Soldado miliciano escribiendo una carta en el frente.EXPOSICIÓN DE LA FOTÓGRAFA HÚNGARA QUE RECIBIÓ POR PARTE DEL GOBIERNO REPUBLICANO EL ENCARGO DE REALIZAR TAREAS DE PROPAGANDA.
En octubre de 1939 Katy Horna (1912-2000), la fotógrafa de origen húngaro, desembarca en Veracruz (México) procedente de Francia. Lleva consigo una pequeña caja de hojalata con 270 negativos de 6x6 impresionados por ella en el transcurso de la Guerra Civil española. Durante años espera pacientemente a que nuestro país recupere las libertades democráticas para ofrecer esa colección al Estado español. En 1983 la colección es adquirida por el Ministerio de Cultura y pasa a formar parte del patrimonio visual (junto a colecciones como las de Alfonso, Robert Capa o Albert-Louis Deschamps) sobre nuestra guerra. Hasta entonces, estas fotos habían permanecido prácticamente inéditas. Sólo tuvieron una limitada difusión en publicaciones anarquistas de la época.
Al contemplarlas ahora, es inevitable interrogarse por su inexplicable ausencia como parte de las imágenes prototípicas de la Guerra Civil ¿Azares del destino, que quiso relegarlas al oscuro silencio de una caja, o tal vez una forma de observar la guerra que no se ajustaba a los cánones del fotoperiodismo reinante entonces?
De entrada, frente a esas imágenes, la cámara de Horna parece rehuir deliberadamente los momentos álgidos o heroicos en los que se inmortalizan acontecimientos o el fragor de la batalla. En vez de todo eso, la fotógrafa opta por una visión más cercana, más ordinaria (y menos espectacular si se quiere), pero no por ello menos reveladora del drama de la guerra. Su mirada se instala en un tiempo distinto, el lapso anterior o posterior al acontecimiento. Por eso es capaz de captar algo de lo inmutable dentro del eco chirriante de la tragedia.
Antes que por su fuerza expresiva, sus campesinos, sus soldados, sus mujeres, sus niños y ancianas nos conmueven porque son retratados en su singularidad, no como meras representaciones del teatro de un suceso.
Por primera vez se exhibe en Madrid una muestra representativa de esta colección, dentro del Coloquio Internacional Imágenes de la Guerra Civil española: nuevas retóricas del miedo, organizado por la Casa de Velázquez y la Université de Paris-Est, del 8 al 10 de junio, que reunirá a destacados especialistas internacionales sobre la materia. Las ampliaciones ahora expuestas fueron realizadas para la exposición celebrada en 1992 por el Ministerio de Cultura (a través del entonces Archivo General de la Guerra Civil Española) y la Filmoteca de Castilla y León. En esta ocasión, Rafael R. Tranche (comisario artístico) e Yvan Nommick (comisario técnico) son los responsables de la exposición, que tendrá lugar en la sede de la Casa de Velázquez, en Madrid, del 8 de junio al 5 de julio. Dicha exposición no hubiera sido posible sin la inestimable colaboración del Centro Documental de la Memoria Histórica (con sede en Salamanca), que ha prestado las obras para la ocasión.
Más información: http://www.casadevelazquez.org/
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