PSUC: por Cataluña, la democracia y el socialismo
Antoni Tapies
1976
67 x 49 cm
PSUC
Antoni Tàpies (Barcelona 1923-2012), fue sin lugar a duda uno de los maestros del arte de vanguardia del siglo XX, y también alguien que dio la cara contra el franquismo (y todo lo demás o sea todo el sistema), aunque esta faceta suya quedó postergada con los años.
Hubo un Tàpies comprometido, alguien
sobre el que ha podido decir que "Su arte es un sólido motivo en favor
de la democracia, la libertad de expresión y la paz (...) en su obra se
expresa la voz de la humanidad, entendida en el sentido de la ética de
Sartre: como instrumento que apela a la acción", alguien ya nacido a
contracorriente, socialista y nacionalista por igual (es que lo segundo
sin lo primero huele mal), un “rojo” para la policía del pensamiento,
fundador de una de las movidas surrealistas más arriesgadas de la
historia del movimiento, “Dau al Set”, creado por Tàpies junto con el
poeta Joan Brossa (otro “subversivo”), más los pintores Joan Ponç y
Modest Cuixart, entre muchos otros sobre la Brigada Político-social
solía comentar que “todos los artistas eran comunistas”.
En los años setenta pues, su obra
adquirió un mayor tinte político, de reivindicación catalanista y de
oposición al régimen, generalmente con palabras y signos sobre los
cuadros, como las cuatro barras de la “senyera” (El espíritu catalán,
1971). Ese activismo le llevó igualmente a acciones como el encierro
del convento de la “Caputxinada” de Sarriá para constituir un sindicato
democrático de estudiantes (1966) o la marcha a Montserrat en protesta
por el proceso de Burgos (1970)), por la que fue encarcelado durante un
corto espacio de tiempo.
Fuente: kaos en la red
En uno de sus libros, "El arte contra la estética" (1978), dice Tápies:
ResponderEliminar"Sería como siempre inútil y empequeñecedor ir dando vueltas alrededor del tópico de mezclar en demasía el arte de crear con la obsesión de obtener públicos más extensos. Con esto, no conseguiríamos pescar hombres, sino cadáveres".
Y en otro, "La práctica del arte" (1970):
"La idea de que la finalidad del artista consiste en vender sus obras es totalmente falsa. Eso es tanto como recriminar a Marx que se hubiera propuesto tan sólo vender sus libros y dudar del valor de sus ideas por el mero hecho de que ahora los burgueses llenan con ellos sus bibliotecas".
Y en su "Memoria personal":
"La auténtica y correcta "visión" de la realidad está íntimamente relacionada con nuestro comportamiento ético, es decir, con la acción sobre la realidad en todos sus aspectos, desde el socioeconómico hasta los más espirituales, pensamiento muy coincidente con el de Marx".
Tápies, en efecto, fue alguien social y políticamente comprometido, como pintor y como persona. Me alegro de encontrar este artículo que así lo recuerda.