viernes, 31 de octubre de 2008

"LA REIVINDICACIÓN DEL ARTE POLÍTICO"

LA EXPOSICIÓN “JOSEP RENAU: COMPROMISO Y CULTURA” CONCLUYE EN ZARAGOZA SU PERIPLO POR ESPAÑA

Tras la resaca de la Expo Zaragoza 2008, quizá esté pasando desapercibida la exposición que el Edificio Paraninfo de la Universidad de Zaragoza acoge hasta el 11 de enero de 2009 bajo el título “Josep Renau, 1907-1982: compromiso y cultura” y que, sin duda, merece la pena visitar.

En primer lugar, por poder contemplar una selección de más de doscientas obras representativas de las múltiples disciplinas artísticas en las que trabajó Josep Renau a lo largo de toda su vida: pintor, litógrafo, diseñador gráfico, fotomontador, cartelista, muralista... Pero la muestra supone, no sólo un reconocimiento a un artista olvidado, e incluso desconocido para la mayor parte del público, como otros muchos que tuvieron que exiliarse como consecuencia de la victoria fascista de 1939, sino también una reivindicación del arte político y comprometido, faceta que en la actualidad prácticamente ha ido desapareciendo entre los artistas, sobre todo, a la par que la izquierda en general, y el comunismo en particular, han entrado en crisis desde la caída del muro de Berlín. Recordemos que, incluso, fueron muchos los artistas e intelectuales que a lo largo de su vida han puesto parte de su creación al servicio de la causa comunista: Picasso, Léger, Rivera, Kahlo, Guttuso, Breton, Alberti, Brecht, Neruda... Sería una lista interminable. Sin embargo, el triunfo –¿momentáneo?- del pensamiento neoliberal ha dado como resultado que sean pocos los artistas comprometidos políticamente, y no ya digamos vinculados a la causa comunista, salvo pequeñas excepciones. A lo sumo, el arte político actual queda “reducido” a un arte crítico con las injusticias y discriminaciones que provoca el sistema capitalista pero que, a pesar de su innegable función social, necesaria y plausible, queda alejado de mostrarse ligado a una ideología concreta. Se trata de un síntoma de la crisis de las ideologías transformadoras que se apoyan en el marxismo pero quizá también de la ausencia de compromiso del artista actual y de la sociedad en general. Es por ello que la exposición de Renau viene a hacernos reflexionar sobre el valor del arte político, entendido, en su vertiente propagandística, como aquel que se elabora para la expresión de los valores de un determinado tipo de sociedad a la que se quiere defender y promover.

La exposición recoge una completa y diversa muestra de las creaciones del artista valenciano, desde sus primeros diseños de las portadas de la Revista Nueva Cultura, de la que era director, en las que ya se denunciaba los peligros del fascismo, pasando por su labor como cartelista del PCE al servicio de la causa republicana durante la Guerra Civil y los posteriores fotomontajes en el exilio mexicano, hasta llegar a las obras propagandísticas del comunismo de la República Democrática Alemana, país donde vivió durante casi 30 años y murió en 1985.

En todas ellas queda patente que su compromiso político no fue flor de un día; fue un compromiso vital, que se manifestó no sólo en sus obras de arte sino también en sus dedicaciones y hechos: Director General de Bellas Artes entre 1936 y 1938, director del Pabellón español de la Exposición Internacional de 1937 en París (para el que invitó a Picasso a realizar un cuadro, que resultó ser el Guernica), luchador antifascista, militante del PCE desde 1931 hasta su muerte, y obligado a exiliarse primero en México y después en la RDA, joven Estado al que emigró a contracorriente en 1958. En ese sentido, es destacable que cuando en la historia oficial se escribe que los habitantes de la RDA querían huir al mundo occidental y capitalista, Renau, en plena guerra fría, emprendió el viaje en dirección contraria, fortaleciendo su apoyo al campo soviético, e instalándose en un país en el que fue reconocido tanto por su meritoria trayectoria artística como por su compromiso comunista, que llevó hasta el final de sus días. Pese a que se encuentra enterrado en Berlín, lejos de su Valencia natal, sirva esta exposición para desenterrar su legado artístico, intelectual y político, y con ello reivindicar el arte político entre los artistas actuales.

José Ignacio Pérez Tapias

Más información: www.unizar.es/renau.html

jueves, 30 de octubre de 2008

NUEVO LIBRO SOBRE EL INFIERNO DE LENINGRADO

EL HISTORIADOR BRITÁNICO MICHAEL JONES APORTA DATOS SOBRE EL BRUTAL ASEDIO NAZI

El sitio de Leningrado, que los alemanes mantuvieron durante 872 días, de septiembre de 1941 a enero de 1944, fue uno de los episodios más heroicos de la Segunda Guerra Mundial y uno de los asedios más terribles de la historia.
Los alemanes bombardeaban la ciudad cuatro horas al día, entre las ocho de la mañana y las diez de la noche, a la vez que la sometían a un hambre extrema, que dio lugar incluso a actos de canibalismo; en enero de 1942 la dejaron sin electricidad ni agua corriente. Hitler había ordenado que no se aceptase ninguna propuesta de rendición; su propósito era exterminar a todos los habitantes, ya que no quería supervivientes que hubiera que alimentar.
Lo que mantuvo la resistencia e impidió que los alemanes ocuparan la ciudad no fue la fuerza del ejército soviético, sino la voluntad colectiva de sus habitantes que, a costa de cerca de un millón de muertos, supieron hacer frente a la barbarie, sin dejarse abatir. Michael Jones ha reconstruido esta extraordinaria historia basándose sobre todo en el testimonio de los supervivientes.

Durante el asedio se interpretó, tras lanzar la partitura desde un avión, la Séptima sinfonía de Shostakóvich, que había empezado a componerla en la ciudad antes de que lo evacuaran. Los músicos apenas podían tocar, por la debilidad, pero lograron unir a los ciudadanos en una retransmisión épica, de desafío a los nazis y al destino.

FRAGMENTOS DE LA 7ª SINFONÍA “LENINGRADO” DE SHOSTAKOVICH:

Movimiento 1 parte 1: www.youtube.com/watch?v=mtjAmaG7jjA&feature=related

Movimiento 1 parte 2: www.youtube.com/watch?v=iAzP54py0qI&feature=related

miércoles, 29 de octubre de 2008

HOMENAJE A MARIÁTEGUI A LOS 80 AÑOS DE SUS “7 ENSAYOS DE INTERPRETACIÓN DE LA REALIDAD PERUANA”


LA OBRA FUE CONSIDERADA EL PRIMER INTENTO DE APLICACIÓN DE LA TEORÍA MARXISTA A UN PAÍS LATINOAMERICANO

Ich will keinen Autor mehr lesen, dem mananmerkt, er wollte ein Buch machen: sondernnur jene, deren Gedanken unversehensein Buch wurden

NIETZSCHE, "Der Wanderer und sein Schatten".


ADVERTENCIA

Reúno en este libro, organizados y anotados en siete ensayos, los escritos que he publicado en "Mundial" y "Amauta" sobre algunos aspectos sustantivos de la realidad peruana. Como LA ESCENA CONTEMPORÁNEA, no es éste, pues, un libro orgánico. Mejor así. Mi trabajo se desenvuelve según el querer de Nietzsche, que no amaba al autor contraído a la producción intencional, deliberada, de un libro, sino a aquél cuyos pensamientos formaban un libro espontánea e inadvertidamente. Muchos proyectos de libro visitan mi vigilia; pero sé por anticipado que sólo realizaré los que un imperioso mandato vital me ordene. Mi pensamiento y mi vida constituyen una sola cosa, un único proceso. Y si algún mérito espero y reclamo que me sea reconocido es el de -también conforme un principio de Nietzsche- meter toda mi sangre en mis ideas.

Pensé incluir en este volumen un ensayo sobre la evolución política e ideológica del Perú. Mas, a medida que avanzo en él, siento la necesidad de darle desarrollo y autonomía en un libro aparte. El número de páginas de estos 7 ENSAYOS me parece ya excesivo, tanto que no me consiente completar algunos trabajos como yo quisiera y debiera. Por otra parte, está bien que aparezcan antes que mi nuevo estudio. De este modo, el público que me lea se habrá familiarizado oportunamente con los materiales y las ideas de mi especulación política e ideológica.

Volveré a estos temas cuantas veces me lo indique el curso de mi investigación y mi polémica. Tal vez hay en cada uno de estos ensayos el esquema, la intención de un libro autónomo. Ninguno de estos ensayos está acabado: no lo estarán mientras yo viva y piense y tenga algo que añadir a lo por mí escrito, vivido y pensado.

Toda esta labor no es sino una contribución a la crítica socialista de los problemas y la historia del Perú. No faltan quienes me suponen un europeizante, ajeno a los hechos y a las cuestiones de mi país. Que mi obra se encargue de justificarme, contra esta barata e interesada conjetura. He hecho en Europa mi mejor aprendizaje. Y creo que no hay salvación para Indo-América sin la ciencia y el pensamiento europeos u occidentales. Sarmiento que es todavía uno de los creadores de la argentinidad, fue en su época un europeizante. No encontró mejor modo de ser argentino.

Otra vez repito que no soy un crítico imparcial y objetivo. Mis juicios se nutren de mis ideales, de mis sentimientos, de mis pasiones. Tengo una declarada y enérgica ambición: la de concurrir a la creación del socialismo peruano. Estoy lo más lejos posible de la técnica profesoral y del espíritu universitario.

Es todo lo que debo advertir lealmente al lector a la entrada de mi libro.

Lima, 1928.

José Carlos Mariátegui (1894 - 1930). Periodista y escritor indigenista y marxista peruano. Impulsó la fundación de la Confederación General de Trabajadores del Perú y fundó el Partido Comunista Peruano. Editor de varios periódicos obreros y de la influencial revista Amauta.

martes, 28 de octubre de 2008

BARCELONA ACOGE POR PRIMERA VEZ UNA RETROSPECTIVA DEL ESCULTOR CATALÁN JULIO GONZÁLEZ

LA MUESTRA TAMBIÉN VIAJARÁ AL REINA SOFÍA EN 2009

Sesenta y seis años después de su muerte, Barcelona salda la deuda que había contraído con el artista catalán Julio González, considerado como el padre de la escultura moderna en hierro, pero al que nunca hasta hoy le había dedicado una retrospectiva con esculturas, bronces, pinturas y dibujos.

Hasta enero del próximo año, el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) presenta un total de 213 piezas del barcelonés, de procedencias tan diversas como el Centro Pompidou de París, el Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM), el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS), del MOMA, del propio MNAC, y de colecciones privadas europeas y americanas. Con la muestra, que también se exhibirá en el Reina Sofía de Madrid entre marzo y junio de 2009, se quiere mostrar el alcance creativo del escultor, que aunque desarrolló la mayor parte de su obra en Francia nunca olvidó su origen catalán, según ha destacado en rueda de prensa la comisaria Mercè Doñate. Durante el mismo acto, tanto la directora del MNAC, Teresa Ocaña, como el director del MNCARS, Manuel Borja-Villel, han coincidido en señalar que González, a pesar de que en España es "poco conocido y reconocido", es un artista de proyección internacional de la misma talla que otros como Alberto Giacometti.

Nacido en la ciudad condal en 1876, hijo de un orfebre y sobrino del gran dibujante Josep Lluís Pellicer, González vivió la efervescencia modernista y fue testigo de la gran transformación de la ciudad a raíz de la Exposición de 1888. Empezó a conocer el oficio en el taller de su padre y en 1899, junto con toda la familia, se trasladó a París, donde coincidió y se hizo amigo de artistas de las vanguardias de los años veinte y treinta como Constantin Brancusi, Alberto Mangelli o el compositor Edgar Varese. También mantuvo amistad con Joaquim Torres-García, Pablo Gargallo y con Picasso, aunque con éste estuvo enemistado durante más de diez años por un problema con unos dibujos de su hermano Joan, fallecido en 1908, y que habían quedado en manos de la familia de Picasso. Sin embargo, en la década de los años veinte González y Picasso volvieron a tratarse e incluso trabajaron conjuntamente en varios proyectos, como la creación de una serie de obras de hierro, entre ellas, una escultura para un monumento en homenaje a Apollinaire.

Dividida en siete ámbitos diferentes, la exposición del MNAC no cuenta, sin embargo, con la escultura "La Montserrat" (en la imagen), una de sus obras maestras, y que por su estado de conservación, el museo Stedelijk Museum de Amsterdam en el que se encuentra, no ha dado permiso para que viajara hasta Barcelona. Esta escultura -una figura de una campesina catalana con un hijo en brazos y una hoz en la mano- es una de sus figuras más dramáticas y expresivas, símbolo de la lucha por la libertad. Fue expuesta en el pabellón de la República Española en la Exposición Internacional de París de 1937, que acogió un conjunto de piezas inspiradas en hechos y escenas bélicas que reaccionaban en contra del fascismo durante la Guerra Civil española y se manifestaban a favor de la República.

En la primera sala de la retrospectiva del MNAC, el público podrá conocer los trabajos de orfebrería de González, mientras que en un segundo espacio verá sus lienzos, puesto que la vocación artística de su juventud fue la pintura, con influencias de Degas y Puvis de Chavannes.
A mediados de los años veinte, cuando el artista ya contaba con una cincuentena de años, es cuando empieza a trabajar en relieves de metal, en detrimento de la pintura, y a ensayar fórmulas para recortar y curvar el hierro, una fórmula, que le lleva a la creación de un lenguaje abstracto muy personal e innovador, fruto del dominio sobre la técnica, pero también de una libertad imaginativa y de una especial sensibilidad artística.

Fecha: Del 28 de octubre al 25 de enero de 2009

Fuente: Público

Más información:
www.mnac.es/exposicions/exp_presents_f.jsp?lan=002&id=00000031&actualPage=null

lunes, 27 de octubre de 2008

EXPOSICIÓN EN MANCHESTER DE EMORY DOUGLAS, MINISTRO DE CULTURA DEL PARTIDO DE LOS PANTERAS NEGRAS


“BLACK PANTHER: EMORY DOUGLAS AND THE ART OF REVOLUTION” SUPONE LA PRIMERA MUESTRA DEL ARTISTA EN EL REINO UNIDO

40 años después de los Juegos Olímpicos de México de 1968, cuando John Carlos y Tommy Smith levantaron provocativamente el puño como el saludo del Black Power, esta exposición muestra el significado y la historia existente detrás de dicho gesto, a través de la obra gráfica de Emory Douglas, el artista oficial del Partido de los Panteras Negras y su primer y único Ministro de Cultura.

Douglas creó un completo estilo gráfico motivacional. La exposición, nunca llevada al Reino Unido hasta ahora, muestra los trabajos de Douglas de ese periodo, incluyendo posters, caricaturas y panfletos.

Emory Douglas llegó a ser un miembro activo del Partido de los Panteras Negras en 1967. Rápidamente llegó a ser responsable de diseño del Black Community News Service de los Panteras Negras, el periódico oficial del partido, en el cual usó su fuerte estilo para comunicar las noticias y eventos a la extensa y analfabeta comunidad negra local.

Sus eslóganes, “Todo el Poder para el Pueblo”, “Revolución en nuestra Vida”, y su uso de cerdos y ratas para representar a policías y políticos han llegado a ser parte de su lenguaje cotidiano.
Coincidiendo con la histórica elección de Barack Obama como candidato a la Casa Blanca, la exposición de Manchester supone un recuerdo oportuno de cuánto ha cambiado el clima político y social desde 1968.

Fecha: Del 30 de octubre hasta marzo de 2009

Más información (con acceso a la entrevista realizada por la BBC Radio de Manchester a Emory Douglas): www.urbis.org.uk/page.asp?id=3248

VÍDEO DEL SALUDO DE JOHN CARLOS Y TOMMIE SMITH EN MEXICO´68:

http://www.youtube.com/watch?v=zW9tvV7YhQg&feature=related

domingo, 26 de octubre de 2008

EXPOSICIÓN EN NUEVA YORK SOBRE CULTURAS Y MOVIMIENTOS SOCIALES DE LOS AÑOS 60 A LA ACTUALIDAD

La década de los sesenta se presenta como eje que articula una propuesta estético-social poliforme: Signs of Change: Social Movement Cultures 1960s to Now, una exposición que tiene lugar en el Exit Art Cultural Center, neoyorkino del 20 de septiembre al 22 de noviembre.

La exposición está comisariada por Dara Greenwald y Josh MacPhee. Presenta los resultados creativos de movimientos como el de los derechos civiles y el poder negro en EE.UU, el mayo del 68 en Francia, el movimiento democrático en China, la oposición al Apartheid en África, el movimiento okupa en Europa, los diversos activismos en defensa del medio ambiente, incluyendo la oposición a la construcción de aeropuertos en Japón, feminismos, movilizaciones ante la crisis global del SIDA, movimientos indigenistas, etc. Los objetos expuestos incluyen cientos de carteles, fotografías, películas y vídeos, grabaciones sonoras y todo tipo de materiales que dan cuenta de cuarenta años de activismo, protestas políticas y campañas por la justicia social.

Signs of change se acompaña además de un vibrante programa de conferencias y debates, talleres y proyecciones. Para más información puede visitarse www.exitart.org o la página web de uno de los donantes principales, el Instituto de Investigaciones Sociales de Ámsterdam (http://www.iisg.nl/)

Fuente: Hora del sur (http://horadelsur.wordpress.com/)

viernes, 24 de octubre de 2008

"LA VIDA EN ROJO"

Título original: La vida en rojo
Dirección: Andrés Linares
País: España
Año: 2008
Fecha de estreno: 24/10/2008
Duración: 104 min.
Género: Drama
Reparto: José Luis Gómez, Mariano Alameda, Tino Antelo, Pilar Bardem, Mónica Cano, Félix Cubero, Miguel Hermoso Arnao, Ismael Martínez, Sergio Peris-Mencheta, Gonzalo Ramos, Andrés Rus, Benito Sagredo, Miguel Angel Solá
Guión: Andrés Linares e Isaac Rosa
Distribuidora: Sagrera TV, S.A.
Productora: Producciones Cinematográficas Alea


Basada en la novela “El vano ayer” de Isaac Rosa, narra las incidencias de la lucha antifranquista de un grupo de estudiantes, con la inexplicada desaparición de uno de ellos, que tras ser detenido e interrogado en la Dirección General de Seguridad se esfuma sin dejar rastro.

En plena agitación universitaria de los años sesenta en España, coincidiendo con la expulsión de sus cátedras de los profesores Aranguren, García Calvo y Tierno Galván, un viejo profesor, JULIO DENIS, de quien se sospecha pueda ser confidente de la Policía, se ve implicado en un confuso incidente que provoca su expatriación. La reconstrucción de su peripecia saca a la luz incidencias de la lucha antifranquista de un grupo de estudiantes, con la inexplicada desaparición de uno de ellos, ANDRÉ SÁNCHEZ, que tras ser detenido e interrogado junto a su compañero JAVIER en la Dirección General de Seguridad se esfuma sin dejar rastro. Su abuela, TRINI, y su novia, MARTA no descansan en la búsqueda por averiguar su paradero, pero una única persona, el Comisario RAMOS, podría aclarar que es lo que le ocurrió…

Basado libremente en el texto literario, el guión de “LA VIDA EN ROJO”, escrito conjuntamente por Andrés Linares y el propio autor de la novela, Isaac Rosa, pretende dar pie a un ambicioso largometraje que alcance fines similares a los de ésta; es decir, no limitarse a ofrecer un mero retrato de la represión franquista, sino recurriendo a testimonios de oprimidos y opresores, víctimas y beneficiarios del Régimen, situar la controversia sobre la memoria histórica, tan en boga en estos momentos, en un lugar poco frecuentado: la memoria no será en ningún caso respuesta a nada, sino la única pregunta válida, pues en palabras de N. Sartorius y J. Alfaya “Si se nos hurtó durante tantos añosla libertad no es sensato que se nos quiera hurtar también la memoria”.

Para ello se combinan en el guión una amplia gama de recursos expresivos propios del lenguaje cinematográfico, que van desde la reconstrucción de hechos realmente acaecidos, con la intervención de personajes reales, a la utilización de materiales de archivo, testimonios en primera persona, falsas entrevistas e imágenes de “tebeo”.

Se parte de una situación de entrada favorable para el buen fin del proyecto: la existencia de numerosos materiales de archivo, muchos de ellos procedentes del antiguo No-Do, que servirán para ilustrar los antecedentes históricos del relato, y también de otros muchos, algunos filmados a lo largo de los años por el propio realizador, que recogen prácticamente todos aspectos posteriores, desde la represión franquista, la vida en el interior de las cárceles, los testimonios de personalidades que vivieron los sucesos narrados, como Enrique Tierno Galván o Agustín García Calvo, entre otros muchos, hasta las asambleas, manifestaciones y diferentes formas de luchas estudiantiles libradas a lo largo de los años sesenta y setenta, a los que “LA VIDA EN ROJO” remite.

El Director y guionista de la cinta, Linares, que ha realizado también otros filmes como "Dolores" (1981) y "Alzados del suelo" (2004), ha señalado que tuvo numerosos problemas en el momento del rodaje, ya que "el Ayuntamiento de Madrid, que colabora más bien poco con el cine español, puso muchas dificultades", además, según ha afirmado el cineasta, "hay salas de cine que se han negado a proyectar la película".

Fuente: larepublica.es

jueves, 23 de octubre de 2008

ARTE FEMINISTA Y COMPROMETIDO EN EL MUSEO REINA SOFÍA

LA EXPOSICIÓN “DISIDANZAS”, DE NANCY SPERO, VIAJARÁ TAMBIÉN A SEVILLA

Nancy Spero (Ohio, Cleveland, 1926) es una de las artistas más radicales vinculadas al arte feminista, tanto en su propuesta como en su discurso político. Su obra se extiende desde su compromiso social y cultural en dos frentes: la postura crítica hacia la situación política contemporánea y la exploración del cuerpo como herramienta para formular su discurso. Esta dualidad se materializa ahora en el MNCARS, que presenta hasta el 5 de enero la primera gran retrospectiva dedicada a la artista en Europa. Pionera del arte feminista, Spero desarrolla su carrera desde la escena contestataria del Nueva York de los sesenta a través del desafío a las pautas estéticas e ideológicas dominantes. Para ello centra su obra en la elaboración de un lenguaje gráfico específicamente femenino que represente la capacidad de la mujer para transformar un espacio propio. Pero la artista se sitúa más allá, describiendo en sus obras lo corrompido del poder, las injusticias sociales y la atrocidad de los acontecimientos bélicos, utilizando referencias explícitas a elementos violentos y sexuales. Comisariada por el director del MNCARS, Manuel Borja-Villel, y la Directora de Colecciones, Rosario Peiró, la muestra cuenta con la colaboración del MACBA –donde ha sido expuesta recientemente. Las 178 obras que la componen se ordenan de forma cronológica, abarcando toda la trayectoria de Spero: desde piezas procedentes de sus años de estudiante –y que nunca antes habían sido mostradas al público– hasta sus últimas instalaciones monumentales y sus célebres experimentos en papel.

Paralelamente se desarrolla el seminario “Nancy Spero, en contexto” entre el 6 de noviembre y el 4 de diciembre de 2008.

Desde la eclosión de la llamada Segunda ola del movimiento feminista a finales de los años sesenta, la relación entre el feminismo y las artes visuales ha estado marcada por la continua disensión interna y la confrontación crítica permanente.

La obra de Nancy Spero posee el interés añadido de situarse en el centro mismo de esos debates. A lo largo de su carrera, Spero ha tomado una serie de decisiones artísticas arriesgadas que han terminado transformando su obra en objeto frecuente de controversia. Así, en un momento en el que algunas artistas feministas defendían la imposibilidad de crear imágenes del cuerpo de la mujer ajenas a los códigos patriarcales, Spero decidía limitar su universo iconográfico a la representación de figuras femeninas. La insistencia de Spero en representar la violencia contra las mujeres (torturas, violaciones de guerra, violencia sexual…) ha dado lugar, asimismo, a lecturas diversas: para algunos, se trata de un gesto inequívoco de compromiso político; para otros, de una forma de alimentar el morbo voyeurístico. Finalmente, el recurso a la apropiación de imágenes extraídas de fuentes visuales muy heterogéneas también ha suscitado interpretaciones dispares: en algunos casos, se ha insistido en asimilar a Spero a otros “apropiacionistas” postmodernos; en otros, por el contrario, se ha subrayado la originalidad de una iconografía transcultural y transhistórica que sienta las bases de un nuevo vocabulario feminista.

El seminario, coordinado por Patricia Mayayo y dividido en seis sesiones, pretende contribuir a contextualizar la figura de Spero, situando su producción dentro de esta red compleja de debates teóricos, muchos de los cuales todavía siguen vigentes en la historiografía feminista.

En la imagen: Female bomb (1966). Gouache y tinta sobre papel. 86,4 x 68,6 cm

miércoles, 22 de octubre de 2008

LOS POEMAS DE PICASSO, TRADUCIDOS POR PRIMERA VEZ AL CASTELLANO

EDITORIAL PLATAFORMA PUBLICA "POEMAS EN PROSA", POR PABLO PICASSO

Desconocidos hasta finales de los ochenta, los poemas en prosa de Pablo Picasso certifican la plural y sublime genialidad artística de su autor.

«Me dicen que escribes. Te creo capaz de cualquier cosa. Si un día me dijeran que has oficiado una misa, también me lo creería.» Con estas palabras se dirigió su madre a Picasso cuando conoció su faceta como escritor. Y es que la genialidad artística del pintor malagueño no encontraba límites. Sus poemas, poco conocidos hasta su aparición en Francia en 1989, son una buena prueba de ello.

Los poemas reunidos en este libro recuerdan mucho a sus cuadros: la sorprendente diversidad que caracteriza a su obra plástica también está presente en sus textos, que se nos ofrecen al más puro estilo del collage picassiano, y que adquieren una brillante y poética dimensión visual. No desfallece el genio ante ciertos tráfagos vitales, sólo que, en ocasiones, sortea las dificultades trocando el instrumento.

Corre el año 1935 y Pablo Picasso, en un momento de crisis artística y personal en el que confiesa incluso estar dispuesto "a dejar la pintura", abandona temporalmente el pincel y empuña la pluma. Comienza entonces a componer sus inclasificables poemas experimentales trufados de juegos de palabras, cabriolas fonéticas, elementos diversos –palabras, números, notas musicales–, y constantes alusiones a España, su cultura popular y la guerra civil.

Escritos en español y francés, son estos últimos los que la editorial Plataforma edita por primera vez en nuestra lengua traducidos por Ana Nuño. Se trata de unos textos escritos a ráfagas, en auténticos raptos de inspiración, sometidos después a constantes reescrituras y añadidos. Como resumía, sencilla y brillante, la madre del artista: "Me dicen que escribes. Te creo capaz de cualquier cosa. Si un día me dijeran que has oficiado una misa, también me lo creería".

Pablo Ruiz Picasso (Málaga, 1881 – Mougins, Francia, 1973), pintor, dibujante y escultor español. Al estallar la Guerra Civil, Picasso apoya con firmeza al bando republicano, y acepta la dirección del Museo del Prado, mientras en 1937 pinta el Guernica para el Pabellón de la República Española de la Exposición Universal en París. En 1944 se afilia al Partido Comunista Francés.

POEMAS EN PROSA

28 de octubre de 1935 si pienso en una lengua y escribo "el perro persigue a una liebre por el bosque" y quiero traducirlo a otra lengua tendré que decir "la mesa de madera blanca hunde sus patas en la arena y muere casi del susto al reconocerse tan [idiota]"

4 de noviembre de 1935 [II] espejo en tu marco de corcho – tirado al mar entre las olas – no ves sólo el relámpago – el cielo – y las nubes – con tu boca abierta dispuesta – a tragarse el sol – mas si un pájaro pasa – y por un instante vive en tu mirada – al instante se queda sin ojos – caídos al mar – ciego – y qué carcajadas – en ese preciso momento – brotan de las olas

[septiembre de] 1936 si el enternecedor recuerdo del cristal roto en su ojo no diera la hora en las campanadas que perfuman el azul tan cansado de amar del vestido que susurra que lo envuelve el sol puede en cualquier momento estallar en su mano pero esconde las garras y se duerme a la sombra que proyecta la mantis religiosa mordisqueando una hostia mas si la curva que agita la canción colgada en la punta del anzuelo se enrosca y muerde en su centro el cuchillo que la seduce y colorea y el ramo de estrellas de mar grita su desamparo el pisto trágico del ballet de moscas sobre la cortina de llamas que hierve en el borde de la ventana

3 de octubre de 1936 miserable piel de zapa abrazada al cuerpo roto de amor que sangra de tan oprimido bajo la corona de su nido de zarzas miserable recuerdo del olor a jazmín prendido en el fondo de su ojo tocando a rebato con todas las campanas al vuelo que muerde el cuello del arco iris la tempestad ha caído en la trampa peine espejo letra del alfabeto cómico gallete mano distancia color quitado de la lista de los mortales si la vida se cuece en la gran sala de fiestas con olor a col su cocido de esperanzas y le sonríe debajo de la mesa a la mentira, entonces todas las sillas sentadas en cerco se levantan y van a colgarse en las paredes de la oficina del director a la espera de que la ruleta acabe de lamer las horas que embarran las velas de su bello paraguas y oír el crujido que al romperse hace en mi pecho la varilla del timbre de su mirada de aroma de estrellas eléctricas aplastadas con el tacón

[junio de] 1937 en las entrañas del corazón están solando las calles del pueblo y la arena que cae en los relojes de arena heridos en la frente al caerse por la ventana sirve para secar la sangre que brota de los ojos asombrados que miran por el ojo de la cerradura por ver si el aire asfixiado por el hedor que se escapa de los orificios nasales de los papeles grasientos tirados al suelo o la música escondida debajo de las hojas de la vid no impide que la danza macabra borre de un plumazo la huella de las voces aferradas con las puntas de los dedos a los pedazos de pan remojados en orina un interior brillantemente iluminado recién solado chorreando sangre descansando sobre relojes de arena llenos de ojos visto por el ojo de la cerradura los caracteres de imprenta dispuestos sobre una hoja de vid borrando con sus plumas el olor a pan remojado en orina la luz suela con su sangre los relojes de arena del ojo de la cerradura con sus ojos borra de sus plumas el olor a pan remojado en orina la mezcla de colores solando los ojos de las plumas arrancadas del pan remojado en orina

2 de julio de 1937 qué triste suerte la del retrete de la vieja mandrágora - tuerta - hecha picadillo – cosido más claro que el agua al traje de novia con una estocada en la llama de la boquilla del gas de la aurora boreal puesta a secar en la flor desvanecida de la tela de seda malva de la risa de rabillo de conejo que cuenta chino y los lloros anaranjados picados a máquina de la noche dulzona. qué coqueto deseo de mi corazón de freír el montón de reverencias hecho un basilisco furibundo mientras escucha con la oreja pegada al tomillo los latigazos que castigan sus tobillos y qué triste suerte limosnera ducha en caricias la del retrete abierto a mil primaveras lleva la añoranza del espejo de su herida a la camisa de tela de araña de la vieja pordiosera inscrita al dorso del libre arbitrio picado de gusanos de la aguja que atraviesa el tallo de la flor de azahar clavada en el centro de la cortina que cubre la mandrágora

10 de enero de 1938 deja que la primavera que se acerca de puntillas se encargue de untar el amor que rezuman sus ojos en torno al frío helado que salpica el revés del sol suspendido por sus cuatro esquinas con clavos a los enormes maderos que sostienen el cielo que abate el puño sobre la arqueta que mientras tuesta su luz sobre la suave lumbre del pedazo de tela empapado en orina de rosas que cubre la pared medianera del perfume con sus excrementos hace punto con el alambre de la plomada del arco de piedra haciendo trizas el cuerpo desnudo de la mujercilla puesta a secar bajo el paño malva de su imagen que cuelga del banderín atado a la punta de la cucaña en lo cobrizo de su pecho minuciosamente dibujando en la sombra del aroma del árbol cargado de piojos abriendo su cómico sobre a grito pelado de angustia cortando la cuerda floja de la máscara de cristal de roca carcomido por los picotazos de los camiones que cuelgan encima la colmena corazón ensenada colina ficha medida olor río envolvente en espiral la palabra duerme la flecha de la lámpara se desliza sobre el papel lo cruza vivaz

martes, 21 de octubre de 2008

BIENAL DE ARTE INDÍGENA DE CHILE EN HONOR A GUAYASAMÍN

Los Trabajadores (1942)

LA SEGUNDA BIENAL CONTEMPLA, EN RECONOCIMIENTO AL PINTOR ECUATORIANO DE ORIGEN QUECHUA OSWALDO GUAYASAMÍN, UNA EXHIBICIÓN DE SUS OBRAS.

En presencia de la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, y la ministra de Cultura, Paulina Urrutia, fue inaugurada el pasado lunes la Segunda Bienal de Arte Indígena.

En la muestra participan 103 artistas y se prolongará hasta el 9 de noviembre y cuenta con el majestuoso escenario del Centro Cultural de La Moneda, en Santiago de Chile.

El comité curatorial, presidido por el arquitecto Eliseo Huencho, seleccionó las obras que participan en esta bienal, donde se escogió a 103 artistas en las distintas categorías: 35 proyectos en arte tradicional, 32 en artes de la palabra y artes escénicas, 30 en arte contemporáneo y 6 audiovisuales.

La Segunda Bienal contempla, en reconocimiento al pintor ecuatoriano de origen quechua Oswaldo Guayasamín (1919-1999), una exhibición de sus obras. La muestra incluye entre otras, las pinturas "Los bañistas", "Los Trabajadores", "La Cosecha", "La Madre y el Niño", "La Moledora de Ají", "Atahualpa Yupanqui", "Cabeza de Niña en Rojos", "Madre y Niño", "Meditación II", "El violinista", "La Cabeza de la Montaña" y "Dos Niñas Desnudas".

Su obra humanista, señalada como expresionista, refleja el dolor y la miseria que soporta la mayor parte de la humanidad y denuncia la violencia que le ha tocado vivir al ser humano en este monstruoso Siglo XX marcado por las guerras mundiales, las guerras civiles, los genocidios, los campos de concentración, las dictaduras, las torturas.

Guayasamín fue amigo personal de los más importantes intelectuales y estadistas del mundo progresista, y ha retratado a algunos de ellos, como Fidel y Raúl Castro, Francois y Danielle Mitterrand, Gabriel García Márquez, Rigoberta Menchú, entre otros.

Recibió varias condecoraciones oficiales y doctorados Honoris Causa de Universidades de América y Europa.

La expectativa es recibir a miles de visitantes, que durante 20 días sean testigos de una muestra de pinturas del gran artista latinoamericano, las que se expondrán junto a las obras de los artistas indígenas del país.

Paralelamente se realizarán una serie de foros titulados "La Mujer Indígena y su Participación Social y Política", "La Mujer Indígena y el Mercado de Trabajo", "El rol de la Mujer en la Cultura de los Pueblos Indígenas" y "El Desafío de la Multiculturalidad en Chile".

Para finalizar, se llevará a cabo el foro panel definido como "Panorama Social y Demográfico de los Pueblos Indígenas en América Latina: Su expresión en los sistemas de información estadística en Chile".

En lo que respecta a la categoría de artes escénicas se evalúa la factibilidad técnica de ellas, ya que se trata de obras de música y danza que implican un gran despliegue de recursos humanos.
Si bien esta Segunda Bienal se desarrollará fundamentalmente en el Centro Cultural Palacio de La Moneda, se contempla un circuito cultural con muestras patrimoniales que incluirá exhibiciones en diversos museos de la nación sudamericana.

Entre ellos encontramos el Museo de Santiago (La Casa Colorada); Museo Nacional de Historia Natural, que contará con una muestra etnográfica de Rapa Nui; Museo de Arte Popular Americano, con una muestra de textiles mapuche y talleres afines.

Fuente: TeleSUR y Fundación Guayasamín

ACERCA DE GUAYASAMÍN

La pérdida es irreparable, porque los hombres de su alta talla moral no se repiten. Ecuador ha perdido al Maestro, un notable e ilustre hijo. Cuba un amigo leal y sincero. América Latina, un honorable americano que supo reflejar en su arte, no sólo el sufrimiento de sus compatriotas, sino también sus culturas y sus virtudes…
No podemos admitir que murió, porque los hombres como él no mueren: se multiplican en sus pueblos…


Fidel Castro Ruz

Fue un hombre de convicción latinoamericana y luchador por la democracia. Su obra refleja su profundo compromiso con el progreso social y con los pueblos marginados y explotados. América pierde a uno de los hombres más destacados en el mundo del arte, pero también a uno de los más solidarios y humanistas que ha dado nuestra América en toda su historia. No hay palabra para expresar los sentimientos y los recuerdos que guardo y guardaré de este hombre que ha dado lo mejor de si por nuestros pueblos. Su memoria permanecerá en nosotros y será aliento permanente para quienes buscamos un mejor futuro para la humanidad.

Rigoberta Menchú Tum, Premio Nóbel de la Paz

Más información sobre vida y obra de Guayasamín: http://www.guayasamin.com/

lunes, 20 de octubre de 2008

PUBLICADA LA BIOGRAFÍA POLÍTICA DE LA ESCRITORA MARÍA TERESA LEÓN

EL LIBRO "MARÍA TERESA LEÓN Y SUS AMIGOS" ESTÁ EDITADO POR LA FUNDACIÓN DOMINGO MALAGÓN

Durante la Segunda República fueron muchas las mujeres que, surgidas alrededor del nuevo despertar político de España, no dudaron en reivindicar sus derechos y llevar a cabo sus deberes como nunca hasta entonces se había podido en nuestro país. Entre todas ellas destaca la figura de María Teresa León, poeta, narradora, dramaturga, guionista, articulista, memorialista y, sobre todo, mujer de acción implicada con enorme pasión y arrojo en la lucha política de izquierdas y republicana desde su militancia en el Partido Comunista.

Una mujer excepcional siempre velada por la presencia de su marido, el poeta gaditano Rafael Alberti, que merece un reconocimiento independiente que la sitúe en su justo lugar. En "María Teresa y sus amigos" se desgrana la trayectoria política, unida a la cultural en todo momento, de María Teresa León desde sus primeras intervenciones en prensa en el Diario de Burgos, donde se observan sus primeras reivindicaciones feministas, pasando por su participación e implicación tanto en el devenir de la Segunda República, como en los acontecimientos de la Guerra Civil, hasta sus primeros años de exilio en Argentina momento en el que, quizás por voluntad propia, quizás por apremios económicos, se aleja de su trayectoria política, centrándose más en la literaria y quedándose como cola de cometa.

domingo, 19 de octubre de 2008

"BATALLA EN SEATTLE"

Título original: Battle in Seattle
Director: Stuart Townsend
Intérpretes: Charlize Theron, Woody Harrelson, Ray Liotta, Ivana Milicevic, Michelle Rodriguez, Connie Nielsen, Martin Henderson, André Benjamin
Año: 2007
Duración: 100’
País: Estados Unidos
Productora: Coproducción Estados Unidos-Canadá-Alemania; Remstar Productions

El pueblo unido jamás será vencido. Es lo que aprendimos, es lo que intentamos desde la Revolución francesa. Pero traspasadas las puertas del siglo XXI, el pueblo unido o desunido siempre es vencido. Asombra que en los albores del final del primer decenio, con una crisis económica de pura lógica, como resultado de la era del beneficio ilimitado, el cine enfoque su mirada, y no precisamente discretamente, hacia hitos revolucionarios. Primero la intensa y larga mirada al Che, y con ella a Cuba. Ahora la mirada de Stuart Towsent al despegue del movimiento altermundista, como una tercera vía u opción frente al capitalismo desaforado e injusto que se erigió como la gran salvación contra el “diabólico” comunismo.
Stuart Townsent es un actor irlandés, por lo tanto europeo, al que recordarán por “La reina de los condenados”, o “La liga de los hombres extraordinarios”, entre otras cintas. Sin duda extraordinario es por ligarse a la mujer más deseada, Charline Thezon, dirán unos. Ja, pero también lo es por abordar en tiempos de megaproducciones sobre superhéroes, las resistencias antisistema, (esos melenudos desarrapados) para su primera producción, La batalla de Seattle, héroes terrenales que levantaron la veda, a finales de los noventa, de un nuevo moviendo de movimientos que se hace visible en los Foros Sociales y en las grandes reuniones de los vampiros poderosos, la WTO (Organización Mundial del Comercio), o el G-8, y tuvo su culminación en las grandes manifestaciones mundiales, de 2003, contra la guerra de Irak. Jóvenes, trabajadores, sindicatos, campesinos, pueblos, ecologistas, intelectuales, todos con agallas y ganas de dar la vuelta a este mundo al revés.
Townsent se centra principalmente en los eventos ocurridos en Seattle, en 1999, con motivo de la reunión de la WTO, aunque en el epilogo menciona los movimientos de protesta posteriores llevados a cabo hasta hoy. Ante la hartura de las injusticias provocadas por las normativas comerciales de la organización, establecida después de la Segunda Guerra Mundial, diversos grupos y asociaciones, todos conectados entre sí, se unen para protestar pacíficamente (y la película es en sí un medio para romper con la equivocada fama de violentos que se les inculcó) contra el foro comercial que tanto glamour se supone va a dar a Seattle, según palabras políticamente apolilladas de su alcalde, un retornado Ray Liota.
Cinco días transcurren en La batalla de Seattle, en los que el irlandés Townsend va desgranando uno por uno los acontecimientos diarios, manifestaciones y protestas de grupos, situaciones particulares como la de un policía antidisturbios, políticos puertas adentro, la influencia de estas protestas en algunos de los delegados, y la transformación de dichas manifestaciones en una inesperada batalla campal, con un final victorioso sorprendente incluso para estos eternos luchadores. Victoria en cuanto que la conferencia fue un fracaso total. Victoria a la que contribuyeron, cómo no?, las autoridades pertinentes, con la decisión de implantar un estado de excepción, la actuación de la Guardia Nacional y la violenta respuesta de la policía de la ciudad, con argucias como la infiltración entre manifestantes.
El director nada en aguas claras, detalle que le habrá costado su personal batalla para abrir puertas. No se anda con ambigüedades, lo cual, como espectador interesado en el tema, deja un poco mosca, preguntándose donde se encierra el truco que desemboque en lo políticamente correcto.
Intercalando una nerviosa y ligera cámara al hombro de 16 mm, que da cierto grano a la imagen para que no desentone con los fotogramas de archivo reales, con objetivos de focal larga en lugar de los gran angulares, Townsend ofrece un tono realista y documental no muy alejado del estilo José Padilha ("Ônibus 174", "Tropa de elite") y el mismo Paul Greengrass ("Bloody Sunday"), consiguiendo un acabado dinámico, entretenido, ágil, dentro de un montaje en el cual el argumento no pierde pie ni energía, y mantiene la información alejada de aguas turbias.
Los personajes están perfectamente delineados y resultan creíbles, sin megaestrellas que le hubieran dado un toque demasiado vanidoso y superficial a una temática de conciencia colectiva. Bien es cierto que Charline Theron es una estrella, pero su papel en la película es secundario, sin avenirse a ocupar un puesto de relevancia. Y lo hace como ella bien sabe, estupendamente. Todo el resto del reparto muestra garra y veracidad, desde Woody Harrelson, a Michelle Rodriguez , dejando el verdadero protagonismo a la alterglobalización.
Es un lujo que directores noveles buceen en temas que dan grima a los grandes estudios, que los consagrados no desean deshojar. De hecho muchos de estos noveles cuando adquieren prestigio olvidan sus comienzos y danzan dentro de lo meramente mercantil. Pero al menos, como en este caso, arrancan estampando una duda en el consumidor-espectador, ¿qué carajo es eso del WTO y cuales son sus consecuencias?, ¿Me afectan a mi?. ¿Estamos, tal vez, ante un cine de visión global, de solidaridad global, que ayuda al espectador a salir de su ensimismamiento local, bajo cuyo caparazón cree que nada a gran escala tiene que ver con él?.
Lástima que los poderosos mass media no den gran cobertura a estas producciones. Como se menciona en uno de los diálogos, un manifestante le dice al personaje policía que interpreta Harrelson: "No son los manifestantes y los policías los que tienen que pelearse".
La batalla continúa…

Fuente: Blanca Vázquez (larepublicacultural.es)
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sábado, 18 de octubre de 2008

SE EXHIBEN EN LONDRES FOTOGRAFIAS DE LA GUERRA CIVIL DE ROBERT CAPA Y GERDA TARO


LA MUESTRA APOYA LA AUTENTICIDAD DE MUERTE DE UN MILICIANO
La duda que ha perseguido a la famosa foto Muerte de un miliciano, que tomó Robert Capa en la Guerra Civil española (1936-1939), parece disiparse en Londres, donde una exposición sugiere ahora que no hubo ni trampa ni cartón.
Titulada ¡Esto es la guerra!. Robert Capa trabajando, la muestra, que se inaugura este viernes en el Barbican Centre y podrá visitarse hasta el 25 de enero, aporta nuevas fotos que prueban la autenticidad de la muerte del soldado, si bien todo apunta a que fue más un accidente que el trágico desenlace de una batalla.
La impactante fotografía, conocida como El soldado caído o Muerte de un miliciano, se convirtió en un icono de la contienda española y en una obra cumbre del fotoperiodismo de guerra.
La imagen refleja el momento en que el anarquista Federico Borrell García muere, el 5 de septiembre de 1936, de un balazo en un soleado paraje de Cerro Muriano, cerca de Córdoba, en el sur de España.
Borrell García, de 24 años y apodado Taino, aparece cayendo hacia atrás con un brazo estirado de cuya mano se desliza un fusil, una escena dramática que el legendario fotógrafo de origen húngaro consiguió captar desde una trinchera.
La foto se publicó por primera vez el 23 de septiembre de 1936 en la revista francesa Vu -un ejemplar puede verse en la muestra- con un pie que hablaba de soldados "sosteniendo sus rifles, bajando la ladera", y añadía: "De repente, su avance fue interrumpido, una bala silbó y su sangre fue derramada en su suelo nativo".
Sin embargo, la peculiaridad de la instantánea -la ausencia de soldados próximos a Borrell en el campo de batalla, la falta de pruebas visibles de la herida de bala y, por qué no decirlo, el insólito don de la oportunidad de Capa- alentó las sospechas de falsedad.
El caso es que el día de la muerte del miliciano, confirmada más tarde por su familia, Capa sacó en Cerro Muriano 40 instantáneas.
Capa tomó esas fotografías junto a su novia, la alemana y también fotógrafa Gerda Taro
Por cierto, la exposición del Barbican revela por primera vez que Capa tomó esas fotografías junto a su novia, la alemana y también fotógrafa Gerda Taro, quien, de hecho, acabó perdiendo la vida bajo las cadenas de un carro de combate en plena Guerra Civil.
Setenta y dos años después, las 40 fotos, perdidas hasta hace poco en la caótica herencia del fotógrafo y descubiertas en el Centro Internacional de Fotografía de Nueva York, fundado por el hermano menor de Capa, trazan en Londres la secuencia que aclara qué sucedió antes y después de la singular foto de Borrell García.
Entre esas imágenes, investigadas a fondo por el biógrafo de Capa, Richard Whelan, fallecido el pasado año mientras organizaba la exhibición londinense, se encuentra una tomada poco antes de que un tiro inesperado fulminara a "Taino".
En dicha instantánea, Borrell y otros milicianos posan para Capa con aparente actitud festiva y los fusiles en alto.
Otra inmortaliza a los militares en maniobras de salto en una trinchera, y una tercera, nunca vista hasta ahora, capta a un segundo miliciano abatido en el mismo páramo en el que Borrell García había perecido minutos antes. Según la reconstrucción del suceso que hizo Whelan y que parecen corroborar las fotos expuestas en Londres (que viajarán en junio de 2009 al Museo Nacional de Arte de Cataluña), Capa aprovechó la hora de la siesta, respetada por los bandos republicano y franquista, para fotografiar a los soldados simulando acciones bélicas.
"Lo que hemos averiguado con estas nuevas fotos de ese día, y que ignorábamos antes, es que no se tomaron en el fragor de una batalla, sino en un momento de poca actividad en el que los milicianos recrean escenas de batalla para los fotógrafos", explicó a la comisaria de la exposición, Cynthia Young, que colaboró con Whelan.
El ajetreo de la tropa, dejó dicho el biógrafo, debió atraer la atención de las fuerzas franquistas y, "justo cuando Capa iba a presionar el botón, un fusil enemigo oculto abrió fuego".
Young no alberga dudas: "Es -subrayó- la foto auténtica de un miliciano en el instante de su muerte, según nuestra investigación".
Muerte de un miliciano o El soldado caído cimentó la reputación de Capa, cofundador de la agencia Magnum, como genial corresponsal gráfico de guerra.
El fotógrafo, cuyo verdadero nombre era Andre Friedmann (Budapest, 1913-Vietnam, 1954), cubrió después numerosos conflictos. Memorables son, por ejemplo, sus fotos del desembarco aliado de Normandía en la II Guerra Mundial (1939-1945), que también pueden contemplarse en el Barbican.
Pero la suerte le abandonó el 25 de mayo de 1954 en Vietnam durante la Primera Guerra Indochina, cuando pisó una mina y murió -cómo no- con la cámara en la mano.

TAMBIÉN SE RECONOCE EL TRABAJO DE GERDA TARO

Gerda Taro (1910-1937) emerge, por fin, de la sombra de su compañero y padre del fotoperiodismo, Robert Capa, en una exposición sobre la Guerra Civil española que viajará el próximo verano al MANAC de Barcelona. En la exposición se hace justicia al legado de la primera fotógrafa caída en el frente y, probablemente también, a la primera mujer que documentó la acción bélica desde la trinchera.
“El mundo se olvidó muy pronto de Taro”, afirma Kristen Lubben, comisaria del International Centre of Photography (ICP), de Nueva York, donde se conserva el archivo de la pareja.
Taro cayó en Brunete, arrollada por un tanque, el 25 de julio de 1937. Murió al día siguiente, honrada como una heroína en Madrid, Valencia y París. “El funeral fue una manifestación espectacular de solidaridad internacional con la España republicana”, recuerda su biógrafo Irme Schaber. “La guerra civil española mata a su primera fotógrafa”, tituló la revista estadounidense Life. Un año después quedará relegada a un segundo plano como “la novia del más importante fotógrafo de guerra”. Capa se hizo famoso con su foto del Miliciano caído, pero su compañera demuestra que las mujeres también manejaban pistola y escopeta aunque calzaran tacones.
Gerda Taro y Robert Capa se conocieron en París, y en agosto de 1936, cruzaron la frontera catalana. A diferencia de otras famosas parejas, como Man Ray y Lee Miller, no forjaron la clásica relación de artista/musa. Taro desarrolló su propio estilo en imágenes de milicianas, refugiados, niños con ganas de ir al frente... Su cámara se detiene en detalles que dejan entrever el ambiente de un pueblo entregado a la causa antifascista. “Es difícil valorar su influencia, porque las siguientes generaciones desconocieron su obra. Sus imágenes son muy fuertes. Su legado brinda la oportunidad de analizar el papel de la mujer en los años treinta”, explica Lubben, comisaria del ICP. Gerda Taro y Robert Capa se conocieron en París, y en agosto de 1936, cruzaron la frontera catalana. A diferencia de otras famosas parejas, como Man Ray y Lee Miller, no forjaron la clásica relación de artista/musa. Taro desarrolló su propio estilo en imágenes de milicianas, refugiados, niños con ganas de ir al frente... Su cámara se detiene en detalles que dejan entrever el ambiente de un pueblo entregado a la causa antifascista. “Es difícil valorar su influencia, porque las siguientes generaciones desconocieron su obra. Sus imágenes son muy fuertes. Su legado brinda la oportunidad de analizar el papel de la mujer en los años treinta”, explica Lubben, comisaria del ICP.
Fuente: Público

viernes, 17 de octubre de 2008

LA EDITORIAL TÉBAR LANZA UNA COLECCIÓN DE LIBROS SOBRE LA MEMORIA DE LA II REPÚBLICA

CONTARÁ CON AUTORES COMO ALMUDENA GRANDES O VICENC NAVARRO Y HA PRESENTADO YA SU PRIMER VOLUMEN: LA MEMORIA DE LA TIERRA.

Se trata de una nueva colección que pretende exponer todo lo que significó la II República Española en el ámbito cultural, político, educativo, social, legislativo e intelectual. Una mirada de lo que nos ha quedado de su legado, y una forma de actualizar esa memoria y proyectarla en el futuro, a nuevas generaciones de ciudadanos e investigadores que quieran acercarse a este periodo de la historia española.

Los títulos se agruparán en torno a las siguientes líneas editoriales: exilio, mujer en la Segunda República, recuperación de la memoria, a través de la fotografía, de la arqueología de las fosas comunes o de los testimonios de sus protagonistas; el contexto socio político, la educación, el constitucionalismo o la narrativa.

En los prólogos de los libros colaboran autores reconocidos por su trabajo ensayístico o literario en relación con la memoria histórica como Almudena Grandes, Manuel Rivas o Vicenç Navarro.
El primero de los volúmenes que se presenta es un libro de fotografía, La memoria de la tierra, que refleja el trabajo de dos fotógrafos que durante años han asistido a numerosas exhumaciones de fosas comunes de republicanos y republicanas. Se trata de Clemente Bernard y Eloy Alonso, que han visto reflejado su trabajo en numerosos medios de comunicación, nacionales e internacionales.

Detrás vendrán títulos como Lo que no se debe perder, autobiografía prologada por Almudena Grandes de una militante de la Juventud Socialista Unificada, Carmen Arrojo, que vivió intensamente los años de la Segunda República y la guerra de 1936. Las Huellas del Exilio - Expresiones Culturales de la España Peregrina, coordinado por Antolín Sánchez Cuervo; una obra prologada por el polítólogo Vicenç Navarro que recoge una panorámica amplia de diversas expresiones culturales del exilio español del 39. O Arqueología de la memoria, un libro coordinado por Francisco Etxeberría, el forense que más fosas ha exhumado en España, y que abordará desde distintas disciplinas (arqueología, antropología, etc…) las exhumaciones de fosas comunes de la guerra civil.

Más información: www.editorialtebar.com

jueves, 16 de octubre de 2008

SE EXPONE EN GRANADA LA OBRA TEMPRANA DEL PINTOR JOSÉ GUERRERO


EN LOS PRIMEROS ÓLEOS DEL ARTISTA SE REFLEJAN LAS HERIDAS DE LA GUERRA CIVIL.

Una exposición inédita dedicada al pintor José Guerrero reconstruye, por vez primera, los años de formación y estudio del artista granadino con obras como "La Aparición" (en la imagen) o "Lavanderas", que reflejan la espiritualidad y el misticismo temprano de un autor "intensamente" influido por las vanguardias.

Con el título "José Guerrero. Los primeros años, 1931-1950", la muestra se compone de 36 óleos y 36 obras sobre papel que, procedentes de diversas colecciones internacionales y españolas, recrean "los titubeos y las dudas primeras" que impregnan la obra juvenil de Guerrero (Granada, 1914-Barcelona, 1991).

Así lo ha explicado en conferencia de prensa el comisario de la exposición, Francisco Baena, quien ha dicho que la presencia continua de elementos como cruces o palomas en los lienzos descubren al público "el universo alegórico de un creador que en su madurez renegaría de toda literatura en la pintura".

En este sentido, cuadros como "La Aparición" (1947) o "Hilandera" (1948), ha indicado, exhiben de "manera fiel" su particular visión simbólica de la naturaleza, al tiempo que permiten discernir el influjo de la Escuela de París, con Picasso a la cabeza.

Distribuida en dos salas, la exposición, que se muestra en el Centro José Guerrero de Granada, recorre cronológicamente dos etapas de la vida artística del pintor a partir de sus trabajos elaborados en Madrid (1931-1946) y en el extranjero (1947-1949).

En ambas fases Guerrero repite el itinerario del artista modernista coetáneo desde los principios realistas y académicos hasta la abstracción, ha indicado Baena, quien ha resaltado los espacios abiertos como "una constante" de su obra.

Según Baena, con la recreación continua de ríos y orillas, Guerrero "arremetía críticamente" contra las fronteras y "los impedimentos a la libre circulación frecuentes en una Europa en llamas por la guerra".

Precisamente, tanto la Guerra Civil española, que empujaría al artista granadino al exilio, como la Segunda Guerra Mundial, están "muy reflejadas" en los lienzos de Guerrero. Así lo ha precisado la directora del museo, Yolanda Romero, quien ha aseverado que los óleos tempranos del artista muestran "las heridas de la guerra".

En la serie, Guerrero vuelca "su curiosidad y deseo de aprendizaje" en el lenguaje del expresionismo abstracto, lo que confiere al "poliédrico" artista granadino un "sello propio que acerca sin complejos al público", ha afirmado Romero.

A partir de finales de los años cuarenta se produce en Guerrero una decidida apuesta por "un lenguaje geométrico y plástico", que le alejan de sus "primarios lienzos figurativos" y lo unen a la influencia norteamericana.

La exposición se completa con una serie de dibujos, también inéditos, que el pintor fue guardando para sí a lo largo de su vida y que actúan a modo de "avanzadilla del trabajo de un artista profundamente impregnado por el espíritu de su tiempo", sostiene Romero.

La muestra, que se exhibirá a partir de enero en la Real Academia de España en Roma, constituye según la diputada de Cultura, María Asunción Pérez Cotarelo, "una oportunidad única" de contemplar la evolución del universo pictórico de José Guerrero, así como de "conocer el itinerario del artista hasta desembarcar en su edad madura".

Fuente: Efe

Fecha: Del 16 de octubre al 1 de enero de 2009

Más información: www.centroguerrero.org

miércoles, 15 de octubre de 2008

MADRID ACOGE UNA EXPOSICIÓN HOMENAJE AL POETA VICENTE HUIDOBRO

LA MUESTRA REÚNE 35 OBRAS DE PINTORES CHILENOS Y ESPAÑOLES

Para conmemorar los 60 años del fallecimiento del poeta chileno Vicente Huidobro, diecisiete pinturas de la colección del Museo de Arte Contemporáneo de la Universidad de Chile (MAC) viajan al Museo de América (España) para constituir, desde el 15 de octubre al 6 de enero de 2009, la exposición "Altazor-Pintores chilenos y españoles ilustrando a Huidobro" junto a obras de artistas españoles.

Bajo el comisariado de Carlos Vásquez -artista chileno residente en España- esta exposición agrupa a un total de treinta y cinco artistas que llevan a la plástica la poesía de Altazor de Vicente Huidobro, e incluye la publicación de un libro con una selección de poemas de Altazor e imágenes de las obras que serán exhibidas.

La primera edición de Altazor se realizó en 1931 en Madrid, ciudad en que el poeta chileno residió en diferentes ocasiones y donde fundó, en 1918, el Creacionismo como su propio movimiento poético. El poemario, uno de los más relevantes de la obra huidobriana, se divide en siete cantos que serán ilustrados en la exposición con las obras elegidas por Vásquez.

Entre las diecisiete obras de la colección del MAC que viajarán a Madrid se encuentran pinturas de los siguientes artistas: Roser Bru, Nemesio Antúnez, José Balmes, Hugo Marín, Gracia Barrios, Eduardo Martínez Bonati, Enrique Zañartu, Inés Puyó, Jaime León, Francisco González Lineros, Ximena Cristi, Guillermo Núñez, Samy Benmayor, Ana Cortés, Ernesto Barreda, Mario Carreño y Carlos Maturana (Bororo). A ellos se suman los artistas chilenos Dolores Walker y Carlos Vásquez.

Los artistas españoles son: Antón Lamazares, Antonio Lopez, Lucio Muñoz, Antonio Murado, Juan Navarro Baldeweg, Daniel Quintero, Sergio Sanz, Antoni Tápies, Alfonso Albacete, Eduardo Arroyo, Amalia Avia, José Caballero, Rafael Canogar, Alejandro Corujeira, Juan Genovés y Luis Gordillo.

La exposición complementa el trabajo ya realizado en la Feria del Libro de Madrid, según explica Osvaldo Puccio como embajador de Chile en España, en el catálogo especialmente hecho para la muestra. “Nos faltaba el diálogo con la dimensión visual de la obra de Huidobro. Su concepto de una poesía cubista, revolucionó no sólo las concepciones verbales, sino también visuales, predominantes entonces. Las imágenes creacionistas, a veces francamente pictóricas, se encuentran acá con las imágenes que artistas visuales españoles y chilenos concibieron mucho después”.

Al diálogo entre pintura y poesía, se suma otro dentro de las artes visuales, según comenta Francisco Brugnoli, director del MAC. “A esta selección bien podemos atribuirle el valor simbólico de un reencuentro que se transforma en efectivo si hacemos presente las fuertes coincidencias entre nuestro informalismo local y el producido en España, que sin duda quedará expuesto a las miradas de reconocimiento”.

BREVE RESEÑA DE LA ACTIVIDAD POLÍTICA DE HUIDOBRO

Huidobro, al regresar a Chile en 1932, vivió una intensa actividad política en pro del Partido Comunista chileno. Publicó en la revista "Europa de Barcelona", el artículo "Manifiesto a la juventud de Hispanoamérica", donde proponía la creación de una república conformada por Bolivia, Chile, Paraguay y Uruguay.

En 1936, organizó a los escritores chilenos en solidaridad con el pueblo español y publicó en Escritores y Artistas Chilenos a la España Popular su poema, "Está sangrando España". Luego viajó a ese país donde participó activamente en la guerra al lado de la causa republicana. También escribe los poemas “Gloria y sangre” y “Pasionaria” relacionados con la Guerra Civil española.

Al regresar a Chile, Huidobro publicó el poema en prosa "Fuera de aquí" contra los militares italianos que visitaban el país, lo que provocó una agresión en su contra.

Luego, en 1944 volvió a París, donde se unió al ejército francés y transmitió desde París sus crónicas para "La Voz de América", mientras participa en la Segunda Guerra Mundial como corresponsal. Durante la Guerra, al entrar con las tropas aliadas en Berlín con el grado de Teniente, fue herido y dado de baja, regresando de nuevo a Santiago.

ALTAZOR (FRAGMENTO)

Soy yo Altazor
Altazor
Encerrado en la jaula de su destino
En vano me aferro a los barrotes de la evasión posible
Una flor cierra el camino
Y se levantan como la estatua de las llamas.
La evasión imposible
Más débil marcho con mis ansias
Que un ejército sin luz en medio de emboscadas
Abrí los ojos en el siglo
En que moría el cristianismo.
Retorcido en su cruz agonizante
Ya va a dar el último suspiro
¿Y mañana qué pondremos en el sitio vacío?
Pondremos un alba o un crepúsculo
¿Y hay que poner algo acaso?
La corona de espinas
Chorreando sus últimas estrellas se marchita
Morirá el cristianismo que no ha resuelto ningún problema
Que sólo ha enseñado plegarias muertas.
Muere después de dos mil años de existencia
Un cañoneo enorme pone punto final a la era cristiana
El Cristo quiere morir acompañado de millones de almas
Hundirse con sus templos
Y atravesar la muerte con un cortejo inmenso
Mil aeroplanos saludan la nueva era
Ellos son los oráculos y las banderas

Hace seis meses solamente
Dejé la ecuatorial recién cortada
En la tumba guerrera del esclavo paciente
Corona de piedad sobre la estupidez humana.
Soy yo que estoy hablando en este año de 1919
Es el invierno
Ya la Europa enterró todos sus muertos
Y un millar de lágrimas hacen una sola cruz de nieve
Mirad esas estepas que sacuden las manos
Millones de obreros han comprendido al fin
Y levantan al cielo sus banderas de aurora
Venid, venid, os esperamos porque sois la esperanza
La única esperanza
La última esperanza

Soy yo Altazor el doble de mí mismo
El que se mira obrar y se ríe del otro frente a frente
El que cayó de las alturas de su estrella
Y viajó veinticinco años
Colgado al paracaídas de sus propios prejuicios
Soy yo Altazor el del ansia infinita
del hambre eterno y descorazonado
Carne labrada por arados de angustia
¿Cómo podré dormir mientras haya adentro tierras desconocidas?
Problemas
Misterios que se cuelgan a mi pecho
Estoy solo
La distancia que va de cuerpo a cuerpo
Es tan grande como la que hay de alma a alma
Solo
Solo
Solo
Estoy solo parado en la punta del año que agoniza
El universo se rompe en olas a mis pies
Los planetas giran en torno a mi cabeza
Y me despeinan al pasar con el viento que desplazan
Sin dar una respuesta que llene los abismos
Ni sentir este anhelo fabuloso que busca en la fauna del cielo
Un ser materno donde se duerma el corazón
Un lecho a la sombra del torbellino de enigmas
Una mano que acaricie los latidos de la fiebre.
Dios diluido en la nada y el todo
Dios todo y nada
Dios en las palabras y en los gestos
Dios mental
Dios aliento
Dios joven
Dios viejo
Dios pútrido
lejano y cerca
Dios amasado a mi congoja
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Más información sobre su vida y obra: www.vicentehuidobro.uchile.cl

martes, 14 de octubre de 2008

RODCHENKO: ARTE AL SERVICIO DE LA REVOLUCIÓN

Libros, (1925) es uno de los carteles publicitarios más célebres de Ródchenko. El cartel se creó para la sección de Leningrado de la Gosizdat (Editorial Literaria Estatal).

EXPOSICIÓN DEL ARTISTA SOVIÉTICO EN BARCELONA. “RODCHENKO, LA CONSTRUCCIÓN DEL FUTURO”.

Una exposición antológica, con unas 250 obras, repasa desde hoy en La Pedrera la trayectoria del artista Rodchenko en todas sus vertientes, como la pintura y la fotografía, pero también el diseño, el dibujo, los fotomontajes y las construcciones especiales.

Alexander Rodchenko (San Petersburgo, 1891-Moscú, 1956) fue una de las principales figuras de la vanguardia rusa del siglo XX y uno de sus artistas más complejos y polifacéticos.

Explorador en pintura de un arte sin-objeto, a la cabeza del constructivismo en la Rusia post-revolucionaria y pionero de la fotografía soviética, Rodchenko renunció pronto a un arte "puro" en beneficio de la creación de un lenguaje visual al servicio de la sociedad. Además, añade uno de los comisarios de la muestra, Jean-Claude Marcadé, extendió las fronteras de todos los medios con que siempre trabajó bajo el lema "Nuestro deber es experimentar".

Con esta exposición, que estará abierta al público hasta el próximo 5 de enero, la Obra Social de Caixa Catalunya da continuidad a la programación que explora la obra de artistas fundamentales de la vanguardia rusa: Kandinsky (2003) y Malevich (2006).

La exposición arranca con los primeros experimentos que le desvinculan del estilo moderno y fauvista entre 1912 y 1914, un camino que le lleva a transitar por el cubofuturismo ("Retrato de N.A.R. (cuñada)", 1915); el cubofuturismo sin-objeto con dibujos en tinta china realizados con regla y compás, que presentará en la muestra "Magazín" en Moscú en 1916, o con sus proyectos de lámparas-aplique para el Café Pittoresque (1917).

En el recorrido expositivo se suceden los lienzos sin-objeto de 1918, combinaciones cromáticas de planos cuadrangulares y triangulares, curvas y círculos.

La ruptura con Malevich se produce con la serie "Negro sobre negro" (1918), que el artista opone al "Blanco sobre blanco" del fundador del suprematismo.

A finales de la década de 1910, Rodchenko rompe también con los postulados de Kandinsky con su particular "lineísmo", una serie de lienzos y linograbados sin-objeto en los que el espacio se construye a partir de combinaciones de líneas.

A partir de su concepción sobre la línea, en 1919-20 Rodchenko, miembro activo del grupo experimental Zhivskulptarj, trabaja en proyectos arquitectónicos de quioscos de prensa, la "Casa de las sociedades", el plano del soviet de diputados o "puras fantasías".

Seguidamente, se pueden contemplar las obras del "constructivismo", período en el que la "construcción" tridimensional sustituye a la "composición" bidimensional, es decir al cuadro de caballete.

De esta etapa son su serie de "Construcciones espaciales" (triángulos dentro de triángulos o círculos dentro de círculos) y su tríptico de colores "puros" -rojo, amarillo y azul-, uno de los momentos cruciales de la historia del arte con el que el artista ruso da por concluida su investigación formal constructivista.

En la exposición de La Pedrera se exhibe una amplia muestra del trabajo de Rodchenko como diseñador: libros de Mayakovski, carteles, embalajes, envoltorios, anuncios a color, paneles publicitarios e ilustraciones en revistas y periódicos.

También contribuyó decisivamente a la formulación de un método de diseño constructivista, especialmente con el Club Obrero que hizo para el pabellón de la URSS en la Exposición Internacional de París en 1925, en el que diseñó sillas, mesas de lectura, vitrinas para exponer libros y revistas, espacios de almacenaje para literatura, escaparates para mapas y diarios y un "Rincón de Lenin".

Su obra fotográfica al aire libre se caracteriza en la segunda mitad de los años 20 por la aplicación de perspectivas audaces e insólitas para la época, con profusos y vertiginosos picados y contrapicados, composiciones en diagonal y escorzos muy marcados, en los que la línea es el elemento central compositivo.

Tras la represión política y cultural de 1932, su obra queda restringida a reportajes propagandísticos y unas pocas fotos personales.

La antológica se cierra con el retorno a la pintura que experimentó Rodchenko a partir de los años 40, con obras como "Ornamento aerodinámico", "Abstracción surrealista" o "Composición decorativa", todas de 1943.

Fuente: EFE

lunes, 13 de octubre de 2008

EN VENEZUELA SE REÚNEN INTELECTUALES Y ARTISTAS DE TODO EL MUNDO


La Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad se reunirá a partir de este lunes, en Caracas, Venezuela, para abordar varios temas de actualidad entre los que se destacan el orden económico mundial y la crisis de la democracia representativa.

Entre el 13 y 18 de octubre, se realizará en Caracas, Venezuela el VIII Encuentro de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad, bajo el título "Transiciones hacia el socialismo: aspectos políticos, económicos, sociales y culturales".
Más de 200 intelectuales del mundo, vinculados con proyectos populares, sociales y políticos, intercambiarán el resultado de sus investigaciones, reflexiones y observaciones sobre la resistencia al neoliberalismo y la construcción de alternativas.
La crisis del modelo capitalista en su fase neoliberal se amplía claramente. Esta situación mundial plantea el problema de la transición entre la era neoliberal y una época nueva postcapitalista, con estas afirmaciones se inicia la reunión de los intelectuales y artistas en Venezuela.
En el encuentro de Caracas se trabajará sobre la manera de construir alternativas y sobre cómo las fuerzas sociales son capaces de llevarlas a cabo como actores y protagonistas. Además se buscarán estrategias y se expondrán las diversas experiencias existentes.

Sobre la Red de Intelectuales

La Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad se autodefine como un movimiento de pensamiento y acción contra toda forma de dominación, que responde a la necesidad de construir una barrera de resistencia frente a la dominación mundial que hoy se pretende imponer.
Según se desprende de la Asamblea plenaria, celebrada en Caracas el día 6 de diciembre de 2004, su objetivo es crear una red de redes de información, acción artística cultural, que vincule a intelectuales y artistas con los Foros Sociales y las luchas populares y su articulación en un movimiento internacional.
La Red está integrada por escritores, artistas, académicos, profesionales de todas las disciplinas, estudiantes, religiosos, movimientos sociales, medios de prensa alternativos y todos aquellos que se sienten comprometidos con la causa de la humanidad
Esta red de redes se opone al imperialismo y a sus políticas neoliberales, a la guerra y al terrorismo, a los proyectos de uniformidad sociocultural y a la monopolización del conocimiento.
Por el contrario, apoya las luchas de los pueblos del mundo, es solidaria con los procesos de cambio social, sustenta la diversidad cultural y sus derechos, promueve campañas de solidaridad procurando el más amplio respaldo a éstas causas.

Temario

Esta versión del Encuentro de Intelectuales tiene previsto un amplio programa, entre los puntos a tratar están: la unidad de los trabajadores. Además se tratará la cuestión agraria, donde prestarán especial atención a la democratización del acceso a la tierra y la soberanía alimentaria.
Otros puntos importante son la crisis de la democracia representativa, la igualdad vista desde la inclusión social, la participación política y los derechos de las mujeres.
Los monopolios mediáticos y la domesticación de la opinión pública tendrán una relevancia importante en la búsqueda de una alternativa socialista de cultura y educación.
El orden económico mundial también será analizado por los intelectuales en el marco de este encuentro, donde se buscarán alternativas como lo son los nuevos modelos de desarrollo propuestos en América Latina.

Fuente: TeleSUR

domingo, 12 de octubre de 2008

90 AÑOS DE "LOS SOVIETS EN ACCIÓN", DEL ESCRITOR NORTEAMERICANO JOHN REED

LOS SOVIETS EN ACCIÓN

Entre el coro de insultos y falsedades dirigido contra los soviets rusos por parte de la prensa capitalista se puede escuchar una voz estridente que grita con una especie de pánico: "¡No hay gobierno en Rusia! ¡No hay organización entre los trabajadores rusos! ¡No funcionará! ¡No funcionará!".
Es la táctica de la calumnia.
Como todo auténtico socialista sabe, y como los que hemos visto la revolución rusa podemos atestiguar, existe actualmente en Moscú y en todas las ciudades y pueblos de Rusia una estructura política enormemente compleja, sostenida por la mayoría del pueblo y que funciona tan bien como ningún otro gobierno popular recién nacido ha funcionado jamás. Los trabajadores de Rusia han construido a partir de sus necesidades vitales una organización económica que está evolucionando hacia una verdadera democracia industrial.
El Estado Soviético está basado en los Soviets -o Consejos- de trabajadores y en los Soviets de campesinos. Estos Consejos -instituciones características de la Revolución Rusia- se originaron en 1905, cuando durante la primera huelga general de los trabajadores, las fábricas de Petrogrado y las organizaciones obreras enviaron delegados al Comité Central. Este Comité de Huelga fue llamado Consejo de Diputados Obreros. Convocó la segunda huelga general en el otoño de 1905, mandó organizaciones a toda Rusia y por un breve lapso de tiempo fue reconocido por el Gobierno Imperial como el interlocutor autorizado de la clase trabajadora revolucionaria rusa.
Con el fracaso de la revolución de 1905, los miembros del Consejo huyeron o fueron deportados a Siberia. Pero ese tipo de unión resultó tan sorprendentemente efectiva como órgano político que todos los partidos revolucionarios incluyeron un Consejo de Diputados Obreros en su planes para un futuro levantamiento.
En marzo de 1917, cuando ante una Rusia que brama como un océano, el zar abdicó, el Gran Duque Miguel rechazó el trono y la reclutante Duma (el seudoparlamento zarista) fue forzada a tomar las riendas del gobierno, el Consejo de Diputados Obreros renació de nuevo. En pocos días fue ampliado par incluir delegados del Ejército, pasando a llamarse Consejo de Diputados de Obreros y Soldados. Excepto Kerensky, la Duma estaba compuesta de burgueses y no tenía conexión alguna con las masas revolucionarias. La lucha había de continuar, debía restablecerse el orden, mantenerse el frente ...los miembros del Comité de la Duma no estaban en condiciones de llevar a cabo esas tareas; se vieron obligados a llamar a los representantes de los trabajadores y los soldados - en otras palabras- al Consejo. El Consejo se hizo cargo del trabajo de la revolución, de la coordinación de las actividades del pueblo, de la preservación del orden. Además asumió la tarea de asegurar la revolución contra la traición de la burguesía.
Desde el momento en que la Duma se vio forzada a apelar al Consejo, en Rusia existieron dos gobiernos, y dos gobiernos lucharon por el poder hasta noviembre de 1917, cuando los soviets, bajo el control bolchevique, derribaron a la coalición de gobierno.
Había, como he dicho, Soviets de diputados tanto obreros como soldados. Algo más tarde surgieron los soviets de Diputados Campesinos. En la mayoría de las ciudades los Soviets Obreros y Soldados se reunían juntos; también convocaban sus Congresos Panrusos conjuntamente. Los soviets de Campesinos, sin embrago, estaban dominados por elementos reaccionarios y no se unieron a los obreros y soldados hasta la revolución de Noviembre y el establecimiento del Gobierno Soviético.
¿Quiénes eran los miembros de los Soviets?
El soviet se basa directamente en los trabajadores en las fábricas y en los campesinos en los campos. Al principio los delegados de los soviets de Obreros, Soldados y Campesinos, eran elegidos de acuerdo con reglas que variaban según las necesidades y la población de las diferentes localidades. En algunos pueblos los campesinos elegían un delegado por cada cincuenta electores. Los soldados en los cuarteles tenían derecho a un cierto número de delegados por regimiento, sin consideración a su fuerza; las tropas en el frente, sin embargo, elegían a sus soviets de manera diferente. En cuanto a los trabajadores en las grandes ciudades, pronto descubrieron que los soviets eran difíciles de manejar a menos que los delegados fuesen limitados a uno cada quinientos. De la misma manera, los primeros Congresos Panrusos de los Soviets se basaron aproximadamente en un delegado por cada veinticinco mil votantes, aunque de hecho los delegados representaban circunscripciones de varios tamaños.
Hasta febrero de 1918 cualquiera podía votar delegados para los Soviets. Incluso si los burgueses hubieran organizado y solicitado representación en los Soviets, se les hubiera otorgado. Por ejemplo, durante los mandatos del Gobierno Provisional, hubo una representación burguesa en el Soviet de Petrogrado -un delegado de la Unión de Hombres Profesionales, que comprendía doctores, juristas, profesores, etc.-.
El pasado marzo la constitución de los Soviets fue desarrollada con detalle y aplicada universalmente.
Restringía el derecho de voto a:
Ciudadanos de todas las Repúblicas Socialistas Soviéticas de ambos sexos que hayan cumplido dieciocho años el día de las elecciones ...
Todos aquéllos que se ganen la vida a través del trabajo productivo y útil de la sociedad y que sean miembros de los sindicatos ...
Quedaban excluidos del derecho a voto: los que emplean fuerza de trabajo par obtener beneficio; las personas que viven de plusvalías; comerciantes y agentes privados de negocios; empresarios de comunidades religiosas; ex-miembros de la policía y de la gendarmería; la antigua dinastía reinante; los deficientes mentales; los sordomudos; y todos los condenados por delitos menores mezquinos e indignos.
En cuanto a los campesinos, cada cien de ellos en lo pueblos eligen un representante para el Soviet del Volost, o Municipio. Los Soviets de los Volost envían delegados a los Soviets del Uyezd, o condado, el cual a su vez envía delegados al Soviet del Oblast, o provincia, para el cual también se eligen delegados de los Soviets de Trabajadores de las ciudades.
El Soviet de Petrogrado de Diputados Obreros y Soldados, que operaban cuando estuve en Rusia, puede servir como ejemplo de como funcionan las unidades urbanas de gobierno en un estado Socialista.
Constaba de unos 1200 diputados, y en circunstancias normales celebraba una sesión plenaria cada dos semanas. Entretanto elegía a un Comité Ejecutivo Central de 110 miembros, proporcionalmente a los partidos, y este Comité Central añadía por invitación a delegados de los comités centrales de los sindicatos, de los comités de las fabricas y de otras organizaciones democráticas.
Junto al Soviet de la gran ciudad, existían también los Rayon, o Soviets de distrito. Estaban compuestos de diputados electos para el soviet de la ciudad por cada distrito y administraban su zona de la ciudad. Naturalmente, en algunos distritos no había fábricas y, por tanto, tampoco representación de esos distritos, ni en el Soviet de la ciudad ni en el Soviet de distrito. Pero el sistema soviético es extraordinariamente flexible, y, si los cocineros y los camareros, o los basureros, o los porteros, o los conductores de ese distrito se organizaban y solicitaban representación, se les concedían delegados.
Las elecciones de los delegados están basadas en la representación proporcional, lo que significa que los partidos políticos están representados en proporción exacta al número total de votantes de la ciudad. Y son los partidos políticos y los programas los que votan, no los candidatos. Los candidatos son designados por los comités centrales de los partido políticos, que pueden reemplazarlos por otros miembros del partido. Asimismo, los delegados no son elegidos por un plazo de tiempo determinado, sino que pueden ser revocados en cualquier momento.
Nunca antes se creó un cuerpo político más sensible y perceptivo a la voluntad popular. Esto era necesario, pues en los períodos revolucionarios, la voluntad popular cambia con gran rapidez. Por ejemplo, durante la primera semana de diciembre de 1917 hubo desfiles y manifestaciones en favor de la Asamblea Constituyente -es decir, contra el poder soviético-. Uno de esos desfiles fue tiroteado por algún Guardia Rojo irresponsable y varias personas murieron. La reacción a esa estúpida violencia fue inmediata. Más de una docena de diputados bolcheviques fueron cesados y reemplazados por mencheviques. Pasaron tres semanas antes de que el sentimiento popular se tranquilizara y los mencheviques fueran reemplazados uno a uno de nuevo por los bolcheviques.
El Estado Soviético
Al menos dos veces al año se eligen delegados de toda Rusia para el Congreso de Soviets Panruso. Teóricamente estos delegados se eligen por designación popular directa; en las provincias uno por cada 125.000 votantes; en las ciudades uno por cada 25.000; sin embargo en la práctica, son normalmente elegidos por los soviets provinciales y urbanos. Se puede convocar una sesión extraordinaria del congreso en cualquier momento, a iniciativa del Comité Central Ejecutivo Panruso, o a petición de soviets que representen un tercio de la población trabajadora de Rusia.
Este órgano, formado por unos 2.000 delegados, se reúne en la capital en forma de gran soviet y decide sobre los asuntos esenciales de la política nacional. Elige un Comité Central Ejecutivo, como el Comité Central del Soviet de Petrogrado, que invita a los delegados de los comités centrales de todas las organizaciones democráticas.
Este Comité Central Ejecutivo de los Soviets Panruso aumentado, es el parlamento de la República Rusa. Está formado por unas 350 personas. Entre los Congresos Panrusos es la autoridad suprema, pero no debe actuar al margen de las líneas dictadas por el último Congreso y es absolutamente responsable de todos sus actos ante el siguiente Congreso.
Por ejemplo, el Comité Central Ejecutivo puede, y lo hizo, ordenar que se firmara el tratado de paz con Alemania. Pero no pudo hacer que este tratado vinculara a Rusia. Sólo el Congreso Panruso tiene poder para ratificar el tratado.
El Comité Ejecutivo Central elige entre sus miembros once delegados como presidentes de comités a cargo de los diferentes departamentos del gobierno, en el lugar de los ministros. Estos delegados pueden ser destituidos en cualquier momento. Son absolutamente responsables ante el Comité Central Ejecutivo. Los delegados eligen a un Presidente. Desde que se ha constituido el Gobierno Soviético este presidente- o primer ministro- ha sido Nicolai Lenin. Si su dirección fuera insatisfactoria, Lenin podría ser destituido en cualquier momento por la delegación de las masas del pueblo ruso o en el plazo de unas pocas semanas por el propio pueblo ruso directamente.
La principal función de los soviets es la defensa y consolidación de la revolución. Expresan la voluntad política de las masas no sólo en los Congresos Panrusos, donde su autoridad es casi suprema. Esta centralización existe porque los soviets locales crean el gobierno central y no el gobierno central los soviets locales. A pesar de la autonomía local, sin embargo, los decretos del comité Central Ejecutivo y las órdenes de los delegados son válidos para todo el país, porque en la república Soviética no hay intereses sectoriales privados que servir, y la causa de la Revolución es en todas partes la misma.
Observadores mal informados, la mayoría de ellos de la intelligentsia de clase media, acostumbran a decir que están a favor de los soviets, pero contra los bolcheviques. Esto es un absurdo. Los soviets son los órganos de representación más perfecta de la clase trabajadora, eso es verdad, pero son también las armas de la dictadura del proletariado, a la que todos los partidos anti-bolcheviques se oponen encarnizadamente. Así, la disposición de la gente a adherirse a la política de la dictadura del proletariado no sólo se mide por los miembros del partido bolchevique -partido comunista, como ahora se llama-,sino también por el crecimiento y actividad de los soviets locales de Rusia.
El ejemplo más notable de esto lo encontramos entre los campesinos, que no tomaron la dirección de la revolución, y cuyo primer y casi exclusivo interés en ella fue la confiscación de las grandes fincas. Los soviets de Diputados Campesinos no tenían al principio prácticamente otra función que la solución del problema de la tierra. Fue el fracaso en la solución a este problema el que volvió la atención de la gran masa de campesinos hacia las razones sociales que había tras este fracaso - eso, unido a la propaganda continua del ala izquierda de los partidos revolucionarios Socialistas y Bolcheviques y a la vuelta a los pueblos de los soldados revolucionarios.
El partido tradicional de los campesinos es el Partido Socialista Revolucionario. La gran masa inerte de campesinos cuyo único interés era su tierra y que nunca había tenido fuerza luchadora ni iniciativa política, al principio rechazó tener algo que ver con los soviets. Sin embargo, aquellos campesinos que participaron en los soviets, pronto despertaron a la idea de la dictadura del proletariado. Y casi invariablemente ingresaron y se convirtieron en partidarios del gobierno soviético.
En el Comisariado de Agricultura de Petrogrado hay un mapa de Rusia, salpicado de alfileres rojos. Cada uno de esos alfileres representa un Soviet de Diputados Campesino. La primer vez que vi el mapa, fijado en el viejo cuartel general de los Soviets de campesinos en Fontanka, los puntos rojos se esparcían diseminados por el vasto país, y su numero no aumentaba. En los primeros ocho meses de la revolución, había volosts, uyezds, provincias enteras, de hecho, donde sólo una o dos grandes ciudades y quizá unos cuantos pueblo dispersos tenían un Soviet de campesinos. Sin embargo, después de la revolución de noviembre podías ver a toda Rusia enrojecer ante tus ojos, a medida que pueblo tras pueblo, condado tras condado, provincia tras provincia, se levantaba y formaba su Consejo de Campesinos.
En el momento de la insurrección bolchevique podría haberse elegido una Asamblea Constituyente con una mayoría anti-soviética. Un mes después esto habría sido imposible. Yo vi tres Convenciones Panrusas de Campesinos en Petrogrado. Los delegados llegaban -la gran mayoría de ellos revolucionarios socialistas del ala derecha-. Comenzaba la sesión -y siempre eran sesiones violentas- bajo la presencia de Avksentiev o Peshekhanov. En pocos días se desplazarían hacia la izquierda y serían dominados por seudo-radicales como Tchernov. Poridonova sería elegida presidenta. Entonces la minoría conservadora se escindiría y montaría una convención alternativa que en pocos días acabaría en nada. Y la mayoría enviaría delegados para unirse a los Soviets en Smolny. Esto pasó cada una de la veces.
Nunca olvidaré la Conferencia de Campesinos que tuvo lugar a finales de noviembre y cómo Tchernov luchó por el control y lo perdió, y esa maravillosa marcha de proletarios encanecidos por el polvo que marchaba hacia Smolny a través de las calles nevadas, cantando, con sus banderas rojo-sangre ondeando en el viento helado. Era noche cerrada. En los escalones de Smolny cientos de hombres trabajadores esperaban para recibir a sus hermanos campesinos, y, bajo la débil luz, las dos masas, una descendiendo y la otra ascendiendo, se fundieron rápidamente y se abrazaban, y lloraban, y aplaudían.
Los Soviets pueden aprobar decretos que supongan cambios económicos fundamentales, pero deben llevarse a cabo por las propias organizaciones populares locales.
La confiscación y distribución de la tierra, por ejemplo, se dejó en manos de los Comités de la Tierra de los Campesinos. Estos Comités de la Tierra fueron elegidos por los campesinos a propuesta del Príncipe Lvov, el primer jefe del gobierno provisional. Con respecto a la cuestión de la tierra, fue inevitable llegar a un acuerdo, según el cual, las grandes haciendas debían ser fraccionadas y distribuidas entre los campesinos. El Príncipe Lvov pidió a los campesinos que eligieran Comités de Tierra, que no sólo debían determinar sus propias necesidades agrícolas, sino también medir y hacer avalúo de las grandes fincas. Pero cuando estos comités de la Tierra intentaron funcionar, los propietarios los habían detenidos.
Cuando los Soviets tomaron el poder su primera acción fue promulgar el Decreto de la Tierra. Este Decreto no era siquiera un proyecto bolchevique, sino el programa del ala derecha (o moderada) del Partido Socialista Revolucionario, desarrollado a partir de varios centenares de peticiones de campesinos. El decreto abolió para siempre los títulos privados de la tierra o recursos naturales de Rusia y dejó a los Comité de Tierra la tarea de distribuir la tierra entre los campesinos, hasta que la Asamblea Constituyente resolviera finalmente la cuestión.
Tras la disolución de la asamblea constituyente, el decreto se hizo definitivo.
Aparte de estas pocas proposiciones generales y de una sección establecida para emigración de la población excedente en vecindarios superpoblados, los detalles de la confiscación y la distribución se dejaron enteramente a los Comités Locales de la Tierra. Kalagayev, el primer Comisario de Agricultura elaboró un detallado conjunto de reglas para guiar a los campesinos en un detallado conjunto de reglas para guiar a los campesinos en su acción. Pero Lenin, en un discurso ante el Comité central Ejecutivo, persuadió al gobierno que dejara a los campesinos llevar el asunto de una manera revolucionaria, aconsejando solamente a los campesinos pobres que se organizaran contra los campesinos ricos ("Dejad que diez campesinos pobres se enfrenten a cada campesino rico" dijo Lenin).
Por supuesto ningún campesino podía poseer su tierra, no obstante, podía tomar lo que la tierra le ofrecía y tratarlo como propiedad privada. Pero la política del gobierno, actuando a través del Comité Local de la Tierra, es desalentar esta tendencia. Los campesinos que quieren convertirse en propietarios pueden hacerlo, pero no son ayudados por el gobierno. Por el contrario, a los campesinos que cultivan cooperativamente se les dan créditos, simientes, herramientas, y formación en técnicas modernas.
Adscritos a los Comités de Tierra hay expertos en agricultura i silvicultura. Para coordinar las prácticas de los Comités Locales, se elige de entre ellos un órgano central, conocido como el Comité Principal de la Tierra, que se encuentra en la capital, en estrecho contacto con el Comisariado de Agricultura.
Cuando estalló la revolución de marzo, los propietarios y administradores de muchas plantas industriales, o bien las dejaron o fueron expulsados por los trabajadores. En las fábricas del gobierno, donde el trabajo había estado mucho tiempo a merced de burócratas irresponsables designados por el zar, se dio especialmente esta situación.
Sin directores, encargados y en muchos casos ingenieros y contables, los trabajadores se encontraban enfrentados a la alternativa de continuar trabajando o morir de hambre. Se eligió un comité, con un delgado de cada "sección" o departamento, este comité, intentó dirigir la fábrica ... Por supuesto, al principio, éste pareció un plan sin futuro. Las funciones de los diferentes departamentos podían coordinarse de ésta manera, pero la falta de formación técnica por parte de los trabajadores produjo algunos resultados grotescos.
Finalmente se celebró la reunión del comité en una de las fábricas, donde un trabajador se levantó y dijo: "Camaradas, ¿Por qué nos preocupamos? La cuestión de los técnicos expertos no es difícil. Recordad que el jefe no era un técnico experto; el jefe no sabía ingeniería, química o contabilidad. Todo lo que hacía era poseer. Cuando quería ayuda técnica, contrataba hombres que se la proporcionaran. Bien, ahora nosotros somos los jefes. ¡Contratemos ingenieros, contables, etc., que trabajen para nosotros!.
En las fábricas estatales el problema era comparativamente simple, porque la Revolución destituyó automáticamente al "jefe" y realmente nunca lo substituyó por otro. Pero cuando los Comités de Delegados de Fábrica se entendieron a las fábricas de propiedad privada, fueron duramente combatidos por los propietarios de la fábricas, la mayoría de los cuales estaban estableciendo contactos con los sindicatos.
En las fábricas privadas, además, los comités de delegados eran producto de la necesidad. Después de los tres primeros meses de la Revolución, durante los cuales la clase media y las organizaciones proletarias trabajaron juntas en una armonía utópica, los capitalistas industriales comenzaron a temer el poder creciente y la ambición de las organizaciones trabajadoras -igual que los propietarios en el campo temían al comité de la tierra y los oficiales a los comités de soldados y a los Soviets-. Durante aproximadamente la primera parte de junio, comenzó la campaña más o menos consciente de toda la burguesía para detener la revolución y descomponer las organizaciones democráticas. Empezando por los Comités de delegados de Fábrica, los propietarios industriales planeaban barrerlo todo, incluidos los soviets. El ejército estaba desorganizado, se desviaban suministros, municiones y comida, y se entregaban posiciones reales a los alemanes, como Riga; en el campo, se persuadió a los campesinos para que guardaran el grano y provocaran desórdenes que dieron a los cosacos una excusa para "restaurar la paz"; y la industria. Más importante que todo lo demás, la maquinaria y el propio funcionamiento de las fábricas fueron saboteados, el transporte aún más destrozado y las minas de carbón y metal y las fuentes de materias primas dañadas lo más posible. No se ahorraron esfuerzos para cerrar las fábricas y rendir a los trabajadores, a fin de que volvieran a someterse al viejo régimen industrial.
Los trabajadores se vieron forzados a resistir a esto. El Comité de Delegados de Fábrica reaccionó y tomó el mando. Por supuesto, al principio, los trabajadores rusos cometieron absurdos errores, como se ha dicho a todo el mundo una y otra vez. Pedían salarios imposibles, intentaron llevar a cabo procesos de manufactura técnicamente complicados sin experiencia suficiente, en algunos casos incluso pidieron al jefe que volviera bajo sus propias condiciones.
Pero tales casos son una ínfima minoría; en la mayoría de las plantas trabajadoras eran lo bastante ingeniosos como para ser capaces de llevar la industria sin los jefes.
Los propietarios intentaron falsificar los libros, ocultar pedidos; el Comité de Delegados de Fábrica se vio obligado a encontrar formas de control de los libros. Los propietario trataron de robar piezas de las máquinas; así, el comité tuvo que reglamentar que nada debía entrar o salir de la planta sin permiso. Cuando la fábrica iba a cerrar por falta de combustible, materias primas o pedidos, el Comité de Delegados de Fábrica tenía que enviar hombres a través de media Rusia a las minas, o al Cáucaso a por aceite, o a Crimea a por algodón; y los trabajadores habían de enviar delegados a vender el producto. Durante el paro de los ferrocarriles, los agentes del comité tuvieron que llegar a acuerdo con el Sindicato de Ferroviarios para el transporte de cargas. Para defenderlo contra los huelguistas, el Comité tuvo que asumir la función de contratar y relevar a trabajadores.
Así el Comité de Delegados de Fábrica fue una creación de la anarquía rusa, forzada por la necesidad de aprender cómo aprender a dirigir la industria, para que cuando llegara el momento, los trabajadores rusos pudieran asumir el control real con pocas fricciones.
Como ejemplo de la forma en que las masas trabajadoras juntas, está el asunto de las 200.000 cargas de carbón, que se sacaron de las carboneras de la flota de combate báltica en diciembre y fueron transferidas por los comités de marinos para mantener en funcionamiento las fábricas de Petrogrado durante la carestía del carbón.
La Factoría Obukhov era una planta de acero que fabricaba suministros para la Armada. El presidene del comité de Obukhov era un ruso-americano, de nombre Petrovsky, bien conocido aquí como anarquista. Una día el encargado del departamento de torpedos dijo a Petrovsky que el departamento habría de cerrar, debido a la imposibilidad de obtener ciertos pequeños tubos usados por una fábrica del otro lado del río, cuya producción se había contratado para dentro de tres meses. El cierre del departamento de torpedos significaba que 400 hombres se quedarían sin trabajo.
-"Conseguiré los tubos"- dijo Petrovsky.
Fue directo a la fábrica, donde en vez de buscar al director, se dirigió al presidente del Comité de delegados de Fábrica local.
"Camarada", dijo "si no tenemos tubos en dos días nuestro departamento de torpedos tendrá que cerrar y 400 de los chicos quedarán sin trabajo".
El presiente pidió sus libros y descubrió que tres plantas privadas cercanas habían encargado varios miles de tubos. Él y Petrovsky visitaron inmediatamente estas tres plantas y llamaron a los Presidentes de sus Comités de delegados de Fábrica. En dos de las fábricas resultó que los tubos no se necesitaban inmediatamente; y al día siguiente se entregaron los tubos a la Fábrica Obukhov, y el departamento de torpedos no cerró.
En Novgorod había una fábrica textil. Al estallar la revolución, el propietario se dijo a sí mismo, "tenemos problemas. No podremos obtener beneficios mientras esta revolución continúe. Cerremos el negocio hasta que la cosa se acabe".
Así cerró la fábrica y él, los empleados de las oficinas, los químicos, ingenieros y el director, tomaron el tren a Petrogrado. Al día siguiente los trabajadores abrieron la fábrica. Pero esos trabajadores eran quizá un poco más ignorantes que la mayoría de los trabajadores. No sabían nada de procesos técnicos de manufactura, sobre la contabilidad, dirección o venta. Eligieron un Comité de Delegados de fábrica y encontraron cierta cantidad de combustible y materias primas almacenada, dispuestas para la manufactura de tela de algodón.
No sabiendo qué se hacía con la tela de algodón una vez fabricada, primero se proveyeron en cantidad suficiente para sus familias. Después, como algunos telares estaban estropeados, enviaron a un taller de maquinaria cercano a un delegado, que propuso entregar tela a cambio de asistencia técnica. Hecho esto, llegaron a un acuerdo con la cooperativa local, para proporcionar ropa a cambio de comida. Llevaron incluso el principio del trueque al extremo de cambiar piezas de tela por combustible con los mineros de carbón de Jarkov, y por transporte con el Sindicato de Ferroviarios.
Pero finalmente saturaron el mercado local de tela de algodón y entonces chocaron con una demanda que el paño no podía satisfacer -el alquiler. Esto sucedía en los días del Gobierno Provisional, cuando aún existían propietarios. El alquiler había de pagarse con dinero. Así que cargaron un tren de tela y lo enviaron, a cargo de un delegado, a Moscú. El delegado dejó el tren en la estación y recorrió la calle. Entró en una sastrería y preguntó si el sastre necesitaba tela.
-"¿Cuánta?" - Preguntó el Sastre.
-"Un tren" - Contestó el delegado.
-"¿A qué precio?"-
-"No lo sé. ¿Cuánto pagas normalmente por la tela?".
El sastre consiguió la tela casi regalada y el delegado, que nunca había visto tanto dinero junto, volvió a Novgorod enormemente contento.
Así era como en toda Rusia los trabajadores estaban adquiriendo la formación necesaria en los fundamentos de la producción industrial e incluso la distribución, para que cuando llegara la revolución de Noviembre pudieran ocupar sus puestos en la organización del control obrero.
En junio de 1917 se celebró la primera reunión de comités de delegados. En este momento los comités apenas se habían extendido fuera de Petrogrado. Fue una reunión notable, formada por los delegados de la actual base, la mayoría de ellos bolcheviques, algunos anarco-sindicalistas; y su razón de ser era la protesta contra las tácticas de los sindicatos. En el mundo político los bolcheviques repetían que ningún socialista tenía derecho a participar en un gobierno de coalición con la burguesía. La propia reunión de delegados de comités adoptó la posición de tener la misma actitud hacia la industria.
En otras palabras, los empresarios y los trabajadores no tienen ningún interés en común; ningún trabajador con conciencia de clase puede ser miembro de una mesa de arbitraje o conciliación salvó para hacer saber a los empresarios las demandas de los trabajadores. La producción industrial ha de estar absolutamente controlada por los trabajadores.
En un primer momento los sindicatos lucharon encarnizadamente contra los Comités de Fábrica. Pero los Comités, que estaban en posición de asumir el control de la industria, consolidaron y extendieron su poder fácilmente. Muchos trabajadores podían no ver la necesidad de sindicarse, pero todos ellos veían la necesidad de participar en la elecciones del comité que controlaba sus trabajos de forma inmediata. Por otra parte los Comités de delegados reconocían el valor de los sindicatos; no se empleaba a ningún trabajador nuevo a menos que pudiera mostrar un carné de sindicato; eran los comités de delegados los que aplicaban localmente los reglamentos de los diferentes sindicatos. En este momento los sindicatos y los Comités de Fábrica trabajaban en perfecta armonía cada uno de ellos en su ámbito.
La propiedad privada de la industria no está aún abolida en Rusia. En muchas fábricas el propietario aún mantiene su título, y se le permite cierto beneficio limitado en su inversión, con la condición de que trabaje por el éxito y el aumento de la extensión de la empresa; pero se le ha quitado el control. Aquellas industrias cuyos propietarios intentan cerrar la puerta a sus trabajadores, o por el fraude o la fuerza tratan de obstaculizar las operaciones de la planta, son inmediatamente confiscadas por los trabajadores. Las condiciones, las horas y salarios de todas las industrias, de propiedad privada o estatal, son uniformes.
La razón para esta supervivencia de un semi-capitalismo en un estado proletario, reside en el pasado de la vida económica de Rusia, el estado capitalista altamente organizado circundante y la necesidad de producción industrial inmediata en Rusia, para combatir la presión de la industria extranjera.
El agente por el que el estado controla la industria, tanta el trabajo como la producción se llama Consejo de Control de Trabajadores. Este órgano central, situado en la capital está compuesto por delegados elegidos de los Consejos del Control de los Obreros locales, los cuales están formados por miembros de Comités de Delegados de Fábricas, delegados sindicales profesionales e ingenieros técnicos y expertos. Un Comité Ejecutivo Central dirige los asuntos de cada localidad, compuesto por trabajadores comunes, pero la mayoría trabajadores de otros distritos, para que sus decisiones estén libres de cualquier interés sectorial. Los consejos locales recomiendan al Consejo Panruso la confiscación de las fábricas, informan sobre las necesidades de combustible, materias primas, transporte y trabajos en sus distritos, y ayudan a los trabajadores en el aprendizaje para dirigir las diferentes industrias. El Consejo Panruso tiene autoridad para confiscar plantas y para igualar los recursos económicos de las diferentes localidades...
Si no hubiera sido por las organizaciones democráticas que existían ya antes de la revolución, no hay duda de que la revolución Rusa se habría estancado hace mucho tiempo.
La organización comercial ordinaria de distribución había sido totalmente destrozada. Sólo las sociedades cooperativas de consumidores conseguían alimentar al pueblo, y su sistema ha sido adoptado hace tiempo por los municipios, e incluso por el gobierno.
Antes de la revolución había más de veinte millones de miembros en sociedades cooperativas en Rusia. Esta es una forma muy natural para los rusos, por su parecido con la primitiva cooperación de vida rural de Rusia durante siglos.
En la fábrica Putilov, donde están empleados más de 40.000 trabajadores, la sociedad cooperativa alimentó, albergó e incluso visitó a más de 100.000 personas, proveyéndose del vestido en Inglaterra.
Es este el carácter de los rusos el que olvida la gente que piensa que Rusia no puede tener ningún gobierno porque no hay fuerza central; y cuya imagen mental de Rusia es un comité servil en Moscú, dominado por Lenin, Trotsky, y mantenido por mercenarios de la Guardia Roja.
Más bien es cierto todo lo contrario. Las organizaciones que he descrito se reproducen en casi todas las comunidades de Rusia. Y si una parte considerable de Rusia se opusiera seriamente al gobierno soviético, los Soviets no durarían ni una hora.

John Reed nació en EE.UU. en 1887. Pronto inició su carrera como periodista para una publicación socialista. Organizador para la agrupación sindicalista International Workers of the World (IWW) durante la Depresión, y luego en el Partido Socialista de los EEUU, Reed rápidamente se volvió un héroe entre intelectuales radicales en los Estados Unidos. Destacado a Europa como corresponsal sobre la I Guerra Mundial para la revista Metropolitan, Reed viaja a Rusia en 1917 donde presencia la Revolución de Octubre y reúne el material que luego convertiría en su obra maestra, el libro Diez días que estremecieron al mundo. Al volver a los EEUU es expulsado del Partido Socialista por sus ideas radicales y participa en la fundación del Communist Labor Party. Cuando el gobierno ordena su captura por ser comunista, Reed escapa a Rusia en 1919, donde busca el reconocimiento oficial de su partido por la Comintern, y participa en el famoso Congreso de los Pueblos de Oriente en Bakú. En 1920 fallece de tifus en Rusia y es enterrado junto al Kremlin en la Plaza Roja de Moscú como héroe de la Revolución.
La primera edición de esta crónica fue publicada en The Liberator, octubre de 1918, en el primer aniversario de la Revolución Rusa. La versión actual procede del Marxists Internet Archive
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