domingo, 25 de febrero de 2018

"LAS CIGARRERAS", DEL PINTOR SEVILLANO GONZALO BILBAO


Las cigarreras
Gonzalo Bilbao
Óleo sobre lienzo
305 x 402 cm.
1915
Museo de Bellas Artes de Sevilla

"Con Las Cigarreras, Bilbao, que dedicó gran parte de su producción a representar a la mujer sevillana de su tiempo, realiza un simbólico homenaje a la mujer trabajadora. En este cuadro, que se puede considerar, a un tiempo, como costumbrista, regionalista y simbolista, el pintor muestra la implicación social de su pintura al superar la tópica representación folclórica de tipos populares andaluces para expresar su sentimiento ante la abnegación, el esfuerzo y la dignidad de estas mujeres, pertenecientes a las clases sociales más humildes, proletarias que desarrollando su trabajo cotidiano adquieren en su obra la condición de heroínas. El valor icónico del cuadro y su profundo mensaje simbólico fueron compartidos por los sevillanos, que recompensaron al artista con un multitudinario homenaje popular, al que acudieron masivamente las cigarreras, con el que se le recibe en la capital andaluza en desagravio a la no concesión, tras reñida pugna con el valenciano Francisco Domingo Marqués, de la Medalla de Honor a la que optaba en la exposición madrileña de 1915."

(…)

“Las cigarreras solían comenzar en el trabajo en torno a los 13 años y no existía un límite de edad para la jubilación. A principios del siglo XX cobraban un salario de 2 pesetas diarias, lo que suponía menos de la mitad de un jornal masculino, pero que permitía a estas mujeres ser independientes y mantener o colaborar al mantenimiento de sus familias. Además, las que eran madres, y muchas de ellas lo eran y solteras, estaban autorizadas a llevar con ellas a sus bebés para darles el pecho y podían tener a su lado en el taller a los niños en cunas que la propia fábrica les facilitaba, lo que permitía que sin dejar de liar los cigarros pudiesen mecer con el pie las camitas, con lo que las sufridas operarias compartían su trabajo con las obligaciones maternas.

Son tiempos en los que los trabajadores no tienen más derecho que el salario que cobran, no existe ningún tipo de atención social por parte del Estado, no hay seguro de enfermedad, alumbramiento, viudedad, orfandad o incapacidad y tampoco pensiones de jubilación. En este difícil ambiente las cigarreras, sin embargo, logran constituir como colectivo una asociación de tipo benéfico, una hermandad de socorro, aún sin carácter sindical, en la que a través de un fondo común se pagaban los subsidios por enfermedad, los días de baja por maternidad y la asistencia a las ancianas que ya no podían realizar su labor. Estas mujeres, estimadas y admiradas por su duro trabajo, adquieren fuerza y, conscientes de su cualificación, serán reivindicativas, documentándose entre 1905-1916, aunque con escasos resultados, varios conflictos en los que las trabajadoras reclaman derechos elementales como la equiparación del salario con los varones, la jornada laboral de ocho horas o la regulación de los despidos, reivindicaciones que llevarán incluso a la convocatoria de grandes huelgas en el período comprendido entre 1918 y 1921″.

(…)

“Refleja aquí su preocupación por el tema de la lactancia, un asunto que el pintor conocía bien a través de su hermana menor, Flora Bilbao de Rebolledo, quien formaba parte de la junta de damas protectoras del consultorio de niños de pecho de Sevilla, una institución reivindicativa con los derechos de las trabajadoras, cuyo director, ya en 1909, pedía a los responsables de la fábrica que les concediesen una jornada dividida en dos tiempos para amamantar a los niños. Hay que tener en cuenta que hasta 1923 el derecho laboral español no establecerá con carácter general la suspensión del contrato de la mujer, con reserva del puesto de trabajo, durante un plazo de seis semanas después del parto y la norma por la que, durante el período de lactancia, las mujeres tendrán derecho dentro de la jornada laboral a una hora diaria, dividida en dos períodos de treinta minutos, para atender a la alimentación de sus pequeños.”

Fuente: http://www1.museo.depo.es/pdfarticulos/Cigarreras.pdf

No hay comentarios:

Publicar un comentario