sábado, 30 de abril de 2016

"MONUMENTO A LA FRATERNIDAD ARMADA" DE VARSOVIA, OBRA DE ALEXANDER NIENKO


Monumento a la fraternidad armada
Alexander Nienko
1945
Plaza Vilnius, Varsovia (Polonia)


Al poco de concluir la II Guerra Mundial, el gobierno comunista provisional de Polonia mandó erigir en el popular barrio de Praga de Varsovia, un monumento a la colaboración militar de polacos y soviéticos en el Ejército Rojo.

El monumento, el primero de esta índole que se levantaba en la ciudad, muestra en lo alto de un pedestal a tres soldados preparados para el combate, mientras que a sus pies, se encuentran otros cuatro militares erguidos en actitud vigilante.

Las esculturas fueron realizadas con metal confiscado al ejército nazi, mientras que el pedestal de granito rojo fue reutilizado de un antiguo monumento eclesiástico.

El conjunto presenta una inscripcion en ruso y polaco en la que puede leerse:

“Gloria a los héroes del Ejército Soviético, hermanos de armas que dieron su vida por la libertad y la independencia del pueblo polaco. Este monumento fue erigido por los habitantes de Varsovia en 1945”.

Es interesante constatar que el primer gran monumento levantado por el gobierno comunista polaco tras la guerra, fuera a la “fraternidad” entre el ejército polaco y el soviético.

El discutido papel de la URSS durante el ataque nazi a Polonia en 1939, así como las históricas guerras polacas contra el imperialismo zarista, hacían que las relaciones entre la URSS y Polonia fueran tratadas con suma delicadeza, especialmente a sabiendas de la importancia geográfica de un país, que además era vecino de la Unión Soviética.

El lugar escogido para su colocación, un barrio obrero, no evito que los nacionalistas polacos siempre recelaran del monumento y lo llamaran “los cuatro tristes” o “tres combaten, cuatro duermen”.

Tras estar a punto de desaparecer en 1992, el monumento fue desmontado y trasladado a un almacén en 2012, debido a las obras realizadas en una vía del metro de Varsovia.

Fuente: Leninland

viernes, 29 de abril de 2016

LYUBA VINOGRADOVA RELATA EN "LAS BRUJAS DE LA NOCHE" LA HISTORIA DE LAS PILOTOS SOVIÉTICAS QUE LUCHARON CONTRA LOS ALEMANES EN LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL

LAS AVIADORAS DE STALIN

La moscovita Lilya Litvyak tenía 21 años cuando murió en 1943. El avión que pilotaba desapareció en la batalla de Kursk contra los alemanes, en el Este de Rusia. Lilya formaba parte de los tres escuadrones de aviación exclusivamente femeninos que había creado Stalin. Eran 'Las brujas de la noche', nombre también del libro de Lyuba Vinogradova que ahora publica la editorial Pasado & Presente. El apodo se lo pusieron los soldados alemanes a quienes las aviadoras hostigaban sin descanso, sobrevolando las posiciones enemigas en la oscuridad, con el motor apagado y produciendo un zumbido similar al de las escobas al barrer.

Vinogradova  toma como argumento la vida no contada hasta ahora de Lilya, para acercarnos a aquel grupo de mujeres, jovencísimas y valientes, que pusieron en jaque a la Lutwaffe y la Wehrmacht y minaron la moral de sus hombres. Lo hace con datos y testimonios inéditos de algunas supervivientes, entrelazando victorias, dramas y anécdotas cómicas, como cuando las recién reclutadas hubieron de vestirse con los enormes los uniformes pensados solo para hombres.

“He querido narrar los dos primeros años la guerra a través de las historias de Lilya y sus colegas”, afirma la investigadora, en la entrevista concedida a este periódico. “Tuve la enorme suerte de poder encontrar a varias personas que vivieron y participaron en aquellos hechos. Muchas de las pilotos que lucharon ya no están, pero he encontrado otras pilotos, mecánicos y la radio operadora que conoció a Lilya personalmente y que habló con ella cuando estaba en el aire”.

RECLUTAMIENTO URGENTE

En 1941 las tropas alemanas avanzaban hacia Moscú y una aviadora y heroína nacional, Marina Raskova, colaboradora también con las fuerzas de seguridad de Stalin, fue encargada de crear los regimientos aéreos femeninos. Su llamamiento pidiendo voluntarias tuvo una respuesta multitudinaria. “Raskova recibió cientos de cartas de mujeres que eran pilotos experimentados, o principiantes, o aspirantes a pilotos. Todas ellas ardían de ganas de ir al frente, pero habían sido rechazadas. Raskova las ayudó a realizar su sueño”.
Vinogradova, colaboradora de historiadores como Antony Beevor y Max Hastings, mezcla rigor y pasión en un relato sobre los horrores de la contienda y el coraje de Lilya y sus compañeras. “Era mujeres que habían crecido con valores comunistas y morir por la patria les parecía lo más normal, algo que es difícil de entender ahora. Tampoco hay que olvidar que eran muy jóvenes y la muerte les da menos miedo a los jóvenes, porque les parece algo completamente improbable”.

CONTRA LOS PREJUICIOS

Las aviadoras tuvieron también que luchar contra los prejuicios machistas de sus propios líderes, empeñados a ver a las mujeres como el sexo débil. “Ellas no eran feministas, pero eran mujeres que, por primera vez en la historia de Rusia, tuvieron los mismos derechos que los hombres. La contribución de las mujeres durante la guerra fue vital”, señala Vinogradova.

“Evidentemente, los pilotos femeninos proporcionaron un increíble material de propaganda, porque probaban que las mujeres pueden tener tanto éxito como los hombres en la difícil profesión castrense”. Su disciplina y determinación a la hora de abatir los aviones enemigos en misiones en las que muchas perecieron no les impidieron disfrutar de momentos de placer. Las mujeres de los regimientos femeninos aprovecharon cada paracaídas de seda capturado a los alemanes para hacerse ropa interior y otras prendas. Tampoco desperdiciaron la más mínima oportunidad, cuando se presentó, de bailar o enamorarse.

El relato concluye con la muerte de Lilya en el verano de 1943. Será ahí donde comience el próximo libro de Vinogradova, sobre los llamados 'ángeles vengadores', una historia sobre 20 mujeres que fueron francotiradoras durante la guerra. “De esta forma podré relatar toda la guerra, vista con los ojos de las jóvenes muchachas que participaron en ella”.

Reseña de Begoña Arce (Fuente: elPeriódico)

Las aviadoras Marina Raskova, Polina Osipenko y Valentina Grizodúbova, en 1938

Lilia Litvak, con el mecánico Semión Nizin en Stalingrado

Lilia Litviak, Katia Budánova y Masha Kuznetsova, repasando su plan de vuelo sobre Stalingrado, en otoño de 1942

Mecánicas reparando un Yak en Stalingrado

Una aviadora sin identificar, Katia Budánova y Zhenia Prójorova

Galia Dzhunkóvskaia, Masha Dólina y Vania Soliónov, bajo el morro de su bombardero Pe-2

jueves, 28 de abril de 2016

"AUNQUE TÚ NO LO SEPAS": UNA PELÍCULA PARA UN POETA

El largometraje sobre el universo poético de Luis García Montero se estrena este sábado en el Festival de Cine Español de Málaga


Con cada nuevo libro de poesía que publica, García Montero tiene la particularidad de alcanzar el top de los libros más vendidos. Sus recitales se convierten en aforos completos y su figura es amada por muchos pero también denostada por algunas voces discordantes.

‘Aunque tú no lo sepas: La poesía de Luis García Montero’ trata de averiguar cuál es el secreto para que Luis García Montero se haya convertido en uno de los poetas principales de nuestra poesía, quiénes fueron sus principales maestros en el mundo de la poesía y quién es en realidad el poeta granadino.

El documental, dirigido por Charlie Arnaiz y Alberto Ortega, es igualmente un homenaje a la poesía y a toda una generación de poetas que, frente a los versos ininteligibles, entendieron que la poesía debe hablar con los lectores y comprometerse social y políticamente.

La película no sólo está dirigida a los seguidores de Luis García Montero, sino también y “sobretodo a quienes aún no han descubierto” la obra literaria del poeta español vivo más leído.

En la película intervienen amigos del poeta para dibujar un perfil con múltiples facetas del poeta a través de la canción ‘Aunque tú no lo sepas’, uno de los poemas más conocidos de García Montero que sirvió como inspiración a la mítica y homónima canción compuesta por el músico Quique González e interpretada también por el malogrado Enrique Urquijo.

La música ocupa un papel central en la película gracias a las aportaciones de artistas como Joan Manuel Serrat, Miguel Ríos, Joaquín Sabina, Estrella Morente, los granadinos TNT o el propio Quique González.

Además de los músicos nombrados anteriormente, en la película ‘Aunque tú no lo sepas’ intervienen las periodistas Ángels Barceló y Mara Torres, el cantautor Ismael Serrano, el novelista Eduardo Mendicutti, el actor Juan Diego Botto o el editor de poesía Chus Visor, todos ellos amigos y admiradores de la obra del poeta granadino, y la novelista Almudena Grandes, compañera sentimental de Luis García Montero.

La cinta cuenta con la participación de Canal Sur Televisión y Televisión Española y se estrena este sábado 23 de abril en el Festival de Cine Español de Málaga, dentro de la sección de cine documental.

QUIÉN ES GARCÍA MONTERO

El poeta Luis García Montero (Granada, 1958) es catedrático de Filología Hispánica en la Universidad de Granada y discípulo de Rafael Alberti, ilustre miembro de la Generación del 27, con quien mantuvo una gran amistad hasta la muerte del que fuera también diputado comunista en las primeras Cortes Constituyentes después de casi cuarenta años de exilio provocado por la dictadura franquista.

Vinculado al grupo poético ‘La otra sentimentalidad’, García Montero se ha caracterizado por diluir su yo poético en la experiencia colectiva, por su compromiso con tantas causas sociales, culturales y políticas como le han reclamado su apoyo explícito y ser actualmente el poema español más leído y vendido.

Entre las distinciones, el poeta granadino ha sido Premio Nacional de Poesía en 1995 por ‘Habitaciones separadas’, Premio Nacional de la Crítica por ‘La intimidad de la serpiente’ en 2003 y Premio Poetas del Mundo Latino por su trayectoria como autor de habla hispana en 2010.

Desde 1994 comparte su vida con la escritora Almudena Grandes.
 Su poesía se caracteriza por un lenguaje coloquial y por la reflexión a partir de acontecimientos o situaciones cotidianas. Luis García Montero siempre ha optado en su literatura por ser testigo de su tiempo. Cercano a la sociedad y los acontecimientos que vive, sus poemas son una mirada a la realidad que buscan una “necesaria” comunicación con sus lectores. El crítico español José Carlos Mainer lo definió como “el poeta necesario”.

Los directores de ‘Aunque tú no lo sepas: La poesía de Luis García Montero’ son el alicantino Charlie Arnaiz y el también cineasta madrileño Alberto Ortega, ambos con amplia experiencia en el audiovisual español que se estrenan con esta cinta en el largometraje documental.

Fuente: andalucesdiario


miércoles, 27 de abril de 2016

"GERNIKA", CUANDO LAS BOMBAS OSCURECIERON LA TARDE



El festival de Málaga estrena la película en el 79 aniversario del ataque

No fue el bombardeo más sanguinario. Murieron unas 160 personas, aunque el dolor jamás se podrá medir en valores matemáticos. Pero duró tres horas y media, toda la angustiosa tarde de un 26 de abril de 1937, hoy hace 79 años. Y arrasó por completo con un pueblo vizcaíno, Gernika, en un experimento realizado por alemanes para ensayar tácticas que posteriormente utilizaron durante la Segunda Guerra Mundial. Desde aquel lunes de primavera, todo fue permitido en un conflicto bélico: primero se arrojaron bombas sobre la villa que alarmaron a la población, luego llegaron los bombardeos que arrasaron con explosivos y bombas incendiarias, y finalmente, cazas que ametrallaron a quienes aún intentaban huir. Todo un macabro éxito de la Legión Cóndor, comandada por el teniente coronel Wolfram von Richthofen, contra un pueblo que ni siquiera contaba con defensas antiaéreas.

Con lo que no contó la aviación alemana fue con la crónica de George Lowther Steer, uno de los grandes reporteros extranjeros presentes en la zona republicana. El inglés Steer envió desde Bilbao su reportaje al londinense Times, que también acabó en el neoyorquino The New York Times. Tampoco con que la noticia saldría en el francés L’Humanité, el periódico que leía Pablo Picasso, que en 33 días realizaría su famoso mural.

Y a pesar de todo, nunca se ha reflejado en el cine español, y solo una vez en una miniserie de la ETB. Ese paso lo ha encabezado Koldo Serra (Bilbao, 1975) en su segundo largometraje, que se ha proyectado en la sección oficial del festival de Málaga. “Quien espere un documental sobre el acontecimiento, se sentirán defraudados. Esta película transcurre los cinco días previos al salvajismo”, explica de su Gernika. “Pero hemos reflejado algunos de sus peores momentos, vemos cómo los alemanes preparan la acción. Probablemente el de Durango le superó en brutalidad, sin embargo el mundo entero solo conoce un cuadro”.


Serra llegó al proyecto con el guion en marcha. En la producción, internacional, se mezclan ingleses como James D’Arcy y Jack Davenport, con intérpretes españoles como María Valverde, Bárbara Goenaga, Álex García o Ingrid García-Jonsson (que da vida a una fotógrafa estadounidense). “Es un melodrama al uso, con amores y desencuentros políticos, con una estética cercana a la de las películas sobre la Segunda Guerra Mundial al estilo El desafío de las águilas o la serie Band of brothers, porque transcurre en parajes verdes, hay mar, en un espacio muy atípico como Euskadi, con católicos republicanos, curas a favor del Gobierno”, rememora Serra alrededor de aquella masacre realizada con la orden o al menos la connivencia del general Mola.

En Gernika, el bombardeo recupera los recuerdos de las víctimas –algunas incluso se acercaron al rodaje en los cinco pueblos que han servido para recrear aquella villa-, que dan pie a imágenes icónicas. “Sí, hubo una mujer que con la llave en mano se quedó delante de la puerta de su casa… y detrás ya no había nada. O esa otra vecina, partidaria de los nacionalistas, que acabó en un sótano refugiada con las otras víctimas. Su hermana paralítica, también franquista, no pudo salir de su casa y murió allí mismo. En la guerra todos son iguales, inocentes”, según el director.

Fue también el apogeo de los reporteros de guerra como estrellas del momento. Serra desmenuza: “Es la eclosión de la propaganda, el momento en que la tecnología permite rápidamente transmitir textos y por primera vez imágenes de lo ocurrido a todo el mundo. El mito Capa, por ejemplo, nace aquí. Hemingway encuentra su lugar”. Un caldo de cultivo perfecto para la gran pantalla, un acontecimiento propagandístico mundial. “Y por eso, cuando me llamaron los productores, pensé que sería la quinta o sexta versión de aquella barbaridad. Me quedé sorprendido. No hay nada. No sé si por tabú, porque hasta 1997 el Gobierno alemán no reconoció. Y por supuesto, no creo en ese bulo de que se hacen muchas películas españolas sobre la Guerra Civil. Se filman pocas, y serían necesarias muchas más. No podemos olvidar”.


Gernika, tras el bombardeo de abril de 1937.

 A pesar de que llegue hoy al festival de Málaga, y a salas comerciales el 9 de septiembre, el proyecto ha sufrido muchos cambios. “Yo llevo en él cuatro años, y ya llevaba un buen tiempo en marcha”, cuenta Koldo Serra de su Gernika, su segundo largometraje tras Bosque de sombras, también filmada con actores extranjeros. “El presupuesto ideal era de 10 millones de euros, y lo hemos hecho con seis millones. Soy de Bilbao, por tanto muy cabezota. Es una película hiperfísica, porque salvo los aviones, recreados digitalmente, el resto estaba ahí: explosiones, fuego… Mira, he compartido con Exodus, de Ridlet Scott, a María Valverde y un carro de bueyes [risas]. Usé en lo posible localizaciones reales –el Ayuntamiento de Bilbao, el teatro Arriaga- porque el público lo agradece”. De aquella Gernika de 1937 solo quedan la Iglesia, la plaza del mercado y el árbol. “La hemos recreado en tres pueblos de Euskadi y en dos de Zaragoza”.

Fuente: El País

martes, 26 de abril de 2016

"LEYUAD. UN VIAJE AL POZO DE LOS VERSOS": SAHARAUIS DEBUTAN EN SAN SEBASTIÁN CON UNA "ROAD MOVIE" INSPIRADORA

LEYUAD. UN VIAJE AL POZO DE LOS VERSOS
2015
República Árabe Saharaui Democrática.
Dirección: Gonzalo Moure, Brahim Chagaf, Inés G. Aparicio.
Producción: Nicolas F. Calvo Bernal.
Guion: Gonzalo Moure, Limam Boisha.
Fotografía: Inés G. Aparicio, Ahmed Mohamed Lamin.
Musika / Música / Music: Gabo Flores, Fernando Blanco.
Montaje: Brahim Chagaf, Inés G. Aparicio.
Participantes: Limam Boisha, Abduláh Selma Brahim (Belga), Bonnana Busseid, Badi Mohamed Salem, Sidi Brahim Salama, Dida Bujteh, Mohamed Mahfud.
Duración: 74 min
IDIOMA: hassanía, castellano / SUBTÍTULOS: castellano
Sinopsis: Limam Boisha, poeta saharaui que vive en Madrid, confiesa que se ha quedado "seco del Sahara" y viaja hasta el Sahara Occidental para recuperar la inspiración para sus versos. Allí, Hamida Abdulláh le narra el viaje que hicieron junto al filósofo Belga Mohamed Salem y el poeta y erudito Bonnana Busseid hasta Leyuad, en el corazón del Tiris, la ancestral Tierra de los Hombres del Libro, la génesis de la identidad del pueblo saharaui, camino que les mostró Badi Mohamed Salem, el más grande de los poetas saharauis vivos. Un viaje duro y largo que con un plan como aquel, buscando la inspiración, el pozo de la poesía, no sería un viaje pesado por el desierto cruel, sería un viaje poético y emotivo. En Leyuad les espera en su jaima el poeta Sidi Brahim, que les mostrará los milagros de un lugar único y les adentrará en los mitos y secretos de los genios del desierto, aquellos "a los que no se puede nombrar".

El cine saharaui desembarca en el Festival de Cine de Derechos Humanos de San Sebastián con "Leyuad", una "road movie" plagada de emoción y sentimientos que se convertirá en el primer largometraje saharahui en participar en un certamen internacional.

Dirigida por Brahim Chagaf, Gonzalo Moure e Inés G. Aparicio, e interpretada por actores saharauis, Leyuad cuenta la historia Imam Boisha, un poeta saharaui que vive en Madrid y que tras perder su inspiración viaja hasta el Sahara Occidental para recuperar sus versos.

A su llegada se topa con Hamida Abdulláh, quien le narra el viaje que hicieron junto al filósofo belga Mohamed Salem y el poeta y erudito Bonnana Busseid hasta Leyuad, en el corazón del Tiris, la ancestral Tierra de los Hombres del Libro y lugar donde nació la identidad de pueblo saharaui.

Un viaje duro y largo que, gracias a la poesía, convierte el desierto cruel en el que viven los saharauis en un caminar poético y emotivo con un final esperanzador: en Leyuad les espera en su jaima el poeta Sidi Brahim, que les mostrará los milagros del pozo de los versos.

"Es una película de carretera en un lugar donde no hay carreteras. Un viaje a la esencia y la filosofía del pueblo saharaui", explica uno de sus promotores.

La cinta, que se presentará el martes en el teatro Victoria Eugenia de San Sebastián, fue rodada en 2015 en espacios naturales, en zonas del desierto occidental que el Frente Polisario arrebató a Marruecos y liberó de la actual potencia ocupante.

En su producción y patrocino han participado el Ministerio de Cultura Saharaui, el proyecto de bibliotecas en los campamentos BUBISHER y por la Escuela Audiovisual Saharaui, ambos impulsadas y apoyadas por la cooperación española.

En sus instalaciones, afectadas meses atrás por las mayores lluvias torrenciales caídas en los campos de refugiados saharauis en los últimos 40 años, se han formado tanto el codirector como los actores y el equipo técnico.

El pueblo saharaui vive refugiado en el desierto occidental de Argelia desde que en 1975 Marruecos aprovechara la desidia de la dictadura española para ocupar militarmente los territorios de la antigua colonia.

Desde entonces, el pueblo saharaui reclama la celebración de un referéndum de autodeterminación al que se opone Marruecos, pero que apoya Naciones Unidas y la mayor parte de la comunidad internacional.

Fuente: EFE

lunes, 25 de abril de 2016

ULTIMOS LENIN. EN TODOS LOS FRENTES, EN TODAS LAS CUESTIONES: LENIN EN SCHWERIN

Monumento a Lenin en Schwerin. Foto: leninisstillaround

Postura informal

Su mirada se deslizó audazmente hacia el infinito, la postura casual con las manos en los bolsillos de la chaqueta irradia la prudencia y la calma. Aquí el Lenin de Schwerin es desde hace años el foco de un intenso debate político entre partidarios y detractores de la estatua del héroe de la Revolución de Octubre.

La estatua de bronce de doce pies de altura, es uno de los últimos monumentos de Lenin establecidos en la RDA. Fue inaugurado oficialmente el 22 de junio de 1985. El lugar elegido fue la antigua Avenida Lenin (ahora Hamburger Allee) en medio de un relieve de edificios prefabricados y largas calles paralelas, en un distrito de clase obrera. Se trata de incorporar el reconocimiento público del papel indispensable del trabajo de la zona industrial de Schwerin Sur para el desarrollo económico de la región.

Como era de esperar, el monumento a partir de 1989 fue considerado hostil por muchos ciudadanos de Schwerin. Hasta la fecha, en varias ocasiones grupos políticos y de ciudadanos se manifiestan molestos por Lenin como un "asesino de masas" y requieren la demolición de la escultura. Hace algunos años presentó una comunidad religiosa la propuesta de fundir la escultura de bronce para hacer campanas para la iglesia. Otros críticos no insisten en la destrucción del monumento, aunque abogan sólo por su expulsión del espacio público, aceptando que podría encajar en un museo de historia.

Sin embargo, también hay un movimiento social fuerte que está trabajando activamente para la preservación y restauración de la estatua de bronce. Por un lado, Lenin fue honrado como un importante pensador del socialismo, cuyas ideas son todavía relevantes - la última demostración de los partidarios de la estatua de Lenin era tema "Amar, reír, leer Lenin!". Por otro lado, algunos historiadores tratan de despolitizar el debate y en su lugar toman el monumento como una obra de arte y un testimonio histórico que hay que proteger; después de todo, es una escultura del escultor estonio Jaak Soans. Es la única estatua de Lenin que hasta hoy ha podido preservarse en un sitio público de la RDA, un pedazo de historia viva.

Si bien el conflicto continúa, sin una solución definitiva a la vista, el gran Lenin superviviente se encuentra todavía en la Hamburger Allee y en las tardes soleadas proyecta su sombra en las calles del barrio que, debido a los numerosos inmigrantes rusos, también es llamado "Pequeño Moscú".

Carlos Gomes

Fuente: junge Welt

domingo, 24 de abril de 2016

"THÄLMANN EN LA INSURRECCIÓN DE HAMBURGO", DEL PINTOR DE LA RDA WILLI COLBERG


Thälmann en la insurrección de Hamburgo
Willi Colberg
1954
Oleo sobre lienzo
112x168,5 cm.
Museo de Historia Alemana, Berlín

Durante el año 1923, la situación económica en Alemania se deteriora rápidamente, sobre todo debido a la hiperinflación. La ocupación del Ruhr radicalizó los debates políticos. En agosto, una huelga llevó a la caída del gobierno. El contexto político alemán lleva a la Internacional Comunista a creer que una revolución en Alemania es posible. Los planes de la insurgencia se desarrollan en Moscú en las reuniones entre los líderes soviéticos y representantes del KPD. La entrada de los comunistas en los gobiernos socialdemócratas de Sajonia y Turingia será la oportunidad para lanzar una huelga general que daría lugar a una insurrección nacional y la toma del poder.

El levantamiento nacional, sin embargo, fue cancelado en el último momento por la dirección del KPD, al ver que los socialdemócratas de izquierda, de que se esperaba el apoyo, se negaron a unirse a la acción. La insurrección de Hamburgo, dirigida por Ernst Thälmann, fue la única parte de la operación que se desencadena como se esperaba porque los comunistas locales no habían sido informados en tiempo que el "Octubre alemán" no tendría lugar.

La insurrección, sin esperanza debido a su aislamiento, fue aplastada en la noche del 23 al 24 de octubre. Mientras que el KPD en Hamburgo cuenta con 14 000 miembros, sólo 300 están activos en el levantamiento. Se apoderaron de 250 armas de fuego. El levantamiento provocó más de un centenar de víctimas y más de 300 heridos: entre las víctimas 17 policías, 24 insurgentes y 61 civiles. 1.400 personas fueron detenidas. Ernst Thälmann tuvo que pasar varios meses en la clandestinidad.

A largo plazo, la insurgencia ayuda a envenenar las relaciones entre el KPD y el SPD. Los socialdemócratas se niegan a cooperar con los comunistas. Los líderes del KPD, Heinrich Brandler y August Thalheimer, son despedidos a causa de la caída del "Octubre alemán". La insurrección de Hamburgo mantiene por el contrario la reputación de Ernst Thälmann que, con el apoyo de la Internacional Comunista, tomó la cabeza del KPD en 1925.
 

sábado, 23 de abril de 2016

DOCUMENTAL "VOLVER A NACER. MEMORIA DESDE EL EXILIO DEL GENOCIDIO DE LA UNIÓN PATRIÓTICA EN COLOMBIA"

VOLVER A NACER
Dir. Paco Simón / Oscar Bernácer
2008
Colombia
50 min.
Sinopsis:
Memoria desde el exilio del genocidio de la Unión Patriótica en Colombia. El video reconstruye la trágica historia de este partido a través de los testimonios de las y los exiliados en España. Hoy, en medio del dolor por tantas ausencias, se sienten orgullosos de lo que fueron y de lo que son aunque no puedan regresar a Colombia.


La Fundación CEPS (Centro de Estudios Políticos y Sociales) ha producido el documental "Volver a nacer", codirigido por Paco Simón y Óscar Bernàcer. Este trabajo es fruto de una investigación sobre los exiliados y exiliadas en España del partido colombiano Unión Patriótica (UP), que ha sido financiada por la Agència Catalana de Cooperació al Desenvolupament.

En 1984 el gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC acordaron el cese el fuego para iniciar conversaciones de paz. Un año después surgía un movimiento político en el cual los guerrilleros participarían cambiando el fusil por el discurso: la Unión Patriótica. Al proyecto se sumaron excombatientes, las principales fuerzas de izquierda e incluso liberales, conservadores y dirigentes sociales que buscaban una vía pacífica para llevar a cabo

los profundos cambios que Colombia necesitaba. Los magníficos resultados obtenidos en las elecciones de 1986 desencadenaron el comienzo del genocidio político de la UP: en menos de una década fueron asesinados unos 4.000 simpatizantes y militantes, la mayoría a manos de paramilitares, militares y policías plenamente identificados, a pesar de que no ha habido casi ninguna condena. Quienes dieron la orden de matar todavía permanecen ocultos bajo el oscuro manto de la impunidad. Unos y otros actuaron conjuntamente por miedo a que la UP se convirtiera en una opción real de poder en Colombia.

Durante todos estos años de persecución, centenares de militantes de la UP abandonaron Colombia para escapar de las balas. Volver a nacer reconstruye la trágica historia de este partido a través de los testimonios de las y los exiliados en España. Sus vidas son un ejemplo de lucha por la defensa de los derechos humanos en su sentido más amplio y representan una alternativa al conflicto que desangra su país desde hace décadas. Fueron hombres y mujeres valerosos que lo dieron todo por sus ideales y en el camino perdieron a sus compañeros, hijos, padres, amigos, conocidos... Hoy, en medio del dolor por tantas ausencias, se sienten orgullosos de lo que fueron y de lo que son aunque no puedan regresar a Colombia.

viernes, 22 de abril de 2016

70 ANIVERSARIO DE LA FUNDACIÓN DEL PARTIDO SOCIALISTA UNIFICADO DE ALEMANIA (SED)


El Partido Socialista Unificado de Alemania (Sozialistische Einheitspartei Deutschlands, abreviado SED) fue la principal formación política de la República Democrática Alemana (RDA), desde la fundación del estado el 7 de octubre de 1949 hasta las elecciones del 18 de marzo de 1990.

Después de la derrota de la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial los aliados legalizaron nuevamente algunos de los partidos que habían estado prohibidos bajo los nazis, así como la formación de nuevos grupos políticos. Los anteriormente prohibidos Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) y el Partido Comunista de Alemania (KPD) fueron legalizados nuevamente. En el pasado la cooperación entre ambos partidos había sido nula, lo que algunos han señalado como una de las razones de la victoria electoral del Partido nazi, pero después de 1945 habían entablado estrechas relaciones entre sí. Desde algunos sectores se empezó a hablar de la necesidad de alcanzar una confluencia entre ambos partidos. Esto llevaría a la fundación del Partido Socialista Unificado de Alemania el 21 abril de 1946 mediante la unificación de las secciones del KPD y el SPD en la zona ocupada por los soviéticos. El resultado fue la creación de un partido poderoso, con más de 1.260.000 afiliados. Sin embargo, el líder del SPD en las zona de ocupación de británica, Kurt Schumacher, se opuso furibundamente a esta unificación, e intentó hacer todo lo posible para impedirla, sin éxito. La unificación del SPD y el KPD tampoco fue muy bien vista por las otras potencias aliadas y en definitiva solo se llevó a cabo en la zona soviética.

En octubre de 1946 se celebraron elecciones regionales en la zona zoviética, que constituyeron los primeros comicios verdaderamente libres en esta zona de Alemania desde las elecciones noviembre de 1932; el SED obtuvo un cómputo total de casi el 50% de los votos en la Alemania Oriental. A partir de 1950 el SED formó parte del llamado Frente Nacional de Alemania Democrática, una especie de "Frente popular" que se creó junto a otros partidos como Unión Demócrata Cristiana (CDU) o Partido Liberal Democrático de Alemania (LDPD), y también con organizaciones como la Juventud Libre Alemana (FJD), la Federación Alemana de Sindicatos Libres (FDGB), etc. Esta coalición unitaria, controlada en la práctica por el SED, ocupó los escaños de la Cámara del Pueblo de la RDA durante cuatro décadas, hasta las elecciones de 1990.

El comunista Wilhelm Pieck y el socialdemócrata Otto Grotewohl ejercieron la dirección del partido desde su fundación hasta 1950, bajo copresidencia.

Walter Ulbricht se convirtió en el hombre fuerte del partido desde su regreso del exilio en la Unión Soviética, y fue elegido Secretario general del SED durante el III Congreso del partido (20-24 de julio de 1950).

Erich Honecker sustituyó a Ulbricht en 1971, lo que posteriormente facilitaría el reconocimiento recíproco entre la RFA y la RDA.

A finales de los años 1980, el Partido Socialista Unificado contaba con más de dos millones de militantes: concretamente, 2.260.979 militantes. Históricamente su secretario general era además el primer gobernante de la República Democrática. Tras la caída del Muro de Berlín en noviembre de 1989 y el desmoronamiento de todas las estructuras de poder de la República Democrática Alemana, el SED entró en una profunda crisis interna. Egon Krenz sustiyó a Honecker y se hizo con el liderazgo después de la caída de Honecker e intentó reformar el sistema desde dentro, pero fracasó completamente; incluso se encontró la oposición de señalados miembros del partido pertenecientes al sector reformista, como Gregor Gysi. El antiguo SED fue desmantelado desde dentro y el 16 de diciembre de 1989 cambió su denominación por la de Partido del Socialismo Democrático (PDS). En esa época perdió el 95% de la militancia.

Para las elecciones federales de 2005 el PDS formó coalición con Trabajo y Justicia Social – La Alternativa Electoral (WASG), una escisión del ala izquierda del Partido Socialdemócrata Alemán, liderada por el ex presidente socialdemócrata Oskar Lafontaine, y obtuvo los mejores resultados electorales desde 1989. En 2007 se produjo la fusión oficial de ambos partidos para crear Die Linke (La Izquierda).

HIMNO DEL SED: "LIED DER PARTEI"

jueves, 21 de abril de 2016

"EL CAZADOR DE HISTORIAS", EL REGALO PÓSTUMO DE GALEANO


La Casa de América acogió la semana pasada la presentación del libro póstumo del escritor uruguayo, coincidiendo con el aniversario de su muerte

Hace ahora un año, los millones de lectores y admiradores de Eduardo Galeano amanecieron con la peor de las noticias. El escritor, periodista y pensador uruguayo fallecía a los 74 años víctima de un cáncer de pulmón que padecía desde 2007, y que le había llevado a reducir su exposición pública. Pero no su labor literaria.

Coincidiendo con el aniversario de la desaparición del escritor, la Casa de América presentó este miércoles su obra póstuma, El cazador de historias, en la que Galeano volvió a volcar su inconfundible mirada del mundo. Cruda y sincera, pero también tierna e incluso salpicada de sentido del humor. Profundamente comprometida, como toda su trayectoria. Y más personal que nunca, pues a pesar de que siempre mantuvo una impecable discreción respecto a su vida privada, en su libro póstumo Galeano reflexiona sobre sus años de infancia y juventud y las personas que conoció en el camino.

“El cazador de historias es un libro querido y consciente, no sobrevenido”, explicó su editor, un emocionado Jesús Espino, de la editorial Siglo XXI, que se refirió a este 13 de abril como una fecha tan especial como difícil. “Eduardo lo tenía cerrado íntegramente en el verano de 2014. Su enfermedad provocó que se aplazase la publicación para no generarle más cansancio. Una vez superado el duelo de la familia, era el momento de que este regalo viese la luz”.

“Un mundo de mundos”

Carlos Martín Beristáin, jurista, defensor de los derechos humanos y amigo de Galeano, subrayó que El cazador de historias es “un mundo de mundos que nos dice algo de todos nosotros”. Por su parte, el escritor Luis Goytisolo elogió la “imaginación extraordinaria” del escritor uruguayo, así como sus dos vertientes, “la más intelectual y la más paradójica, poética y disparatada”.

Los actores Mariano Benancio y Rosana Pastor leyeron diversos fragmentos del libro que arrancaron a partes iguales aplausos, risas y silencios reflexivos entre el abarrotado auditorio. Textos sobre los nadie, sobre mujeres valientes de Latinoamérica y sobre su amado fútbol. Palabras poderosas sobre las injusticias y los desequilibrios del mundo de ayer y hoy, o sobre su infinito amor a los animales y el derecho a respirar aire limpio. Un pequeño aperitivo de una obra con la que Galeano puso el broche perfecto a una carrera tan brillante como personal e irrepetible.

Fuente: lamarea

miércoles, 20 de abril de 2016

SE CELEBRÓ EN COREA DEL NORTE EL XXX FESTIVAL DE LAS ARTES Y LA AMISTAD DE ABRIL CON PARTICIPACIÓN DE ARTISTAS ESPAÑOLES

La delegación española, a la izquierda, en la clausura en Pyongyang junto a artistas rusos, cubanos, peruanos, italianos y japoneses. / F. Robichon (Efe)

Al ritmo de La coplilla del olé y con la imagen de fondo de un patio andaluz. De esta forma tan improbable ha concluido en Pyongyang el Festival de las Artes de Corea del Norte en homenaje a su fundador Kim Il-sung, el Amado Líder abuelo del actual, Kim Jong-un.

Los cantantes españoles Manuel de Segura y María de Gracia, junto al Ballet Inquietudes, han sido los primeros españoles en participar en el evento que desde hace tres décadas trae a artistas de todo el mundo para celebrar el nacimiento del primer Amador Líder, Kim Il-sung, abuelo de Kim Jong-un, el actual máximo responsable del que pasa por ser uno de los países más herméticos del mundo.

«Los artistas vamos donde nos contratan y no miramos los colores», explica a Efe De Gracia en los camerinos de uno de los impresionantes teatros de la capital norcoreana que estos días se ha llenado de artistas de medio mundo, pero sobre todo de países amigos del régimen como Rusia, China, Cuba o Mongolia, para asistir a un festival al que se le puso punto final este domingo.

Corea del Norte se ha olvidado por una semana de las pruebas nucleares, los lanzamientos de misiles y las condenas de la comunidad internacional para centrarse en las celebraciones del nacimiento de su Gran Líder y Presidente Eterno, del que el pasado 15 de abril se cumplieron 104 años.

En este marco, se ha celebrado desde el día 11 y hasta el domingo el XXX Festival de la Amistad y las Artes de Abril, una cita que ha llenado los informativos de televisión y las densas páginas de los periódicos oficiales.

Pioneros

Antonio Lara, quien llegó a ser agente de la popular actriz y cantante Sara Montiel, se declara el culpable de la aventura. «Tengo mucha relación con embajadores y conocí al de Corea del Norte en Madrid hace dos años cuando se abrió la embajada. Desde entonces hablamos de la posibilidad de traer artistas españoles y aquí estamos», explicó Lara tras la última actuación.

A la solemne clausura celebrada el domingo en el Gran Teatro del Este de Pyongyang, a la que asistió el vicepresidente de la Asamblea Popular, Yang Hyong Sop, y el ministro de Cultura, Park Chuen Nam, se leyó una carta de agradecimiento de los asistentes al mariscal y actual líder, Kim Jong-un. «Nos hemos dado cuenta del esfuerzo que hace por la prosperidad de su pueblo», rezaba la misiva leída en ruso y traducida al coreano.

Junto al grupo de españoles, que estaba muy impresionado por el nivel técnico y la calidad de los teatros de la monumental capital norcoreana, actuaron (en lo que fue un clásico espectáculo de variedades) bandas de folclore ruso, cantantes japonesas y la Orquesta Sinfónica de Corea con un maestro italiano a la batuta. Los artistas españoles interpretaron piezas como Las coplillas del olé pero hasta Pyongyang han traído en su repertorio de cante y baile La morena de mi copla; La boda de Luis Alonso y El amor brujo.

«Fue una sorpresa. Pero enseguida pasó a ser ganas e ilusión, y al final, ha resultado ser un sueño. Hemos conocido gente y lugares nuevos y hemos recibido mucho cariño por parte del público y de los organizadores. Nos vamos con un recuerdo imborrable», explicó entusiasmada María de Gracia.

«Querían un trozo de España y aquí estamos. Hemos viajado mucho y ahora nos ha tocado este país. Y tenemos que decir que son unos genios a la hora de montar espectáculos», apuntó por su parte Segura, muy satisfecho también con esta originalísima experiencia.

VARIOS PREMIOS

Los artistas españoles se van de Corea del Norte con tres premios de oro del Festival, a los cantantes, al ballet y a la realización. Además no ocultan su orgullo de haber sido los primeros en traer flamenco y música española al aislado país asiático donde han conseguido que se tararee «Y ole con ole y olé olá» en los días en los que la imagen y las celebraciones en torno al fundador de la dinastía Kim lo invadían todo.

Fuente: El Correo de Andalucía

VIDEO RESUMEN DEL FESTIVAL:


martes, 19 de abril de 2016

25 AÑOS DE LA MUERTE DEL POETA COMUNISTA GABRIEL CELAYA


A ANDRÉS BASTERRA

Andrés, aunque te quitas la boina cuando paso
y me llamas «señor», distanciándote un poco.
reprobándome —veo— que no lleve corbata,
que trate falsamente de ser un tú cualquiera,
que cambie los papeles —tú por tú, tú barato—,
que no sea el que exiges —el amo respetable
que te descansaría—,
y me tiendes tu mano floja, rara, asusta
como un triste estropajo de esclavo milenario,
no somos dos extraños.
Tus penas yo las sufro. Mas no puedo aliviarte
de las tuyas dictando qué es lo justo y lo injusto.

No sé si tienes hijos.
No conozco tu casa, ni tus intimidades.
Te he visto en mis talleres, día a día, durando,
y nunca he distinguido si estabas triste, alegre,
cansado, indiferente, nostálgico o borracho.
Tampoco tú sabías cómo andaban mis nervios,
ni que escribía versos —siempre me ha avergonzado—,
ni que yo y tú, directos,
podíamos tocarnos, sin más ni más, ni menos,
cordialmente furiosos, estrictamente amargos,
anónimos, fallidos, descontentos a secas,
mas pese a todo unidos como trabajadores.

Estábamos unidos por la común tarea,
por quehaceres viriles, por cierto ser conjunto,
por labores sin duda poco sentimentales
—cumplir este pedido con tal costo a tal fecha;
arreglar como sea esta máquina hoy mismo—
y nunca nos hablamos de las cóleras frías,
de los milagros machos,
de cómo estos esfuerzos serán nuestra sustancia,
y el sueldo y la familia, cosas vanas, remotas,
accesorias, gratuitas, sin último sentido.
Nunca como el trabajo por sí y en sí sagrado
o sólo necesario.

Andrés, tú lo comprendes. Andrés, tú eres un vasco.
Contigo sí que puedo tratar de lo que importa,
de materias primeras,
resistencias opacas, cegueras sustanciales,
ofrecidas a manos que sabían tocarlas,
apreciarlas, pesarlas, valorarlas, herirlas,
orgullosas, fabriles, materiales, curiosas.
Tengo un título bello que tú entiendes: Madera,
Pino rojo de Suecia y Haya brava de Hungría,
Samanguilas y Okolas venidas de Guinea,
Robles de Slavonía y Abetos del Mar Blanco,
Pinoteas de Tampa, Mobile o Pensacola.

Maderas, las maderas humildemente nobles,
lentamente crecidas, cargadas de pasado,
nutridas de secretos terrenos y paciencia,
de primaveras justas, de duración callada,
de savias sustanciadas, felizmente ascendentes.
Maderas, las maderas buenas, limpias, sumisas,
y el olor que expandían,
y el gesto, el nudo, el vicio personal que tenían
a veces ciertas rollas,
la influencia escondida de ciertas tempestades,
de haber crecido en esta, bien en otra ladera,
de haber sorbido vagas corrientes aturdidas.

Hay gentes que trabajan el hierro y el cemento;
las hay dadas a espartos, o a conservas, o a granos,
o a lanas, o a anilinas, o a vinos, o a carbones;
las hay que sólo charlan y ponen telegramas
mas sirven a su modo;
las hay que entienden mucho de amiantos o de grasas,
de prensas, celulosas, electrodos, nitratos;
las hay, como nosotros, dadas a la madera,
unidas por las sierras, los tupis, las machihembras,
las herramientas fieras del héroe prometeico
que entre otras nos concretan
la tarea del hombre con dos manos, diez dedos.

Tales son los oficios. Tales son las materias.
Tal la forma de asalto del amor de la nuestra,
la tuya, Andrés, la mía.
Tal la oscura tarea que impone el ser un hombre.
Tal la humildad que siento. Tal el peso que acepto.
Tales los atrevidos esfuerzos contra un mundo
que quisiera seguirse sin pena y sin cambio,
pacífico y materno,
remotamente manso, durmiendo en su materia.
Tales, tercos, rebeldes, nosotros, con dos manos,
transformándolo, fieros, construimos un mundo
contra naturaleza, gloriosamente humano.

Tales son los oficios. Tales son las materias.
Tales son las dos manos del hombre, no ente abstracto.
Tales son las humildes tareas que precisan
la empresa prometeica.
Tales son los trabajos comunes y distintos;
tales son los orgullos, las rabias insistentes,
los silencios mortales, los pecados secretos,
los sarcasmos, las llamas, los cansancios, las lluvias;
tales las resistencias no mentales que, brutas,
obligan a los hombres a no explicar lo que hacen;
tales sus peculiares maneras de no hablarse
y unirse, sin embargo.

Mira, Andrés, a los hombres con sus manos capaces,
con manos que construyen armarios y dínamos,
y versos y zapatos;
con manos que manejan furiosas herramientas,
fabrican, eficaces, tejidos, radios, casas,
y otras veces se quedan inmóviles y abiertas
sobre ese blanco absorto de una cuartilla muerta.
Manos raras, humanas;
manos de constructores, manos de amantes fieles
hechas a la medida de un seno acariciado;
manos desorientadas que el sufrimiento mueve
a estrechar fuertemente, buscando la una en la otra.

Están así los hombres
con sus manos fabriles o bien sólo dolientes,
con manos que a la postre no sé para qué sirven.
Están así los hombres vestidos, con bolsillos
para el púdico espanto de esas manos desnudas
que se miran a solas, sintiéndolas extrañas.
Están así los hombres y, en sus ojos, cambiadas,
las cosas de muy dentro con las cosas de fuera,
y el tranvía, y las nubes, y un instinto —un hallazgo—,
todo junto, cualquiera,
todo único y sencillo, y efímero, importante,
como esas cien nonadas que pasan o no pasan.

Mira, Andrés, a los hombres, ya sentados, ya andando,
tan raros si nos miran seriamente callados,
tan raros si caminan, trabajan o se matan,
tan raros si nos odian, tan raros si perdonan
el daño inevitable,
tan raros que si ríen nos enseñan los dientes,
tan raros que si piensan se doblan de ironía.
Mira, Andrés, a estos hombres.
Míralos. Yo te miro. Mírame si es que aguantas.
Dime que no vale la pena de que hablemos,
dime cuánto silencio formó tu ser obrero,
qué inútilmente escribo, qué mal gusto despliego.

Mira, Andrés, cómo estamos unidos pese a todo,
cómo estamos estando, qué ciegamente amamos.
Aunque ya las palabras no nos sirven de nada,
aunque nuestras fatigas no puedan explicarse
y se tuerzan las bocas si tratamos de hablarnos,
aunque desesperados,
bien sea por inercia, terquedad o cansancio,
metafísica rabia, locura de existentes
que nunca se resignan, seguimos trabajando,
cavando en el silencio,
hay algo que conmueve y entiendes sin ideas
si de pronto te estrecho febrilmente la mano.

La mano, Andrés. Tu mano, medida de la mía.

A BLAS DE OTERO

Amigo Blas de Otero: Porque sé que tú existes,
y porque el mundo existe, y yo también existo,
porque tú y yo y el mundo nos estamos muriendo,
gastando nuestras vueltas como quien no hace nada,
quiero hablarte y hablarme, dejar hablar al mundo
de este dolor que insiste en todo lo que existe.

Vamos a ver, amigo, si esto puede aguantarse:
El semillero hirviente de un corazón podrido,
los mordiscos chiquitos de las larvas hambrientas,
los días cualesquiera que nos comen por dentro,
la carga de miseria, la experiencia un residuo,
las penas amasadas con lento polvo y llanto.

Nos estamos muriendo por los cuatro costados,
y también por el quinto de un Dios que no entendemos.
Los metales furiosos, los mohos del cansancio,
los ácidos borrachos de amarguras antiguas,
las corrupciones vivas, las penas materiales...
todo esto tú sabes, todo esto y lo otro.

Tú sabes. No perdonas. Estás ardiendo vivo.
La llama que nos duele quería ser un ala.
Tú sabes y tu verso pone el grito en el cielo.
Tú, tan serio, tan hombre, tan de Dios aun si pecas,
sabes también por dentro de una angustia rampante,
de poemas prosaicos, de un amor sublevado.

Nuestra pena es tan vieja que quizá no sea humana:
ese mugido triste del mar abandonado,
ese temblor insomne de un follaje indistinto,
las montañas convulsas, el éter luminoso,
un ave que se ha vuelto invisible en el viento,
viven, dicen y sufren en nuestra propia carne.

Con los cuatro elementos de la sangre, los huesos,
el alma transparente y el yo opaco en su centro,
soy el agua sin forma que cambiando se irisa,
la inercia de la tierra sin memoria que pesa,
el aire estupefacto que en sí mismo se pierde,
el corazón que insiste tartamudo afirmando.

Soy creciente. Me muero. Soy materia. Palpito.
Soy un dolor antiguo como el mundo que aún dura.
He asumido en mi cuerpo la pasión, el misterio,
la esperanza, el pecado, el recuerdo, el cansancio,
Soy la instancia que elevan hacia un Dios excelente
la materia y el fuego, los latidos arcaicos.

Debo salvarlo todo si he de salvarme entero.
Soy coral, soy muchacha, soy sombra y aire nuevo,
soy el tordo en la zarza, soy la luz en el trino,
soy fuego sin sustancia, soy espacio en el canto,
soy estrella, soy tigre, soy niño y soy diamante
que proclaman y exigen que me haga Dios con ellos.

¡Si fuera yo quien sufre! ¡Si fuera Blas de Otero!
¡Si sólo fuera un hombre pequeñito que muere
sabiendo lo que sabe, pesando lo que pesa!
Mas es el mundo entero quien se exalta en nosotros
y es una vieja historia lo que aquí desemboca.
Ser hombre no es ser hombre. Ser hombre es otra cosa.

Invoco a los amantes, los mártires, los locos
que salen de sí mismos buscándose más altos.
Invoco a los valientes, los héroes, los obreros,
los hombres trabajados que duramente aguantan
y día a día ganan su pan, mas piden vino.
Invoco a los dolidos. Invoco a los ardientes.

Invoco a los que asaltan, hiriéndose, gloriosos,
la justicia exclusiva y el orden calculado,
las rutinas mortales, el bienestar virtuoso,
la condición finita del hombre que en sí acaba,
la consecuencia estricta, los daños absolutos.
Invoco a los que sufren rompiéndose y amando.

Tú también, Blas de Otero, chocas con las fronteras,
con la crueldad del tiempo, con límites absurdos,
con tu ciudad, tus días y un caer gota a gota,
con ese mal tremendo que no te explica nadie.
Irónicos zumbidos de aviones que pasan
y muertos boca arriba que no, no perdonamos.

A veces me parece que no comprendo nada,
ni este asfalto que piso, ni ese anuncio que miro.
Lo real me resulta increíble y remoto.
Hablo aquí y estoy lejos. Soy yo, pero soy otro.
Sonámbulo transcurro sin memoria ni afecto,
desprendido y sin peso, por lúcido ya loco.

Detrás de cada cosa hay otra cosa que es la misma,
idéntica y distinta, real y a un tiempo extraña.
Detrás de cada hombre un espejo repite
los gestos consabidos, mas lejos ya, muy lejos.
Detrás de Blas de Otero, Blas de Otero me mira,
quizá me da la vuelta y viene por mi espalda.

Hace aún pocos días caminábamos juntos
en el frío, en el miedo, en la noche de enero
rasa con sus estrellas declaradas lucientes,
y era raro sentirnos diferentes, andando.
Si tu codo rozaba por azar mi costado,
un temblor me decía: «Ese es otro, un misterio.»

Hablábamos distantes, inútiles, correctos,
distantes y vacíos porque Dios se ocultaba,
distintos en un tiempo y un lugar personales,
en las pisadas huecas, en un mirar furtivo,
en esto con que afirmo: «Yo, tú, él, hoy, mañana»,
en esto que separa y es dolor sin remedio.

Tuvimos aún que andar, cruzar calles vacías,
desfilar ante casas quizá nunca habitadas,
saber que una escalera por sí misma no acaba,
traspasar una puerta lo que es siempre asombroso,
saludar a otro amigo también raro y humano,
esperar que dijeras era un milagro: Dios al fin escuchaba.

Todo el dolor del mundo le atraía a nosotros.
Las iras eran santas; el amor, atrevido;
los árboles, los rayos, la materia, las olas,
salían en el hombre de un penar sin conciencia,
de un seguir por milenios, sin historia, perdidos.
Como quien dice «sí», dije Dios sin pensarlo.

Y vi que era posible vivir, seguir cantando.
Y vi que el mismo abismo de miseria medía
como una boca hambrienta, qué grande es la esperanza.
Con los cuatro elementos, más y menos que hombre,
sentí que era posible salvar el mundo entero,
salvarme en él, salvarlo, ser divino hasta en cuerpo.

Por eso, amigo mío, te recuerdo, llorando;
te recuerdo, riendo; te recuerdo, borracho;
pensando que soy bueno, mordiéndome las uñas,
con este yo enconado que no quiero que exista,
con eso que en ti canta, con eso en que me extingo
y digo derramado: amigo Blas de Otero.

A PABLO NERUDA

Te escribo desde un puerto.
La mar salvaje llora.
Salvaje, y triste, y solo, te escribo abandonado.
Las olas funerales redoblan el vacío.
Los megáfonos llaman a través de la niebla.
La pálida corola de la lluvia me envuelve.
Te escribo desolado.

El alma a toda orquesta,
la pena a todo trapo,
te escribo desde un puerto con un gemido largo.
¡Ay focos encendidos en los muelles sin gente!
¡Ay viento con harapos de música arrastrada,
campanas sumergidas y gargantas de musgo!
Te escribo derrotado.

Soy un hombre perdido.
Soy mortal. Soy cualquiera.
Recuerdo la ceniza de su rostro de nardo,
el peso de tu cuerpo, tus pasos fatigosos,
tu luto acumulado, tu montaña de acedia,
tu carne macilenta colgando en la butaca,
tus años carcelarios.

Caliente y sudorosa,
obscena, y triste, y blanda,
la butaca conserva, femenina, aquel asco.
La pesadumbre bruta, la pena sexual, dulce,
las manchas amarillas con su propio olor acre,
esa huella indecente de un hombre que se entrega,
lo impúdico: tu llanto.

Viviendo, viendo, oyendo,
sucediéndote a ciegas,
lamiendo tus heridas, reptabas por un fango
de dulces linfas gordas, de larvas pululantes,
letargos vegetales y muertes que fecundan.
Seguías, te seguías sin vergüenza, viviendo,
¡oh blando y desalmado!

Tú, cínico, remoto,
dulce, irónico, triste;
tú, solo en tu elemento, distante y desvelado.
No era piedad la anchura difusa en que flotabas
con tu sonrisa ambigua. Fluías torpemente,
pasivo, indiferente, cansado como el mundo,
sin un yo, desarmado.

Estaciones, transcursos,
circunstancias confusas,
oceánicos hastíos, relojes careados,
eléctricos espartos, posos inconfesables,
naufragios musicales, materias espumosas
y noches que tiritan de estrellas imparciales,
te hicieron más que humano.

Allí todo se funde.
Los objetos no objetan.
Liso brilla lo inmenso bajo un azul parado
y en las plumas sedantes la luz del mundo escapa,
sonríe, tú sonríes, remoto, indiferente,
bestial, grotesco, triste, cruel, fatal, adorado
como un ídolo arcaico.

Sin intención, sin nombre,
sin voluntad ni orgullo,
promiscuo, sucio, amable, canalla, nivelado,
capaz de darte a todo, común, diseminabas
podrido las semillas amargas que revientan
en la explosión brillante de un día sin memoria.
No eras ni alto ni bajo.

La doble ala del fénix:
furor, melancolía,
el temblor luminoso de la espira absorbente;
la lluvia consentida que duerme en los pianos;
las canciones gangosas lentamente amasadas;
los ojos de paloma sexuales y difuntos;
cargas opacas; pactos.

Caricias o perezas,
extensiones absortas
en donde a veces somos tan tercamente abstractos
y otras veces los pelos fosforecen sexuales,
y fría, dulce, ansiosa, la lisa piel de siempre,
serpiente, silba, sorbe y envuelve en sus anillos
un triste cuerpo amado.

No hay clavo último ardiendo,
no hay centro diamantino,
no hay dignidad posible cuando uno ha visto tanto
y está triste, está triste, sencillamente triste,
se entrega atribulado y en lo efímero sabe
ser otro con los otros, de los otros, en otros:
seguir, seguir flotando.

¡Oh inmemorial, oh amigo
amorfo, indiferente!
Deslizándote denso de plasmas milenarios,
tardío, legamoso de vidas maceradas,
cubierto de amapolas nocturnas, indolente,
por tu anchura sin ojos ni límites, acuosa,
te creía acabado.

Mas hoy vuelves, proclamas,
constructor, la alegría;
te desprendes del caos; determinas tus actos
con voluntad terrena y aliento floral, joven.
Ni más ni menos que hombre, levantas tu estatua,
recorres paso a paso tu más acá, lo afirmas,
llenas tu propio espacio.

Los jóvenes obreros,
los hombres materiales,
la gloria colectiva del mundo del trabajo
resuenan en tu pecho cavado por los siglos.
Los primeros motores, las fuerzas matinales,
la explotación consciente de una nueva esperanza
ordenan hoy tu canto.

Contra tu propia pena,
venciéndote a ti mismo,
apagando, olvidando, tú sabes cuánto y cuánto,
cuánta nostalgia lenta con cola de gran lujo,
cuánta triste sustancia cotidiana amasada
con sudor y costumbres de pelos, lluvias, muertes,
escuchas un mandato.

Y animas la confianza
que en ti quizá no existe;
te callas tus cansancios de liquen resbalado;
te impones la alegría como un deber heroico.
¡Por las madres que esperan, por los hombres que aún ríen,
debemos de ponernos más allá del que somos,
sirviéndolos, matarnos!

Con rayos o herramientas,
con iras prometeicas,
con astucia e insistencia, con crueldad y trabajo,
con la vida en un puño que golpea la hueca
cultura de una Europa que acaricia sus muertos,
con todo corazón que, valiente, aún insiste,
del polvo nos alzamos.

Cantemos la promesa,
quizá tan solo un niño,
unos ojos que miran hacia el mundo asombrados,
mas no interrogan; claros, sin reservas, admiran.
¡Por ellos combatimos y a veces somos duros!
¡Bastaría que un niño cualquiera así aprobara
para justificarnos!

Te escribo desde un puerto,
desde una costa rota,
desde un país sin dientes, ni párpados, ni llanto.
Te escribo con sus muertos, te escribo por los vivos,
por todos los que aguantan y aún luchan duramente.
Poca alegría queda ya en esta España nuestra.
Mas, ya ves, esperamos.

ESPAÑA EN MARCHA

Nosotros somos quien somos.
¡Basta de Historia y de cuentos!
¡Allá los muertos! Que entierren como Dios manda a sus muertos.

Ni vivimos del pasado,
ni damos cuerda al recuerdo.
Somos, turbia y fresca, un agua que atropella sus comienzos.

Somos el ser que se crece.
Somos un río derecho.
Somos el golpe temible de un corazón no resuelto.

Somos bárbaros, sencillos.
Somos a muerte lo ibero
que aún nunca logró mostrarse puro, entero y verdadero.

De cuanto fue nos nutrimos,
transformándonos crecemos
y así somos quienes somos golpe a golpe y muerto a muerto.

¡A la calle! que ya es hora
de pasearnos a cuerpo
y mostrar que, pues vivimos, anunciamos algo nuevo.

No reniego de mi origen
pero digo que seremos
mucho más que lo sabido, los factores de un comienzo.

Españoles con futuro
y españoles que, por serlo,
aunque encarnan lo pasado no pueden darlo por bueno.

Recuerdo nuestros errores
con mala saña y buen viento.
Ira y luz, padre de España, vuelvo a arrancarte del sueño.

Vuelvo a decirte quién eres.
Vuelvo a pensarte, suspenso.
Vuelvo a luchar como importa y a empezar por lo que empiezo.

No quiero justificarte
como haría un leguleyo,
Quisiera ser un poeta y escribir tu primer verso.

España mía, combate
que atormentas mis adentros,
para salvarme y salvarte, con amor te deletreo.

DESPEDIDA

Quizás, cuando me muera,
dirán: Era un poeta.
Y el mundo, siempre bello, brillará sin conciencia.

Quizás tú no recuerdes
quién fui, mas en ti suenen
los anónimos versos que un día puse en ciernes.

Quizás no quede nada
de mí, ni una palabra,
ni una de estas palabras que hoy sueño en el mañana.

Pero visto o no visto,
pero dicho o no dicho,
yo estaré en vuestra sombra, ¡oh hermosamente vivos!

Yo seguiré siguiendo,
yo seguiré muriendo,
seré, no sé bien cómo, parte del gran concierto.

LA POESÍA ES UN ARMA CARGADA DE FUTURO

Cuando ya nada se espera personalmente exaltante,
mas se palpita y se sigue más acá de la conciencia,
fieramente existiendo, ciegamente afirmado,
como un pulso que golpea las tinieblas,

cuando se miran de frente
los vertiginosos ojos claros de la muerte,
se dicen las verdades:
las bárbaras, terribles, amorosas crueldades.

Se dicen los poemas
que ensanchan los pulmones de cuantos, asfixiados,
piden ser, piden ritmo,
piden ley para aquello que sienten excesivo.

Con la velocidad del instinto,
con el rayo del prodigio,
como mágica evidencia, lo real se nos convierte
en lo idéntico a sí mismo.

Poesía para el pobre, poesía necesaria
como el pan de cada día,
como el aire que exigimos trece veces por minuto,
para ser y en tanto somos dar un sí que glorifica.

Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejan
decir que somos quien somos,
nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno.
Estamos tocando el fondo.

Maldigo la poesía concebida como un lujo
cultural por los neutrales
que, lavándose las manos, se desentienden y evaden.
Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse.

Hago mías las faltas. Siento en mí a cuantos sufren
y canto respirando.
Canto, y canto, y cantando más allá de mis penas
personales, me ensancho.

Quisiera daros vida, provocar nuevos actos,
y calculo por eso con técnica qué puedo.
Me siento un ingeniero del verso y un obrero
que trabaja con otros a España en sus aceros.

Tal es mi poesía: poesía-herramienta
a la vez que latido de lo unánime y ciego.
Tal es, arma cargada de futuro expansivo
con que te apunto al pecho.

No es una poesía gota a gota pensada.
No es un bello producto. No es un fruto perfecto.
Es algo como el aire que todos respiramos
y es el canto que espacia cuanto dentro llevamos.

Son palabras que todos repetimos sintiendo
como nuestras, y vuelan. Son más que lo mentado.
Son lo más necesario: lo que no tiene nombre.
Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos.

lunes, 18 de abril de 2016

UNA RETROSPECTIVA REVISA LA OBRA DE AGUSTÍN PAREJO SCHOOL, COLECTIVO MALAGUEÑO QUE HIZO DE LA IRREVERENCIA SEÑA DE SU ACTIVISMO POLÍTICO Y ARTÍSTICO A FINALES DEL SIGLO XX


'Du côte de l’URSS', de Agustín Parejo School.

UNA MEMORIA INQUIETANTE

Walter Benjamin admiraba a los dadaístas porque propiciaban la sintonía del espectador antes que encandilar su mirada, dejaban al autor en el anonimato y sacrificaban al valor de uso de la obra cualquier posible valor de cambio. Interesa recordarlo porque a veces, al afinar el concepto de aura, se olvida lo mejor: que su pérdida suprime la pasividad del espectador, anula la superioridad del llamado creador y, por último, vuelve la espalda al mercado. ¿Qué queda entonces del arte? Abusando de Benjamin, diré que permanece la huella. Si el aura remite a una lejanía emparentada con grandes ideas, la huella acerca algo de modo que nos interrogue e inquiete.

Eso buscaron, entre 1980 y 1995, 11 jóvenes malagueños reunidos eventualmente en la Agustín Parejo School (APS). Eventualmente, porque el grupo no era estable, sólo surgía cuando creían tener algo que decir. Entre los proyectos, Du côte de ­l’URSS: un cartel con 16 banderas soviéticas, el campo rojo interrumpido con ondulados azules alusivos al mar, y la hoz y el martillo, en amarillo brillante, como si del sol se tratara. Un acento agudo sobre la e podía convertir el título en alegato prosoviético. ¿Propaganda soviética o publicidad turística? Las dos cosas porque el aguijón de lo que llamaban agit-pop era doble: ironizar sobre los símbolos de una Unión Soviética ya senil y también sobre la devoción con que muchos españoles durante la Transición hicieron suyos esos símbolos. Por eso unen al cartel un vídeo de mítines rebosantes de banderas rojas, y añaden otras banderas, las del Betis y el Málaga, con relucientes hoces y martillos.

Los de APS multiplicaron las acciones: convirtieron manifestaciones en desfiles procesionales y un buen día, en Fuengirola, nombraron candidato a un miembro del grupo y al grito de ¡vota Moreno!, ¡vota con garbo!, cumplieron todo el ritual: pegada de carteles, despliegue de pancartas, reparto de pegatinas. Hicieron una propuesta imposible: retirar la estatua del segundo marqués de Larios de su emplazamiento, frente a la calle que lleva su nombre. La escultura del prócer malagueño fue arrojada al mar durante la II República. APS sólo pedía que fuera retirada un tiempo y sustituida por la de El trabajador, colocada por Benlliure al pie del monumento. El Ayuntamiento democrático rechazó la idea, pero los proponentes la popularizaron: pintadas con siluetas estarcidas del nuevo aspecto del monumento y panfletos de la etiqueta de Gin Larios convertida en Sin Larios.

El humor no debe oscurecer el doble activismo del grupo. En el terreno político, APS subrayaba las limitaciones de los partidos: promesas de imposible cumplimiento, ansia de respetabilidad, renuncia a enfrentarse a poderes sociales. En 1984, Rafael Delas, supuesto miembro de los Comandos Autónomos Anticapitalistas, fue acribillado con postas ante unas rocas de la ría de Pasajes (el proceso contra la policía permanecía abierto en 2014, 30 años después). APS tomó la silueta forense del cadáver, con las marcas de los impactos recibidos (12 de ellos mortales), y escribieron debajo “San Sebastián”.

El activismo del colectivo se extendió también al arte. Aquellos años conmovieron la alta cultura: surgieron nuevos centros de arte, nació Arco, comenzaron a comprar Ayuntamientos y autonomías, y el año 1992 despertaba esperanzas. Ante semejante pleamar, APS eligió un arte precario y sin precio. Sus integrantes preferían matar el arte antes que aislarlo de la vida. En esa perspectiva apareció Lenin Cumbe, ecuatoriano imaginario con su visión de la colonización en pantallas de televisores desechados, y las propuestas relativas a La sábana santa: de un lado, diseños de moda basados en el santo lienzo, y de otro, sus usos como mortaja de dos culturas desfallecientes, la europea y la española. Serigrafiaron mortuorias en grandes lienzos: “Versailles, Postdam (sic), Disneyworld”, dice una de ellas, y la otra, “El noventa y ocho, el veintisiete y el yes very well”.

Recordar aquel colectivo anónimo y precario anima e inquieta: sus obras se mantienen frescas pero sugieren cuán serio se ha vuelto este país o, quizá, cuánto ha envejecido.


Agustín Parejo School. Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. Sevilla. Hasta el 22 de mayo.

Artículo de Juan Bosco Díaz Urmeneta, para Babelia (El País)

Bandera del Betis, con la hoz y el martillo

domingo, 17 de abril de 2016

"CIUDADANO NEGRÍN", DOCUMENTAL SOBRE EL ÚLTIMO PRESIDENTE DEL GOBIERNO DE LA II REPÚBLICA



"CIUDADANO NEGRÍN"

Juan Negrín, jefe de Gobierno de la Segunda República entre 1937 y 1945, vivió los últimos años de su exilio en el anonimato, ocupado de la tutela de sus nietos Carmen y Juan, los vástagos de su hijo Rómulo, una víctima circunstancial de las sospechas y persecuciones de la Guerra Fría. Nunca respondió a la infinidad de maledicencias que tanto vencedores como vencidos de la guerra española, vertieron sobre su figura, ensombreciéndola hasta nuestros días.

Supo, nada más llegar a la jefatura de Gobierno, que saldría malparado. Convertido en el chivo expiatorio de unos y otros, actuó siempre de acuerdo a su conciencia, sin hurtarse una sola vez al deber que le marcó el destino. Ha debido pasar mucho tiempo, cuando el olvido pesa más que todas las afrentas, para que el trabajo de los historiadores, distanciado de los antagonismos y deslealtades que acarrea todo conflicto bélico, pudiera restituir el calado intelectual, político e histórico de Juan Negrín, finalmente reconocido como un exponente clave de la Edad de Plata de la ciencia española y como el gran estadista de España en guerra.


sábado, 16 de abril de 2016

"DOLOR DE ESPAÑA", DE WIFREDO LAM


Dolor de España
Wifredo Lam
1938
Gouache sobre papel
105 x 75 cm.
Colección Joyce y Sam Mansour. París. Francia.

De los muchos voluntarios cubanos que participaron en la Guerra Civil Española, el pintor Wifredo Lam merece una atención singular. Nacido en Sagua La Grande en 1902, llega a Madrid en 1923 para estudiar pintura y permanece en España hasta principios de 1938 cuando decide marcharse a París. Durante su estancia en España se casa con Eva Piriz con la que tiene un hijo, pero la mujer y el niño mueren de tuberculosis antes del estallido de la guerra. Es en ese momento cuando un viejo amigo, Pepe de la Fuente, le habla de Marx y Lenin y no duda en afirmar que llegó "a comprender y abrazar el marxismo, brújula ideológica que me ha guiado desde entonces". En 1936 es sorprendido por el estallido de la guerra, se inscribe en la FUHA, federación de estudiantes universitarios latinoamericanos de izquierda, y no duda en alistarse en el 5º Regimiento junto a otros cubanos como el músico Julio Cuevas o el escultor Pablo Porras Gener. Así es como recordaba en una de sus entrevistas a Antonio Núñez Jiménez el apoyo de los cubanos a la defensa de la República española:

En la Guerra Civil Española miles de voluntarios combatieron al lado nuestro. Muchos cubanos dieron su ejemplo internacionalista al formar parte de la Brigada Lincoln. El más destacado de ellos, Pablo de la Torriente Brau, murió en Majadahonda. Como Pablo, otros muchos quedaron sepultados por la metralla en esa tierra tan querida.

Se conservan varias fotografías de 1936 en las que se ve a Lam junto a otros militares o junto a la que fue su compañera en la vida y en la lucha, Balbina Barrera. Durante esos años estuvo en contacto con intelectuales antifascistas españoles y el Partido Comunista le envió a trabajar a una fábrica de explosivos, lo que le provocó una grave intoxicación por la que tuvo que ser trasladado al balneario de Caldas de Montbuy. Realizó distintos anuncios para la película soviética Los marinos de Cronstadt y una serie de carteles propagandísticos en defensa de la República. Ya en Barcelona, trabajó en la Comisaría de Armamentos y en el Sindicato de Pintores de la UGT, lo que le permitió preparar una escenografía para una obra teatral ofrecida a los soldados convalecientes. Un día antes de la caída en Barcelona partió junto a su nueva compañera Helena Hozer rumbo a París.

Las obras que mejor representan esta etapa en la que la pintura se convirtió para Lam en instrumento de combate son "La guerra civil" (1937), "El desastre" y "Dolor de España" (1938), estas dos últimas realizadas ya en Francia. Estos tres cuadros representan el sufrimiento de un país que el pintor sintió como propio y cuyo recuerdo llevaría consigo a lo largo de su vida.

En 1980 Wifredo Lam describió la dolorosa experiencia de la derrota de España, que para él -como para Alejo Carpentier y otros cubanos- sería compensada solo con el triunfo de la Revolución en 1959:

Tras la derrota, no he dejado de pensar un solo día de mi vida en los acontecimientos que se sucedieron. Es algo que viví en carne propia y no quiero olvidarlo, no voy a olvidarlo (...) Salir derrotado de España fue y es para mí un dolor tan profundo que nunca he dejado de llevarlo dentro. En la amada tierra española dejaba a Eva y a mi hijo, muertos. Dejaba allí también a muchos hermanos de lucha. Aquella derrota fue como si bajara el telón de una obra de teatro que solo volvería a levantarse con el triunfo de la Revolución Cubana.

Fuente: Hispanoamericanos en la guerra civil española

jueves, 14 de abril de 2016

85 ANIVERSARIO DE LA PROCLAMACIÓN DE LA II REPÚBLICA



Himno de Riego interpretado por la Orquesta Internacional de Praga en Concierto Pilar 2008, 1808-2008 Bicentenario de los Sitios de Zaragoza en el Auditorio de Zaragoza, 13 de octubre de 2008.

miércoles, 13 de abril de 2016

"COMBATIENTES", UN LIBRO DE LA GENERACIÓN QUE COMBATIÓ LA DICTADURA DE BATISTA

El libro que a bien se ha decidido presentar en el Encuentro de Historiadores como parte de las actividades de la Feria Internacional del Libro de La Habana 2016, acogido por la Casa del Alba Cultural- es el resultado de una acuciosa investigación sobre la participación de aquella parte de la sociedad cubana que se enfrentó en heroica lucha a la dictadura de Fulgencio Batista, tanto en la clandestinidad de las ciudades como en las acciones guerrilleras en el campo, esos que en la historia de Cuba se les conoce e identifica como combatientes. A ellos está dedicada esta magnífica y enjundiosa obra.

Este es el tercer resultado de un proyecto de investigación conjunto entre la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) y la Universidad de Utrecht, en Holanda, titulado Cuba: la generación revolucionaria 1952-1961.
 
Producto de un loable esfuerzo colectivo, Combatientes es una obra escrita asumida por cuatro doctores, tres cubanos y un holandés: El doctor en Ciencias Filosóficas José Bell Lara, que dirige el área Política y Desarrollo y el equipo de investigación sobre la Revolución Cubana, de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO); la doctora en Educación Tania Caram León; la doctora en Ciencias Económicas Delia Luisa López García y el doctor en Ciencias Sociales Dirk Kruijt, de la Universidad de Utrecht, Holanda.

Todos son autores de varios libros, y en el caso de los tres cubanos, son profesores titulares y consultantes de la Universidad de La Habana y profesores investigadores con rango regional de FLACSO Cuba.

Posiblemente la mirada desde diferentes ciencias, en su enfoque interdisciplinario, haya influido en la integralidad del tema que se aborda como tal vez no se hubiese alcanzado desde una perspectiva más particular. Tal enfoque constituye, sin dudas, un valor agregado de la obra que relata el modo en que cada “testimoniante” se incorporó a la defensa de la Revolución, por qué lo hizo y cómo, en la misma medida que se transformaba la realidad social, se fue transformando su conciencia hasta abrazar los más elevados sentimientos de justicia, igualdad, soberanía, solidaridad, patriotismo y bienestar popular.

Uno de los aspectos que a nuestro modo de ver resulta de interés en la obra consiste en la cantidad y composición sociodemográfica de los “testimoniantes” seleccionados, lo que sin dudas, permite tener una visión totalizadora y abarcadora de un amplio espectro sociopolítico de la sociedad cubana en los años previos y durante la insurrección armada y del modo de pensar de aquellos que decidieron incorporarse a la lucha contra la tiranía batistiana. Los autores realizaron 30 entrevistas semiestructuradas a igual cifra de combatientes, selección en la que fueron apoyados por la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana de la provincia de La Habana y constituyen las fuentes primarias de la investigación. De ellos 13 mujeres y 17 hombres. Están representadas las seis provincias de Cuba existentes entonces en la división político administrativa la Isla, según el origen de los combatientes entrevistados. Por la procedencia social, 7 provienen de la clase obrera, en tanto de la clase media son 20 y 3 campesinos pobres.

Otro hecho de singular importancia lo constituye, sin dudas, la militancia o filiación política de los seleccionados, representada en las organizaciones en que militaron, de modo tal, que se pueden apreciar, desde diferentes posiciones, las aspiraciones políticas y la disposición interior para enfrentar el régimen de facto surgido tras el golpe de Estado del 10 de marzo de 1952 por una amplia representación del pueblo cubano: Asociaciones estudiantiles, 20; Movimiento 26 de Julio, 26; Directorio Revolucionario 13 de Marzo, 3; Frente Cívico de Mujeres martianas, 1 y de la Juventud socialista, 2. Una simple operación matemática nos lleva a una cantidad superior a los 30 encuestados; ya que algunos de ellos militaban en más de una organización política.

El libro, como dicen los autores, no es una historia de la insurrección desatada contra la dictadura batistiana ni un análisis de esta. Tampoco es un libro de historias de vida. Es un libro de vivencias personales sobre esta lucha. Téngase en cuenta por el lector que el promedio de edad de los entrevistados es de 76 años. De ahí que los autores asumieran como uno de los principios básicos en su elaboración la responsabilidad del entrevistado en el testimonio que ofrece y por tanto, no responden por las incongruencias o versiones diferentes de los acontecimientos.

Las actividades en las que participaron los entrevistados ─en la clandestinidad en acción y sabotaje, propaganda, movilizaciones populares, mensajería, traslado de armas hacia la Sierra, combatientes, médicos y pertrechos, 23; en la clandestinidad y guerrillas o Ejército Rebelde, 6; y en apoyo de todo tipo, 1─; recogidas en el libro, no solo permite al exigente lector tener una visión más completa de la tipología de las acciones armadas desarrolladas durante el proceso revolucionario, sino también tener valoraciones de aquellos que desde diferentes situaciones, todas complejas, de alto riesgo para la vida y de vital importancia en el desenlace final de la lucha contra la dictadura, asumieron la posición de combatientes.

Si por su contenido Combatientes es un importante libro de consulta sobre esta etapa del proceso revolucionario cubano, por la información adicional que brindan los autores mediante las notas al pie, su valor se multiplica. En cada una de ellas, bien seleccionadas e intencionalmente concebidas, el lector encuentra la información adicional que le permite entender con mayor claridad y precisión el asunto que se trata.

Los autores decidieron ofrecer al lector una información de alto valor histórico y teórico metodológico, no recogida de ese modo en otros textos, mediante la inclusión de varios anexos de gran utilidad, como La formación de las Fuerzas Armadas cubanas, Los órganos represivos de la dictadura (1952-1958); Sobre la Policía Nacional y sus unidades en La Habana; Cambios introducidos por el régimen de Fulgencio Batista (1952-1958); Estaciones de la División Central de la Policía Nacional y su ubicación y La estructura de la represión en Santiago de Cuba, entre otros, los cuales dan una visión más amplia de la sociedad cubana de la década del 50 y de los principales órganos sobre los cuales se asentaba el poder de Fulgencio Batista
 
A los autores hay que reconocer el esmerado y cuidadoso trabajo realizado al adicionar las fichas con la síntesis biográfica de 292 personalidades que fueron citados por los entrevistados, muchos de los cuales no solo no aparecen en otros textos, sino que además, no se tiene información sobre ellos.

El libro Combatientes no solo constituye una importante fuente para aquellos interesados en conocer las interioridades de la guerra, las motivaciones más íntimas de los que en ella participaron, las transformaciones en el pensamiento y la conducta operados a lo largo de la lucha armada en la Sierra o en las ciudades, el valor de las ideas que se defienden, el sentido del deber y la responsabilidad ante los destinos de la patria, el papel del líder y su capacidad para arrastrar tras de sí a una heterogénea masa de hombres, sino también una amplia base de datos para consultar y acercarse a la realidad de la guerra irregular con amplio respaldo popular que ocasionó la derrota a un ejército numéricamente superior en recursos de todo tipo, mejor armado, entrenado y preparado y que contó con el apoyo del gobierno de los Estados Unidos.

La historiografía de la historia de Cuba y, en particular de la Revolución cubana, se enriquece cualitativamente con este libro.

Al leer Combatientes se comprende mejor por qué la Revolución cubana ha transcurrido como un proceso ininterrumpido de transformaciones de liberación nacional, social y socialista en un complejo contexto en el que la conciencia revolucionaria de la generación que luchó por ella también se fue transformando hasta convertirse en socialista.

Sin dudas Combatientes, el libro de Bell, Tania, Delia y Dirk, es un texto que vale la pena leer.

Reseña de Elvis R. Rodríguez Rodríguez (Fuente: Rebelión).

El doctor Elvis R. Rodríguez Rodríguez es historiador. Vicepresidente del Instituto de Historia de Cuba.