tres días de los hechos incalificables que llevaron a la muerte de mi gran compañero el presidente Allende. Su asesinato se mantuvo en silencio; fue enterrado secretamente; sólo a su viuda le fue permitido acompañar aquel inmortal cadáver.
La versión de los agresores es que hallaron su cuerpo inerte, con muestras de visible suicidio. La versión que ha sido publicada en el extranjero es diferente. A reglón seguido del bombardeo aéreo entraron en acción los tanques, muchos tanques, a luchar intrépidamente contra un solo hombre: el Presidente de la Republica de Chile, Salvador Allende, que los esperaba en su gabinete, sin más compañía que su corazón, envuelto en humo y llamas.
Tenían que aprovechar una ocasión tan bella. Había que ametrallarlo porque nunca renunciaría a su cargo. Aquel cuerpo fue enterrado secretamente en un sitio cualquiera. Aquel cadáver que marchó a la sepultura acompañado por una sola mujer que llevaba en si misma todo el dolor del mundo, aquella gloriosa figura muerta iba acribillada y despedazada por las balas de las metralletas de los soldados de Chile, que otra vez habían traicionado a Chile."
El evento es parte de las múltiples actividades organizadas este mes en la capital de Estados Unidos al cumplirse 40 años del asesinato de Orlando Letelier a manos de la DINA y la dictadura de Augusto Pinochet
El destacado artista Francisco Letelier trabajó al aire libre por más de un mes, rindiendo homenaje también a Ronni Moffitt, asesinada junto a Orlando Letelier, y a Rodrigo Rojas de Negri, muerto por una patrulla militar en Santiago en 1986
Una emotiva ceremonia este 11 de septiembre antecedió el lanzamiento de un bellísimo mural multitemático creado por el destacado pintor y poeta Francisco Letelier, como homenaje a su padre, el asesinado ex ministro del Presidente Salvador Allende, Orlando Letelier. La obra de arte celebra también las vidas de Ronni Moffitt, asesinada junto a Letelier en 1976 en Washington DC, y Rodrigo Rojas de Negri, joven fotógrafo quemado por una patrulla militar en Chile en 1986.
El evento, titulado “Todas las manos”, el mismo nombre del mural que comenzará pronto una gira por Estados Unidos, se realizó en el Kay Spiritual Life Center de la American University, en el corazón de Washington DC. La obra artística se mantendrá en exposición por el resto de septiembre en la plaza interior del Museo del Katzen Arts Center, de la American University.
“Inaugurar este mural acá en Washington en homenaje a mi padre, a Ronni Moffitt y a Rodrigo Rojas de Negri es un reconocimiento de esfuerzos culturales, lazos de amistad y solidaridad, y compromisos políticos que cruzan fronteras nacionales y distancias geográficas”, expresó Francisco Letelier. Agregó que “este proyecto ha puesto un énfasis en la identidad chileno-estadounidense y la gran solidaridad de personas que han entregado sus vidas para la justicia social no solo en Chile sino que en todos los países de las Américas. El legado de las muertes de Orlando, Ronni y Rodrigo se traduce en que sus nombres hoy son sinónimos de la búsqueda continua por la justica, la paz y la dignidad, y sus nombres son esenciales para contar no solamente la historia de Chile sino la historia de Washington DC, además de la búsqueda de principios y valores basados en los derechos humanos en todo el Nuevo Mundo”.
La ceremonia contó con la presencia de destacados intelectuales y activistas de todo el país, incluido Peter Kornbluh, prestigioso investigador que ha trabajado durante décadas desclasificando documentos del gobierno de Estados Unidos y sus servicios de seguridad, para esclarecer la verdad del intervencionismo de Estados Unidos, especialmente en la historia pre y post golpe de Estado de 1973 en Chile.
También entregó algunas palabras el Director del Institute for Policy Studies, John Cavanaugh, organismo donde trabajaba Orlando Letelier en el momento de su asesinado por la DINA el 21 de septiembre de 1976 en Sheridan Circle, Washington DC.
Otros oradores incluyeron a Joe Elridge, co-fundador del Washington Office on Latin America; Aviva Kempner, cineasta y Directora de la Fundación Ciesla; y Lori Kaplan, Presidenta del Latin American Youth Center, institución de fuerte presencia entre jóvenes latinos del área metropolitana de Washington DC. Asimismo, el embajador de Chile en Estados Unidos, Juan Gabriel Valdés, relató a título personal en un emotivo discurso su experiencia de vida junto a Orlando Letelier, con quien trabajaba al momento de su asesinato.
Juan Gabriel Valdés estuvo a punto de abordar el vehículo que terminó siendo destruido por la bomba que la policía política del dictador Augusto Pinochet instaló en el auto de Orlando Letelier, y que también terminó con la vida de Ronni Moffitt, activista, músico y también funcionaria del Institute for Policy Stdudies.
El evento contó también con la poesía del poeta salvadoreño Quique Avilés, y con la música de trova del cantautor Patricio Zamorano. “Ha sido un honor enorme poder acompañar a Pancho Letelier, a quien tengo el gusto de conocer hace mas de 10 años, y ser parte de todo su compromiso comunitario a través de sus murales y su poesía”, expresó Patricio Zamorano, también periodista y cientista político. “He tenido la oportunidad de cantar varias veces en el memorial de Sheridan Circle, pero colaborar con mis canciones con el querido Pancho es un privilegio enorme, por ser un artista que proyecta el legado de su padre con su propio trabajo social y sumamente comprometido con causas sociales fundamentales, ya sea en la Palestina ocupada, las paredes de Washington DC o los muros de los barrios de California”. Francisco Letelier y Patricio Zamorano compartieron escenario en varias canciones mezcladas con la poesía del pintor, rememorando a Víctor Jara, otro mártir de la democracia chilena, y Violeta Parra, compositora fundamental de América Latina.
El mural, compuesto de 5 paneles, recorre las vidas de Orlando Letelier, Ronni Moffit, Rodrigo Rojas de Negri y muchas figuras de las luchas sociales, ambientales e indigenistas de Chile. Lo complementan documentos desclasificados de los aparatos de inteligencia de Estados Unidos concernientes a Chile, fotos familiares, elementos del paisaje chileno y trazos realizados por estudiantes de American University y otras instituciones de Washington DC.
Francisco Letelier y parte de la familia de su padre estarán también en la ceremonia de homenaje a Orlando Letelier, el 23 de septiembre en el monolito que marca el lugar exacto de la explosión que terminó con la vida del economista, en Sheridan Circle, y que contará con la presencia de la Presidenta Michelle Bachelet.
Fuente: infoAméricas
Mural de Francisco Letelier, en la plaza exterior del Katzen Arts Center de la American University (Crédito foto: Patricio Zamorano – http://www.infoamericas.info). 11 de sep. de 2016.